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Columnas y artículos de opinión
¡Damos vergüenza!
Helí Herrera Hernández
28 de diciembre de 2015
alcalorpolitico.com
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Twitter: HELÍHERRERA.es
 
Tenía en el borrador dos importantes temas para mi artículo de esta semana: Las alianzas que cuestiona el líder nacional del partido Revolucionario Institucional, Manlio Fabio Beltrones, cuando son en contra del instituto político al que pertenece, pero que defiende de manera apasionada cuando ellos la realizan de manera pragmática; y el otro era a la ya practica de separarse del Partido (de) Acción Nacional de importantes militantes que lo fueron todo mientras allí estuvieron: regidores, síndicos, alcaldes, diputados locales, federales, senadores, funcionarios del gabinete nacional, pero que cuando no les cumplen sus caprichos huyen de su partido echando pestes, terminando abriéndole surco al PRI, como alfiles, para que triunfen hombres o mujeres a los que combatieron como panistas.
 
Tenía varias ideas trazadas sobre ambos temas, como siempre acostumbro llegar los sábados por la noche para allí tomar una decisión sobre cual profundizar y estructurarlo el domingo por la mañana, dado que tiene que estar entregado ese día antes de las 4 de la tarde, así como algunos portales electrónicos y radiodifusoras también, pero cuando me enteré a distancia de la brutalidad con la que actuó la policía por órdenes de altos funcionarios estatales contra los maestros y maestras jubilados, decidí abordar este hecho porque no podemos permanecer callados ante la idiotez, abuso e insensibilidad de los que toman decisiones en Veracruz, que no actúan de la misma manera, por cierto, en casos similares.

 
Afirma el Secretario General de Gobierno, Flavino Ríos Alvarado, en una rueda de prensa desarrollada en palacio de gobierno la tarde del miércoles 23, que "fueron los abuelitos los causantes del caos vial generado en el primer cuadro de la ciudad, y que por eso ordeno el desalojo", a lo que yo le pregunto ¿Y quién es el responsable del caos financiero que priva en las finanzas gubernamentales, producto del cual no se le pagaron en tiempo sus pensiones a los maestros y maestras jubilados, pensiones que por cierto durante mas de treinta años ahorraron para recibirlas al retirarse del servicio público, mes tras mes, quincena tras quincena?
 
Si él ordenó (como lo confiesa), desalojar y golpear a los maestros por generar un caos vial, le cuestiono: ¿qué acciones ha ordenado en contra de los funcionarios públicos que se robaron el dinero de todos nosotros, y que todo mundo sabe quienes son menos él, el Gobernador y el Procurador? ¿Contra Fidel Herrera Beltrán y sus muchachos nada, a pesar que presumen sus riquezas habidas en menos de 10 años de ejercicio público? No merecemos los veracruzanos que pagamos impuestos y nos descuentan de nuestros cheques el ISR una explicación, por lo menos, porque se les debe a los prestadores de servicios, a los constructores, a los músicos, a los transportistas, a los maestros y maestras sus retroactivas y sueldos, entre otros muchos etcéteras?
 
¿A esos no hay que tocarlos ni con el pétalo de un tolete, o de unos toques eléctricos como el que les aplicaron a varios mentores como la estimada maestra Rosario Piña, a pesar que es por culpa de ellos que estos jubilados estén manifestándose no pidiéndole al gobierno nada regalado, sino lo que justa y legalmente les corresponde? Miren que se necesita ser un cara dura para salir a dar estas declaraciones, y un funcionario perverso por haber ordenado el desalojo, los golpes y el secuestro de algunos maestros y hasta periodistas.

 
Pero hay más preguntas: Que el secretario de Gobierno nos diga públicamente, que si por el caos vial que generaron los viejitos pensionados fueron agredidos por las fuerzas policíacas, que entiendo que sólo obedecen órdenes, ¿Por qué nunca han procedido de igual manera con el brazo armado del PRI >Antorcha Campesina<, que se han cansado de parar las vialidades no sólo del centro de la ciudad capital, sino de otras importantes rúas una, dos 5 y 20 mil veces, bajo la mirada y complacencia de este gobierno, que como premio por ese caos vial que generan hace diputada local a su dirigenta?
 
¿Y a los cardenistas que elección tras elección son aliados del PRI-gobierno, sirviéndoles como organización electoral satélite, por qué no los desalojan, por lo menos, cuando se han adueñado de la plaza Lerdo? ¿Ese caos no les importa a las autoridades estatales? ¿Allí la ciudadanía no tiene derechos, o le vale sombrilla al gobierno por ser la sucursal del PRI? ¿Justicia selectiva? ¿Y el estado de Derecho? ¿Y el slogan de que la ley es ciega y se imparte por igual? ¿Y que las autoridades están para aplicar la ley sin distingo alguno?
 
Que alguien de los fidelistas, o la extensión de éste hecho gobierno me explique ¿Por qué a las huestes de Cesar del Ángel les permiten generar caos vial en todo Xalapa, encuerarse en las vías publicas sin pudor alguno, frente a los educandos de las escuelas primarias y secundarias, y hasta defecar en pleno centro histórico de la capital estatal, sin que un solo policía o funcionario gubernamental salga a llamarles la atención? ¿Por esos actos vandálicos el PRI-gobierno hizo diputado local al hijo del líder de los 400 pueblos?  

 
Cuánta razón le asiste al diputado priísta Ricardo Ahued Bardahil, (a quien he felicitado en artículos anteriores por su congruencia en los cargos que ha desempeñado), cuando desde la más alta tribuna del Estado –antes que otros diputados de oposición al PRI que se la han pasado calladitos-, denunció: "somos vergüenza nacional a causa de este gobierno represor, que debiéndoles pagar a los que el gobierno tiene que pagarles, los corren a patadas" "Estoy indignado frente a esta salvajada y exijo que tenga consecuencias a la persona que haya autorizado el desalojo" "Da vergüenza el gobierno, dan vergüenza los funcionarios, los servidores públicos damos vergüenza cuando a personas decentes que han trabajado y exigen sus pagos, un gobierno que no sabido manejar los recursos del Estado los saquen a empujones y patadas".  
 
Frente a una ingobernabilidad >in crescendo<, la plaza Lerdo se ha convertido en la única ventanilla abierta para que la sociedad se entere de los desatinos, trapacerías y brutalidad del gobierno estatal y sus integrantes, porque es el último recurso que les queda después de tocar múltiples puertas de oficinas de funcionarios que se niegan a recibirlos, atenderlos y resolverles sus demandas porque están más ocupados en administrar los negocios de los que se han hecho a su llegada a palacio de gobierno, con el dinero aportado por los maestros y maestras de Veracruz y otros burócratas.
 
Y no es que lo diga yo, sino que es un secreto a voces. Lo vienen denunciando desde hace varios meses los dos senadores de Veracruz Héctor y José Yunes, compañeros de partido de los denunciados públicamente de enriquecimiento inexplicable, que por cierto también condenaron la brutal golpiza de que fueron objeto los mentores jubilados, a quien por cierto a uno de ellos le comenté la terrible escena vivida por mi hijo en un banco, cuando vio llegar a un matrimonio de viejecitos que llegaron esperanzados al cajero pensando que ya tenían depositada su pensión, y al ver que no, arrancaron en llanto porque no tenían ni siquiera para pagar el urbano y regresar a su colonia, mucho menos para comer.

 
Cómo no carajos indignarme y escribirle a Flavino (a quien conozco desde que el que esto escribe era dirigente de la sociedad de alumnos de la escuela preparatoria artículo tercero constitucional y él un joven abogado auxiliar del sub-secretario de gobierno Carlos Brito Gómez), y decirle que no era necesario que se eche culpas ajenas, que baste con que renuncie al cargo y deje la carga de conciencia para los verdaderos responsables de esta estupidez.
 
Con el gobierno de Fidel y la extensión de éste, mi capacidad de asombro no tiene llenadera.