Salen miles en defensa de la familia tradicional a convocatoria del Frente Nacional por la Familia en alrededor de 70 ciudades y localidades del país en defensa de la llamada "familia tradicional", y en contra de las iniciativas presidenciales para reconocer en La Constitución el matrimonio entre personas del mismo sexo. En las marchas expresaron también el rechazo a la adopción por parte de las parejas homosexuales, contra los contenidos de educación sexual en los libros de texto gratuito de enseñanza básica y, no podía faltar, desde luego, contra el aborto.
 
Estamos frente a un movimiento –hay que decirlo con todas sus letras-, bien organizado y financiado no sólo por la iglesia Católica de México, sino también por grupos ultraconservadores de barones del dinero autodenominados Los Consagrados y por el sector católico, miembros del Opus Dei del partido (de) Acción Nacional, tan bien estructurados que ya doblaron al presidente Peña Nieto y los legisladores de su partido el PRI, que ya recularon en la iniciativa de ley que envió al Congreso para legalizar las bodas homosexuales congelándola, y han convertido en sus peones a varios gobernadores como el de Veracruz que han criminalizado el aborto, sin importarles que este país tiene mas del 50 por ciento de su población de mujeres.
 

¿Y el Estado laico? ¿Ese que los mismos que hoy los atemoriza el poder de la iglesia y sus obispos, quizás por tantos pecados acumulados en su alma, dijeron iba a prevalecer, después de las reformas salinistas al artículo 130 constitucional, cuando Diego Fernández de Ceballos se regodeaba desde la tribuna más importante del pueblo de México, la Cámara de Diputados, y les gritaba que Carlos Salinas de Gortari gobernaba con el programa de Acción nacional?
 
Allí está, dispénseme que se los diga otra vez, la certeza de lo que el 17 de diciembre de 1991 les dije a los diputados del PRI y del PAN cuando discutimos esa contrarreforma constitucional, cuando fui el primer orador en ese histórico debate y fundamente mi voto en contra de devolverle fueros a las iglesias, primordialmente la católica "...No por capricho o interés mezquino, sino como resultado de todo un proceso histórico, preñado de constantes agresiones de las iglesias en contra de la mayoría del pueblo de México, a veces en pleno contubernio con gobiernos impuestos por la fuerza de las armas, como lo fueron los que escenificaron en los 300 años de la colonia, o el archiduque Maximiliano de Habsburgo, otros con dictaduras como el de Antonio López de Santa Ana, el de Porfirio Díaz, el de De la Huerta; otras tantas dirigidas en contra de los intereses de la nación y de aquellos gobiernos que nos les toleraron sus constantes violaciones al orden constitucional, como lo fueron los extraordinarios gobiernos de Valentín Gómez Farias y del gran patricio don Benito Juárez García. Fueron sus bastardas ambiciones de poder económico y espiritual los que empujaron al Benemérito de las Américas a despojarlos de lo que antes ellos le habían despojado a nuestro pueblo con mentiras y con engaños. Fue su necedad de poder lo que perdió a la iglesia y lo llevó a la derrota política... y hoy, haciendo un lado todo ese acervo histórico, todas esas enseñanzas y experiencias se les pretende dar en la práctica el poder que solo el Estado, como institución en una República, en un país puede tener como resultado de la enorme voluntad de sus gobernados. Es cierto que el pueblo de México es eminentemente católico... pero también es cierto que tiene memoria histórica y no desea una vuelta al pasado, a lo superado, porque este sufrido pueblo mexicano tiene memoria y no olvida las angustias de sus ancestros ocasionados por la curia religiosa. Denles poder y los que presentan esta iniciativa se arrepentirán después".*1
 
Helos allí, reculando como los cangrejos. Desde el vasallo presidente Peña hasta los gobernadores corruptos que prefieren fotografiarse con el cardenal Norberto Rivera Carrera o los obispos después de violentar los derechos naturales de hombres y mujeres, de familias mexicanas, frente al regocijo de infinidad de políticos hipócritas que llevan dobles vidas, que han obligado a concubinas e hijas a abortar, pero que hacia fuera asumen posiciones demagógicas y retrógradas. Total, para eso se inventó el 12 de diciembre, para ir a darse golpes de pecho a la Villa y salir perdonado por tantos pecados cometidos.
 

Donde quedó, por cierto en aquel debate la garantía de un diputado priísta de excelsa verborrea que nos advirtió a los 12 legisladores que nos oponíamos a empoderar a la iglesia católica, que "...éstas no se asociarán con fines políticos, ni realizarán proselitismo a favor o en contra de candidato, partido o asociación política alguna, y tampoco podrán, en reunión pública, en actos de culto o de propaganda religiosa, ni en publicaciones religiosas oponerse a las leyes del país o sus instituciones..." *2, cuando desde el semanario la fe (órgano de difusión de la arquidiócesis primada de México), cada domingo convocan a la rebelión y desobediencia contra el gobierno federal, y las marchas de repudio a las leyes mexicanas.
 
El primero en pitorrearse de este planteamiento que así quedó en la Ley Reglamentaria del artículo 130 Constitucional, apartado B, es Diego Fernández de Ceballos, su partido y aquellos diputados que durante esos dos días y sus respectivas noches sonreían, festejaban y gritaban felices porque sus peones del PRI les estaban haciendo el trabajo. Los segundos somos los que nos opusimos, los que no nos tragamos los compromisos y palabras empeñadas por los que, con dios en la boca, dicen no mentir, porque la historia cuenta, no miente, y más cuando advertí en tribuna, en otra mas de mis intervenciones: "...Por eso, porque si no obstante que en el texto constitucional se citan, se precisan las reglas por las que las iglesias deben regir su vida interna y externa y no las han cumplido, hoy, con las reformas que se acaban de aprobar al artículo 130 y con los que estamos nosotros discutiendo, pienso que no es solamente una rendija por la cual se van a entrometer en otros aspectos, sino que es un portón por el cual van a transitar en forma libre, altanera, prepotente e ilegal, porque han hecho de esa práctica una regla general"*3
 
¿A qué sale ahora a lloriquear Enrique Ochoa Reza, presidente del comité ejecutivo nacional del PRI a exigirle al Instituto Nacional Electoral y al Tribunal Federal Electoral una investigación profunda sobre la participación de la iglesia católica misógina en la vida política de México (y más porque invitara a votar a su feligresía en Veracruz y Aguascalientes por los candidatos del PAN a gobernador y diputados), si los primeros culpables de que la curia eclesiástica ande desatada, altanera, grosera e ilegal es su propio partido, su presidente Peña que no les aplica la ley y un sin fin de gobernadores que son vasallos de la misma.
 

Norberto Rivera Carrera ha desafiado al Estado mexicano, decidió tomar las calles con sus fieles en una clara y abierta provocación a la institución, pero sobre todo al Presidente de la República. Está jugando a las fuerzas sabedor que si no actúa el Ejecutivo la partida la tendrá ganada y en México y sus estados solo habrá un liderazgo, aquel que trace la hoja de ruta para ir destruyendo lo que queda del Estado Laico y construir un Estado Confesional.
 
Hasta el momento va ganando en esta nueva cristiada y se apresta a dar el golpe definitivo en las elecciones de 2018 con uno, 2 ó inclusive 3 candidatos a la presidencia de la república. Ricardo Anaya por el PAN; Margarita como independiente si no la logra por el PAN, y apunte hasta el que surja del PRI o Morena, ya ve usted que don Andrés aparte de que anda llamando al amor y paz anda perdonando hasta los ladrones y corruptos, cumpliendo de esa forma con los mandamientos de la iglesia, independientemente que no ha fijado una posición clara sobre la equidad de género.
 
*1 Versión estenográfica de la LV Legislatura del Congreso de la Unión recogida en el libro "Juárez preside las luchas del PPS", páginas de la 23 a la 32, Editorial Combatiente.
 

*2 Versión estenográfica, Diario de los Debates de la LV Legislatura del Congreso de la Unión, 18 de diciembre de 1991.
 
*3 Versión estenográfica de la LV Legislatura del Congreso de la Unión recogida en el libro "Juárez preside las luchas del PPS", página 111 Editorial Combatiente.
 
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