16 de diciembre de 2016
alcalorpolitico.com
GOBIERNO VISCERAL
La conducción certera de una nave en medio de la fragorosa tormenta, requiere de la serenidad emocional así como suficiente inteligencia y voluntad del capitán para ponerla a salvo, para ello deberá de tomar la decisiones adecuadas en el momento difícil y salir adelante orgulloso de su tino y de su autoridad para llegar a buen fin poniendo a salvo el barco y la tripulación.
Si al capitán le tiembla el pulso, si titubea lo mas mínimo, la marinería comenzará a perder confianza y temerá un lamentable desenlace, si le falla el cálculo de las coordenadas en el rumbo de los vientos y en las distancias, su misión puede tener consecuencias fatales y terminará encallando o hundiendo la embarcación. La conclusión será que el capitán no estaba preparado para conducir y se dejaba llevar por sus instintos, las corazonadas y las ocurrencias.
En el Gobierno de una sociedad la situación es más complicada, el gobernante no tan sólo piensa en gobernar, tampoco siempre en gobernar bien, el poder ha pervertido su conciencia y tras su actuar virtuoso esconde su verdadera personalidad de ambiciones por acrecentar sus dominios y riquezas. Normalmente desea trascender y para ello instrumenta de diversas maneras su estrategia.
Desaparecer al adversario de los escenarios públicos, minar su fuerza, destruir su imagen, deformar la realidad atribuyéndole errores y defectos personales o profesionales sin sustento y sin sentido, no importando las nefastas consecuencias a los agraviados. Pues para él, lo importante es apartarlo del camino para que más adelante no estorbe sus planes.
El poder no sólo es un instrumento para servir a los semejantes, también sirve para cobrar agravios, para desahogar odios y resentimientos, lo que en su ejercicio, enceguece al mandante que toma decisiones viscerales con el hígado insuflado y el corazón ardiente como sus pasiones que reaccionan furiosamente a la primera expresión que no les parece o con la que están en desacuerdo.
A este tipo de individuos se tiene miedo hablarles con la verdad, porque se teme a sus reacciones iracundas que brotan espontáneamente de sus propias entrañas porque forman parte de su formación intrínseca.
Cuando actúan para hacer valer sus malévolas intenciones, simulan aplicar la ley y en ella se basan para fundamentar sus malignas pretensiones ante la generalidad de sus gobernados, haciéndoles creer que actúan de esa manera para preservar la pureza del estado de derecho.
Tal es el caso del Gobernador del Estado de Morelos, Graco Ramírez Abreu, quien para nulificar la aspiración a Gobernador de aquel estado, por parte del ídolo futbolístico Cuauhtémoc Blanco, actual Presidente Municipal de Cuernavaca, le ha organizado una verdadera campaña de desprestigio y de acusaciones infundadas, activando mediante conocidos y jugosos sobornos toda la Cámara Local, para formarle un fallido Juicio Político para revocarle el mandato, arbitrariedad que sólo el poder de la Suprema Corte de Justicia de la Nación pudo parar.
Cuauhtémoc desde un inicio fue boicoteado por el tirano Tabasqueño y Gobernador Morelense, achacándole que no era de Cuernavaca, que no tenía residencia, después que había cobrado por postularse como candidato, continuó atacándolo con el cuento de que no se presentaba a trabajar.
Lo cierto es que al desgastado Gobernador, aspirante a candidato presidencial, junto con su partido el PRD, sueñan con eternizarse en aquel puesto y para ello con todo el embrollo emocional, de corajes, de miedos, de torpeza e incapacidad que los caracteriza, con la fuerza de la mentira y con el poder económico del soborno quisieran desaparecer al ídolo de la afición futbolera, que si se postula por el partido que sea, será el seguro Gobernador de Morelos.
En Veracruz, las cosas son al revés de lo que allá sucede. Tenemos un Gobernador que tiene mano firme y pleno conocimiento del medio geográfico, económico y político del Estado que gobierna, lo que le permitirá con su solvencia moral, enfrentar la grave crisis financiera por la que atravesamos.
Él, debe de irse resignando a que este esfuerzo para rescatar Veracruz e impulsarlo hacia un sano y sostenido crecimiento, lo realizará sólo con la ayuda y el apoyo de los veracruzanos. La federación persiste en su cerrazón y de plano no se ve la intención de ayudarnos con recursos para sortear la tormenta. Para ellos es más importante comprar más aviones igual al presidencial, por caros y ostentosos que sean. Además de esconder a Duarte y simular que lo persigue.
Nosotros debemos de asimilar la actitud falsa e hipócrita de la Secretaría de Hacienda que con sonrisitas pretende hacernos creer que nos va a ayudar, ya es tiempo de que abandonemos nuestra actitud ingenua y soñadora de tontos esperanzados, que nos mantenemos esperando resignadamente a que del altiplano llueva el maná salvador y nos libere de esta auténtica crisis humanitaria que se vive más candentemente en los hospitales y reclusorios donde la falta de alimentos, medicinas y suficientes médicos tanto generales como especialistas, mantiene desesperados a sus beneficiarios.
La federación nos esta metiendo la aburridora, está segura de que el cansancio y la necesidad nos obligarán nuevamente a recurrir al endeudamiento bancario, posiblemente hasta se burlen indolentemente de la firmeza del licenciado Yunes que está decidido a no recurrir a más préstamos, sin embargo no podemos asfixiarnos, no se pueden parar los servicios, no se puede detener la obra pública, no se puede paralizar al Estado, no se puede matar de inanición a los deudores privados como constructores, proveedores y prestadores de servicios. Si se tiene que recurrir a más deuda, recurramos a ella, en los países y Estados mas ricos del mundo se ha recurrido a ella para financiar el desarrollo.
Deuda no es sinónimo de corrupción, ni de malos manejos, Estados Unidos el país de las maravillas y de las riquezas, tiene una deuda de 18 965 896 millones de dólares y no han tenido a un Duarte ladrón y dilapidador. Ahora lo invito a que esa cantidad la convierta en pesos para que vea que andamos muy lejos de la catástrofe.
El Reino Unido y Francia tienen una deuda de 2 044 545 y 2 170 000 812 Millones de Euros respectivamente.
México adeuda 176 600 millones de dólares. Esto solo por citar algunos ejemplos y bajarnos el terror a la cifra que da FORBES, una revista especializada en el mundo de los negocios y de las finanzas, que ubica a Veracruz entre los Estados de la República mas endeudados con un monto de 46 398 millones, pero en razón del número de sus habitantes y de la riqueza que genera, lo coloca por debajo de Quintan Roo, Chihuahua, Estado de México, Sonora y Michoacán, con 22 000, 47808, 41 778, 24907 y 20189 millones de pesos respectivamente y por encima de la Ciudad de México y Nuevo León con 67 211 y 68 155 millones de pesos cada uno.
La federación preparó desde las Cámaras legislativas el ataque a Veracruz, basta con echarle un vistazo al Presupuesto de egresos 2017 publicado en el Diario Oficial de la Federación, para convencerse de que en apoyos somos el estado mas abandonado, inclusive hay fondos federales como el FONDO PARA EL FORTALECIMIENTO DE LA INFRAESTRUCTURA ESTATAL Y MUNICIPAL donde el Estado no aparece con ninguna partida asignada a Veracruz y en este rubro hay cantidades substanciales como la dedicada al Estado de México por 780 Millones de pesos.
O puebla y Oaxaca con 172 millones de pesos cada uno, no descarto que quien esto escribe no entienda el por qué de la omisión, pero sería interesante que alguien lo explicara y de haber el error que lo aclarara, particularmente me sentiría muy satisfecho.
El gobernador debe de hacer un gran esfuerzo de planeación, de disciplina en el gasto y en los ingresos, tanto en la recaudación como en la recuperación del botín. Debe dar tranquilidad a los deudores, mediante un sistema de pago programado a corto y a largo plazo, disminuir el déficit presupuestal, recortando el gasto corriente de nómina y servicios.
Será difícil hacerlo, sin afectar los fuertes intereses creados en el Estado, el recorte puede revertirse y llevarnos a una crisis social extrema, pues hay que decirlo, si se cayera en excesos y se generaran miles de desempleados, estos no se cruzarían de brazos, defenderían su patrimonio, o los comerciantes que al reducirse el circulante dejarían de expender sus productos y se les empinaría a la miseria.
Debe de cuidarse la calidad y eficiencia en todos los servicios asistenciales y los propios del Estado, para no caer en una sociedad deprimida y desalentada por los efectos de la austeridad.
Si nos vamos a endeudar más, ahora es el momento, ahora que el Gobierno transpira fortaleza e inspira confianza en la ciudadanía ansiosa de realidades y que como se puede ver en las calles, en el café, en los actos públicos, la gente cree en Miguel y está dispuesta a navegar con él, en el rumbo que trace. Unidos llegaremos a buen y seguro puerto.- Por el bien de la causa.
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La conducción certera de una nave en medio de la fragorosa tormenta, requiere de la serenidad emocional así como suficiente inteligencia y voluntad del capitán para ponerla a salvo, para ello deberá de tomar la decisiones adecuadas en el momento difícil y salir adelante orgulloso de su tino y de su autoridad para llegar a buen fin poniendo a salvo el barco y la tripulación.
Si al capitán le tiembla el pulso, si titubea lo mas mínimo, la marinería comenzará a perder confianza y temerá un lamentable desenlace, si le falla el cálculo de las coordenadas en el rumbo de los vientos y en las distancias, su misión puede tener consecuencias fatales y terminará encallando o hundiendo la embarcación. La conclusión será que el capitán no estaba preparado para conducir y se dejaba llevar por sus instintos, las corazonadas y las ocurrencias.
En el Gobierno de una sociedad la situación es más complicada, el gobernante no tan sólo piensa en gobernar, tampoco siempre en gobernar bien, el poder ha pervertido su conciencia y tras su actuar virtuoso esconde su verdadera personalidad de ambiciones por acrecentar sus dominios y riquezas. Normalmente desea trascender y para ello instrumenta de diversas maneras su estrategia.
Desaparecer al adversario de los escenarios públicos, minar su fuerza, destruir su imagen, deformar la realidad atribuyéndole errores y defectos personales o profesionales sin sustento y sin sentido, no importando las nefastas consecuencias a los agraviados. Pues para él, lo importante es apartarlo del camino para que más adelante no estorbe sus planes.
El poder no sólo es un instrumento para servir a los semejantes, también sirve para cobrar agravios, para desahogar odios y resentimientos, lo que en su ejercicio, enceguece al mandante que toma decisiones viscerales con el hígado insuflado y el corazón ardiente como sus pasiones que reaccionan furiosamente a la primera expresión que no les parece o con la que están en desacuerdo.
A este tipo de individuos se tiene miedo hablarles con la verdad, porque se teme a sus reacciones iracundas que brotan espontáneamente de sus propias entrañas porque forman parte de su formación intrínseca.
Cuando actúan para hacer valer sus malévolas intenciones, simulan aplicar la ley y en ella se basan para fundamentar sus malignas pretensiones ante la generalidad de sus gobernados, haciéndoles creer que actúan de esa manera para preservar la pureza del estado de derecho.
Tal es el caso del Gobernador del Estado de Morelos, Graco Ramírez Abreu, quien para nulificar la aspiración a Gobernador de aquel estado, por parte del ídolo futbolístico Cuauhtémoc Blanco, actual Presidente Municipal de Cuernavaca, le ha organizado una verdadera campaña de desprestigio y de acusaciones infundadas, activando mediante conocidos y jugosos sobornos toda la Cámara Local, para formarle un fallido Juicio Político para revocarle el mandato, arbitrariedad que sólo el poder de la Suprema Corte de Justicia de la Nación pudo parar.
Cuauhtémoc desde un inicio fue boicoteado por el tirano Tabasqueño y Gobernador Morelense, achacándole que no era de Cuernavaca, que no tenía residencia, después que había cobrado por postularse como candidato, continuó atacándolo con el cuento de que no se presentaba a trabajar.
Lo cierto es que al desgastado Gobernador, aspirante a candidato presidencial, junto con su partido el PRD, sueñan con eternizarse en aquel puesto y para ello con todo el embrollo emocional, de corajes, de miedos, de torpeza e incapacidad que los caracteriza, con la fuerza de la mentira y con el poder económico del soborno quisieran desaparecer al ídolo de la afición futbolera, que si se postula por el partido que sea, será el seguro Gobernador de Morelos.
En Veracruz, las cosas son al revés de lo que allá sucede. Tenemos un Gobernador que tiene mano firme y pleno conocimiento del medio geográfico, económico y político del Estado que gobierna, lo que le permitirá con su solvencia moral, enfrentar la grave crisis financiera por la que atravesamos.
Él, debe de irse resignando a que este esfuerzo para rescatar Veracruz e impulsarlo hacia un sano y sostenido crecimiento, lo realizará sólo con la ayuda y el apoyo de los veracruzanos. La federación persiste en su cerrazón y de plano no se ve la intención de ayudarnos con recursos para sortear la tormenta. Para ellos es más importante comprar más aviones igual al presidencial, por caros y ostentosos que sean. Además de esconder a Duarte y simular que lo persigue.
Nosotros debemos de asimilar la actitud falsa e hipócrita de la Secretaría de Hacienda que con sonrisitas pretende hacernos creer que nos va a ayudar, ya es tiempo de que abandonemos nuestra actitud ingenua y soñadora de tontos esperanzados, que nos mantenemos esperando resignadamente a que del altiplano llueva el maná salvador y nos libere de esta auténtica crisis humanitaria que se vive más candentemente en los hospitales y reclusorios donde la falta de alimentos, medicinas y suficientes médicos tanto generales como especialistas, mantiene desesperados a sus beneficiarios.
La federación nos esta metiendo la aburridora, está segura de que el cansancio y la necesidad nos obligarán nuevamente a recurrir al endeudamiento bancario, posiblemente hasta se burlen indolentemente de la firmeza del licenciado Yunes que está decidido a no recurrir a más préstamos, sin embargo no podemos asfixiarnos, no se pueden parar los servicios, no se puede detener la obra pública, no se puede paralizar al Estado, no se puede matar de inanición a los deudores privados como constructores, proveedores y prestadores de servicios. Si se tiene que recurrir a más deuda, recurramos a ella, en los países y Estados mas ricos del mundo se ha recurrido a ella para financiar el desarrollo.
Deuda no es sinónimo de corrupción, ni de malos manejos, Estados Unidos el país de las maravillas y de las riquezas, tiene una deuda de 18 965 896 millones de dólares y no han tenido a un Duarte ladrón y dilapidador. Ahora lo invito a que esa cantidad la convierta en pesos para que vea que andamos muy lejos de la catástrofe.
El Reino Unido y Francia tienen una deuda de 2 044 545 y 2 170 000 812 Millones de Euros respectivamente.
México adeuda 176 600 millones de dólares. Esto solo por citar algunos ejemplos y bajarnos el terror a la cifra que da FORBES, una revista especializada en el mundo de los negocios y de las finanzas, que ubica a Veracruz entre los Estados de la República mas endeudados con un monto de 46 398 millones, pero en razón del número de sus habitantes y de la riqueza que genera, lo coloca por debajo de Quintan Roo, Chihuahua, Estado de México, Sonora y Michoacán, con 22 000, 47808, 41 778, 24907 y 20189 millones de pesos respectivamente y por encima de la Ciudad de México y Nuevo León con 67 211 y 68 155 millones de pesos cada uno.
La federación preparó desde las Cámaras legislativas el ataque a Veracruz, basta con echarle un vistazo al Presupuesto de egresos 2017 publicado en el Diario Oficial de la Federación, para convencerse de que en apoyos somos el estado mas abandonado, inclusive hay fondos federales como el FONDO PARA EL FORTALECIMIENTO DE LA INFRAESTRUCTURA ESTATAL Y MUNICIPAL donde el Estado no aparece con ninguna partida asignada a Veracruz y en este rubro hay cantidades substanciales como la dedicada al Estado de México por 780 Millones de pesos.
O puebla y Oaxaca con 172 millones de pesos cada uno, no descarto que quien esto escribe no entienda el por qué de la omisión, pero sería interesante que alguien lo explicara y de haber el error que lo aclarara, particularmente me sentiría muy satisfecho.
El gobernador debe de hacer un gran esfuerzo de planeación, de disciplina en el gasto y en los ingresos, tanto en la recaudación como en la recuperación del botín. Debe dar tranquilidad a los deudores, mediante un sistema de pago programado a corto y a largo plazo, disminuir el déficit presupuestal, recortando el gasto corriente de nómina y servicios.
Será difícil hacerlo, sin afectar los fuertes intereses creados en el Estado, el recorte puede revertirse y llevarnos a una crisis social extrema, pues hay que decirlo, si se cayera en excesos y se generaran miles de desempleados, estos no se cruzarían de brazos, defenderían su patrimonio, o los comerciantes que al reducirse el circulante dejarían de expender sus productos y se les empinaría a la miseria.
Debe de cuidarse la calidad y eficiencia en todos los servicios asistenciales y los propios del Estado, para no caer en una sociedad deprimida y desalentada por los efectos de la austeridad.
Si nos vamos a endeudar más, ahora es el momento, ahora que el Gobierno transpira fortaleza e inspira confianza en la ciudadanía ansiosa de realidades y que como se puede ver en las calles, en el café, en los actos públicos, la gente cree en Miguel y está dispuesta a navegar con él, en el rumbo que trace. Unidos llegaremos a buen y seguro puerto.- Por el bien de la causa.
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