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Columnas y artículos de opinión
¡Buena la caballada!
Rafael Martínez Zaleta
11 de enero de 2012
alcalorpolitico.com
Al Lic. Pedro Joaquín Coldwell, mi ex-jefe en la
Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados,
con inmodificable afecto. 

Se ha ido el año 2011 y tan solo ha dejado en nuestros labios el sabor de su huella. Pero nuestro ánimo –como en la historia de Pandora- en una cajita se guarece la esperanza, que como virtud teologal nos estimula, nos llena de entusiasmo y de optimismo para seguir en la brega diaria. Al iniciar el nuevo año agradecemos al supremo hacedor, que nos haya permitido vivir unos espacios más, y a nuestros amables lectores muchas gracias por compartir nuestras ideas, o por disentir en nuestras opiniones, que pueden o no fundarse en la razón, pero siempre ajenas a cualquier ofensa o mala intención. Por lo demás, se acercan días difíciles, como los que hemos pasado. Pero ya en estos tiempos nada es fácil. Los retos que la vida nos impone habremos de enfrentarlos. Y en cada una de nuestras acciones tenemos que depositar lo mejor de nuestro esfuerzo. Se acerca un año electoral inusual, pocas veces visto. El Partido Acción Nacional –con el ingrato y triste papel que ha desempeñado en más de una década, se va a lanzar a la contienda electoral llevando todo el aparato gubernamental, azuzado y apoyado por un hombre necio y obstinado, que durante su gobierno demostró siempre ser el Presidente del PAN, que no de los mexicanos como debería haberlo hecho.

Las fallas y vicios de origen, sostenidos por el Presidente Felipe Calderón en todo su mandato, le auguran los reveses en las urnas. Que no es la única, pero sí la manera inmediata en que el pueblo con su propia mano se hace justicia. En el mismo contexto, todo parece indicar que la verdadera disputa electoral se llevará entre el PRI y el PRD, (este último arrastrando las luchas internas de los últimos años). Ocasión que le permitirá a Andrés Manuel López Obrador, en caso de perder; el no aceptar jamás la derrota. Apoyándose en los vacíos y oscuras interpretaciones de la Ley Federal Electoral.


Sin embargo, con todos los vaticinios a favor y en contra, a mediados del próximo año, se soltarán en la arena los mejores gallos, o los más jugados, al tiempo que se cerrarán las puertas del palenque político nacional. En el entorno, el Gobernador de todos los veracruzanos ha declarado con mucho optimismo: “2012, será un año de grandes resultados para Veracruz”. Y no hay duda alguna, Javier Duarte en su primer año de gobierno tomó el toro por los cuernos: frenó la delincuencia, saneó las finanzas e impulsó la salud y la educación en todo el estado, demostrando y ejemplificando que las cosas en la vida no se resuelven tan solo con dinero, también con imaginación y creatividad.

Pero volviendo al encabezado del presente artículo, hubo años algún día, en que se medía el ambiente político, acorde al estado en que se hallaban sus actores y estos, en el lenguaje provincial y dicharachero de Rubén Figueroa Figueroa, Gobernador del Estado de Guerrero en aquel entonces, comparativamente solía decir: “La caballada está flaca o gorda”. Observando como buen jinete la calidad de los dientes y la alzada. Hoy por hoy, podríamos decir que en Veracruz está gorda la caballada.

De los aspirantes, precandidatos y demás hierbas, el más tullido es alambrista, el más chimuelo masca fierro y el más pendejo hace relojes. Todos están en el partidero esperando el toque de salida. Los hay de zancada grande, pequeños pero veloces, de pezuña acerada por los años y la experiencia. Hay caballos de batalla, caballos de frisa, caballos de troya, caballos de vapor, caballos marinos. Por su raza los hay anglo-árabes, árabes, boulonnais, ardennais, etc., etc.


Pero dejando atrás, la manera jocosa de observar el entarimado político, tan solo mencionaremos a uno de los múltiples y variados personajes, que con respeto y seriedad subirán a la palestra a exponer las bondades de su partido. Y ni más ni menos, seguramente habrá de ser el actual diputado federal Juan Nicolás Callejas Arroyo, hombre íntegro, probo, honrado, de origen humilde, que se ha abierto brecha en la vida política y sindical con su propio esfuerzo. Buen conocedor de la función pública, brillante orador. Varias veces representante popular en ambas cámaras legislativas. Hombre disciplinado, conocedor de sus tiempos, juicioso, mesurado, respetuoso con todos en su manera de ser y de pensar. Orgullosamente invicto en todas sus campañas políticas y con una maquinaria electoral perfectamente bien aceitada. El maestro Juan Nicolás Callejas Arroyo, de manera constante y sistemática está siendo candidateado para el Senado de la República, por los diferentes sectores del Partido Revolucionario Institucional, por la sociedad civil y grupos magisteriales de las diferentes secciones del SNTE.

El líder moral del magisterio es garante en la contienda electoral, su estructura y plataforma política es el producto de muchos años de esfuerzo, y donde la unidad ha sido siempre el primer ingrediente. El trabajo partidista que como líder sindical ha desarrollado permite formular muchos votos a favor del PRI y en una supuesta denominación lo mismo pudiera entrar y entrar bien –a diferencia de otros posibles aspirantes- como candidato plurinominal, que por mayoría relativa. Qué bueno que la caballada está a la alta, ya el electorado se está cansando de que se gobierne a base de caprichos u ocurrencias. Qué bueno que en México y particularmente en Veracruz haya líderes naturales, como el maestro Juan Nicolás Callejas Arroyo, que se convierten en verdaderos luchadores sociales, retomando uno de los principios fundamentales de la política, que es hacer el mayor bien al mayor número.

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