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Columnas y artículos de opinión
Al Pie de la Letra
Descartes
Raymundo Jiménez
28 de agosto de 2012
alcalorpolitico.com
Hasta el mediodía de ayer iban 18 candidatos inscritos para el cargo de Auditor General del Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) del estado.

Pero a sólo tres días de que venza el plazo fijado por la convocatoria publicada el jueves antepasado en la Gaceta Legislativa por la Comisión de Vigilancia de la LXII Legislatura local, el C.P. Lorenzo Antonio Portilla Vázquez, actual director de Control y Evaluación de la Contraloría General del Estado y uno de los presuntos aspirantes más fuertes para suceder a Mauricio Audirac en el ORFIS, aún no se presentaba en la sede del Congreso del estado para solicitar el registro de su candidatura.

Es posible que Portilla haya desistido de su interés por ocupar el mismo cargo al que aspiraba su jefe, el contralor Iván López Fernández, quien en un acto de congruencia y de lealtad política al gobernador Javier Duarte de Ochoa decidió declinar dicha pretensión, ya que como miembro en funciones del gabinete del Poder Ejecutivo estaba impedido legalmente para dirigir el ORFIS.


Y es que para ser Auditor General del máximo ente fiscalizador del estado se deben reunir los requisitos que establecen los artículos 58, fracciones I, II, IV, y V, y el 67, fracción III, de la Constitución Política del estado; así como lo que estipulan el 66 y 70 de la Ley de Fiscalización Superior, y el 7 y 11 del Reglamento Interior del ORFIS.

Particularmente se destaca que quien pretenda ser Auditor General no debe haber desempeñado ni desempeñar durante el ejercicio del cargo, ninguna función, actividad o comisión alguna en partidos políticos, agrupaciones o asociaciones políticas, en los órdenes municipal, estatal o federal, a menos que se hubiere separado del cargo, función o nombramiento conferido, cinco años antes de la designación como titular de algunas de las unidades administrativas del Órgano de Fiscalización.

En el caso de Portilla Vázquez existen antecedentes recientes de que el director general de Control y Evaluación de la Contraloría del gobierno duartista se desempeñó durante los tres últimos años del sexenio del gobernador Fidel Herrera Beltrán, de 2007 a 2010, como contralor general del Comité Directivo Estatal del PRI, donde tuvo trato con candidatos a alcaldes y diputados locales actualmente en funciones, a la vez que se desempeñaba simultáneamente también como funcionario del Centro de Comunicaciones, Cómputo y Control (C-4), donde manejaba en aquel entonces los recursos federales del Fondo de Seguridad Nacional (Foseg).


Desde hace más de un mes, consciente de su situación legal, el contralor Iván López anunció que no participaría en el proceso legislativo para designar al nuevo auditor general del ORFIS pese a que trascendió que sobre el escritorio de Francisco Loyo Ramos, secretario general del Congreso local, presuntamente se tenía ya listo el borrador de un decreto para otorgarle la dispensa de ley al C.P. López Fernández.

Entrevistado a finales de julio de este año por Aurelio Contreras Moreno, director editorial de la revista Líder, el contralor estatal declaró en aquella ocasión: “Desde el punto de vista profesional, estar en el Órgano de Fiscalización debe ser un buen reto, es algo que profesionalmente te complementa. Pero mi visión hoy es el Gobierno del Estado. Agradezco a mucha gente que me quiere mucho y que quiere verme allá, pero hoy mi trabajo está aquí, junto al Gobernador, y estar con él hasta que él diga”.

Orgulloso de la responsabilidad que en esta administración le ha encomendado su jefe Javier Duarte de Ochoa, el contralor expuso: “La gente que está hoy en el gobierno sabe que está en un proyecto, sabe quién lo encabeza, y quien no, hay que recordárselo muy seguido. Y saben por dónde debemos caminar todos. La gente que no se sienta motivada está haciendo mal, en el sentido de no aprovechar esta oportunidad que se le da para actuar, en cuanto a esa libertad que el gobernador te permite en tu gestión y en tu desarrollo profesional. Quien no lo entienda no tiene futuro ni espacio en este gobierno”.


¿Lo habrá entendido su director general de Control y Evaluación, el C.P. Portilla Vázquez?

BAUTIZO V.I.P.

Este sábado, en la ciudad de México, el senador electo del PVEM, Pablo Escudero Morales, bautizó a su primogénita.


El evento reunió a diversas personalidades de la élite política y empresarial de México, pues el senador del Partido Verde está casado con Sylvanna Beltrones, sí, la guapa hija del sonorense Manlio Fabio Beltrones Rivera, quien de la Cámara de Senadores pasará ahora a coordinar al grupo legislativo del PRI en la Cámara de Diputados.

Uno de los personajes más saludado fue el ex presidente Carlos Salinas de Gortari.

Según trascendió, el único político veracruzano que recibió invitación especial para este evento familiar fue el senador electo José Francisco Yunes Zorrilla, compañero de escaño y buen amigo del feliz papá de la bautizada.