Como don Rodrigo Díaz de Vivar, el legendario “Cid Campeador”, el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán sigue ganando batallas después de considerársele “muerto” políticamente.

 

Y es que ya son varios soldados fidelistas que poco a poco han ido recuperando plazas en Veracruz como nuevos delegados federales.

 

Este lunes 28, por ejemplo, Ranulfo Márquez Hernández, “brother” de Herrera Beltrán desde que ambos compartieron pupitre en la escuela preparatoria “Artículo Tercero” de Xalapa, asumió la delegación estatal de la Secretaría de Desarrollo Social, considerado el principal botín electoral de los panistas durante el sexenio presidencial pasado.

 

Anteayer, también, arribó a la representación de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, Francisco Mora Domínguez, ex condiscípulo de Fidel Herrera en la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana.

 

Y otro fidelista químicamente puro que está con el bat al hombro para ocupar la delegación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en la zona Veracruz-Norte es precisamente el ex secretario particular de Herrera, Antonio Benítez Lucho, quien desde septiembre del año pasado anda desempleado políticamente tras haber terminado su gestión como diputado al Congreso de la Unión por el distrito electoral de Cosoleacaque.

 

Los tres, coincidentemente, en la víspera de la sucesión gubernamental de 2010 eran los más reacios a aceptar que Javier Duarte de Ochoa, a la sazón diputado federal por el distrito de Córdoba, pudiera ser el sucesor de Fidel Herrera en la gubernatura.

 

Márquez Hernández, por considerarse el hermanito mayor del “Tío Fide”, creía tener más derecho que nadie para sustituirlo como gobernador. Por eso fue el último de los aspirantes priistas que accedió a alinearse a la precandidatura del ex diputado cordobés y ex compañero de gabinete.

 

Mora Domínguez y Benítez Lucho, en cambio, ponían en tela de duda que Duarte de Ochoa pudiera ganar la elección que se preveía mucho más complicada que la de Fidel en 2004.

 

El final de esta historia es harto conocida. Y, cosas del destino: ahora los tres fueron propuestos por el gobernador Javier Duarte ante el presidente Enrique Peña Nieto para ocupar sendas delegaciones federales, lo que algunos antiduartistas dudaban que se concretaran no sólo por el retraso en su designación sino por el fierro del fidelismo que traen marcado en la frente y asentaderas cada uno de ellos.

 

Por eso ahora que se han oficializado los primeros nombramientos de los delegados fidelistas enlistados por Duarte de Ochoa, hay quienes no descartan que en breve, también, el ex gobernador Fidel Herrera pudiera recibir una nueva delegación del gobierno peñista pero diplomática, en el exterior.

 

La versión no suena del todo descabellada. Sobre todo si se llegara a dar en Veracruz un escenario hasta ahora lejanamente hipotético de que la alianza PAN-PRD ganara 16 de los 30 distritos electorales de la entidad en los comicios del 7 de julio próximo, y que Miguel Ángel Yunes Linares, ex candidato del PAN a gobernador y enemigo acérrimo de Fidel Herrera y Javier Duarte, ligara curul en la LXIII Legislatura local como diputado plurinominal, según lo declaró este martes 29 su hijo, el senador Fernando Yunes Márquez.

 

¿Qué sería lo primero que promovería Yunes Linares desde el Congreso estatal con una oposición mayoritaria? No es muy difícil de adivinar: un juicio político contra el ex gobernador por la abultada deuda pública que dejó en bancarrota las finanzas del gobierno de Veracruz.

 

Esa sería la aparente razón por la que Herrera Beltrán habría sugerido y ha conseguido colocar a sus mariscales electorales en las jefaturas delegacionales del nuevo gobierno federal, desde las cuales maniobrarán para sacar a como dé lugar a los candidatos del PRI a la diputación local, aunque tengan que ceder decenas de las 212 alcaldías a partidos de oposición que no se sumen a la alianza PAN-PRD, tal como operaron los fidelistas en la sucesión estatal de 2004, aunque en aquella ocasión, para salvar la elección de gobernador, tuvieron que entregar al partido blanquiazul no sólo presidencias municipales sino también el control del Congreso del estado.

 

Los mismos fidelistas que hace casi 9 años fraguaron ese fraude son los que ahora están aterrizando en las delegaciones federales.

 

Sólo falta conocer la lista de candidatos a diputados y alcaldes, tanto del PRI como de algunos partidos de “oposición” que obviamente no irán coaligados a la alianza PAN-PRD, algunos de los cuales son aspirantes que sin el menor rubor andan propalando que son “apadrinados” dizque por Herrera Beltrán, quien como el legendario “Cid Campeador” busca ganar también esta batalla que para la tranquilidad de su retiro o sus presuntas aspiraciones diplomáticas, le será definitiva.

 

 

No son los pocos los sorprendidos con el repentino viaje del gobernador Javier Duarte de Ochoa a España, la llamada “Madre Patria”, país que enfrenta desde hace más de un año una grave crisis económica a la que no se le ve fin en el corto plazo.

 

Sin embargo, el mandatario veracruzano ha conseguido audiencias con personajes de la realeza y empresariado español así como del Ayuntamiento madrileño que seguramente algo le redituarán a nuestro estado, por lo menos en la proyección de su buena imagen.