4 de abril de 2013
alcalorpolitico.com
La noticia cimbró ayer a España y le dio la vuelta al mundo: un juez ibérico citó a declarar, como imputada en un caso de corrupción, a la mismísima hija del Rey Juan Carlos.
El acusado directo es el esposo de Cristina y yerno del Rey, Iñaki Urdangarin, a quien acusan de haberse apropiado indebidamente de fondos públicos.
No obstante que el fiscal del caso no está de acuerdo con la decisión, el juez duda de que la infanta desconociera que su esposo la utilizaba para delinquir.
Ahora, ella deberá presentarse a declarar el próximo día 27 y ya se puede uno imaginar la cobertura mediática que tendrá su comparecencia.
En Francia, el presidente Françoise Hollande anunció que se hará la publicación y el control sobre el patrimonio de todos los ministros y parlamentarios.
Esto, luego de la confesión de su exministro de Presupuesto, Jerôme Cahuzac, de que ocultó una cuenta bancaria en Suiza y luego en Singapur.
Esa confesión desató lo que allá llaman un “tsunami político” y obligó a Hollande a dar la cara a los franceses a través de un mensaje grabado emitido por televisión.
El Presidente francés condenó la conducta de su ex colaborador, sus mentiras, su actitud que calificó como una “falta moral imperdonable” y de “ultraje a la República”.
Prometió arrojar luz sobre el caso y realizar una lucha “sin piedad contra los conflictos entre intereses públicos y privados”.
Todo eso, en el Primer Mundo, en democracias consolidadas, en sociedades altamente desarrolladas, donde hay justicia y moral y ética de veras.
Cuando leí las notas ayer, por más que hice un esfuerzo no pude recordar un solo caso similar que se haya dado en México.
Un caso similar en el que se actúe con verdadero apego a la ley, con ética, porque ha habido encarcelamientos pero por venganzas políticas.
Acá, no es ninguna novedad, el Poder Judicial está sometido al Poder Ejecutivo y los jueces y magistrados al gobernante en turno. Lo mismo el Legislativo.
En nuestra aldea local, ni siquiera es imaginable pensar que algún día imputarán a la hija de un presidente municipal por un caso de corrupción y menos que la citarán a declarar.
Por lo mismo, menos a la hija de algún gobernador o del Presidente de la República, aunque haya evidencias, pruebas y ahí están los hijastros de Vicente Fox para comprobarlo.
Pero tampoco en México, ninguna autoridad, ningún gobernante declarará públicamente estar avergonzado porque algún colaborador suyo haya robado dinero público.
Y menos grabará de inmediato un programa para pasarlo en televisión y decir al pueblo que investigará al responsable y lo condenará públicamente, sin piedad alguna.
Menos anunciará la publicación del patrimonio de los miembros de su gobierno y de los diputados y senadores y mucho menos que ejercerá un control sobre ellos para que no metan la mano al cajón.
En nuestro país, incluso, se busca que los casos como esos no trasciendan a la opinión pública y para ello se busca hasta controlar a la prensa.
En México se detuvo a Elba Esther Gordillo, pero se dejó impune a Carlos Romero Deschamps, a Víctor Flores Morales y a muchos otros.
Pero el sentir popular es que se actuó contra ella porque se opuso a la Reforma Educativa, si no, se pasearía impune. Parece que todo ha sido flor de un día.
Pero todo lo anterior no debe desalentarnos ni a nuestros hijos. Lo de Europa nos muestra que es posible aplicar la justicia, a secas, sin consideración para nadie.
Los casos europeos sirven, deben servir como ejemplo a nuestros gobernantes sobre lo que es actuar desde el poder con ética y moral pública y a ello debemos tender que se haga en nuestro país.
Pero la decisión no está en los propios gobernantes, en las autoridades, sino en los ciudadanos, en su fuerza para reclamar y poder cambiar el estado de cosas.
Desde la Iglesia católica, sacerdotes ya nos están dando el ejemplo cuando reclaman candidatos que no mientan, que no manipulen y ciudadanos que no se aborreguen.
Para empezar, a ver con qué propuestas personales nos salen los partidos para que ocupen alcaldías y diputaciones. De nosotros dependerá si les damos nuestro voto o no.
El próximo 7 de julio tendremos la gran oportunidad para dar un paso hacia adelante en el propósito de ir acabando con el México de la corrupción y de la impunidad.
Seamos optimistas y pensemos que algún día alcanzaremos el grado de desarrollo cívico y político, moral, ético, de los países desarrollados, de Primer Mundo.
NO hay peor lucha que la que no se hace. Intentémoslo, una y otra y otra vez. Si ya no por nosotros, por nuestros hijos y por nuestros nietos y los que vengan.
México y Veracruz se lo merecen. Y el ciudadano honesto, trabajador, esforzado, también.
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El pasado lunes cumplió 8 años el periódico cultural xalapeño Performance. Su director, escritor, poeta, periodista, buen compañero, buen amigo, gran animador cultural, José Homero, escribió al respecto en su cuenta de Facebook: “HOY CUMPLE 8 años el periódico Performance. Continuaremos bregando, aunque a las instituciones de cultura de este estado y del país les valga madre”. Con eso dijo todo. Felicidades a todo el equipo, incluyendo a mi compañera de trabajo en la Editorial de la UV, Nina Crangle.