icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Ucrania e Israel: dos raseros distintos
Helí Herrera Hernández
21 de julio de 2014
alcalorpolitico.com
[email protected]
Twitter: HELIHERRERA.es
 
La semana pasada el mundo se amaneció con la triste noticia que un avión de la Línea Malaysia Airlines había sido impactado a 10,100 metros de altura mientras volaba territorio ucraniano, por la ruta bajo el control del multimillonario Petro Poroshenco (Presidente de Ucrania), lo que causó su derribe y la muerte de más de cien pasajeros.
 
De inmediato el gobierno de los Estados Unidos condenó el hecho, no tardando en inculpar a los separatistas Pro rusos que están librando una batalla contra su presidente, que está entregado a los intereses de los países miembros de la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN), que genera un clima de tensión en esta zona por dos razones: a) por estar dentro de ese país la mayor parte de las fuerzas navales con sus respectivos misiles que pertenecieron a la Unión Soviética, y b) por los grandes yacimientos de gas y sus respectivos oleoductos que van hacia toda Europa, que sin ellos, todos las naciones de esa región podrían sucumbir en un invierno crudo, como los que año con año suceden allá.

 
El apoyo que Alemania, Inglaterra, Italia, Francia y los Estados Unidos dan a Petro Poroshenco es por esas dos razones: controlar el arsenal marítimo-nuclear que tiene Ucrania a escasos kilómetros del territorio ruso, que le da ventaja sobre aquel país, y por el gas del que carecen las naciones europeas; de allí que no hayan vacilado en prestar a través del Fondo Monetario Internacional miles de millones de dólares a aquel gobierno, para evitar que pudieran anexarse de nueva cuenta a Rusia, generando con ello un reacomodo de la geopolítica económica-militar en Europa y Asia.
 
Por estas razones se libran batallas significativas en Ucrania, entre los que habiendo sido durante más de cuatro décadas parte de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas quieren de nueva cuenta anexarse a Rusia, y los neocapitalistas que desde siempre lucharon por la desintegración de aquella imponente unión multinacional, siendo precisamente en el territorio que dominan estos últimos donde ocurrió el derribamiento de ese avión, del que quieren culpar a los rebeldes, cuyas bases se encuentra a más de 900 kilómetros de ese sitio.
 
Pero el asunto no para allí, porque mientras el gobierno de Estados Unidos quiere responsabilizar de este asesinato aéreo a los ucranianos rebeldes, fuentes de inteligencia rusa manifestaron que a esa misma hora y prácticamente por el mismo lugar, iba volando el avión del presidente Vladimir Putin, y que siendo esa zona la que tiene bajo su control el presidente Petro Poroshenco, fueron sus tropas las que dispararon contra ese avión, según conversaciones satelitales que conservan.

 
El acto es totalmente reprobable por donde se quiera ver. Ya porque hayan disparado al avión de Malaysia Airlines para culpar a los separatistas y ganar conciencias mundiales que los condenen, o lo que es peor, que premeditadamente hayan querido atentar contra el presidente ruso, lo que pone al mundo en el filo de la navaja, porque aquel gobierno no se iba a quedar con los brazos cruzados e iniciaría incursiones militares, marítimas y aéreas contra su contraparte ucraniana, que podría desatar una guerra que involucraría a varias naciones.
 
Todos los gobiernos miembros de la OTAN desde que ocurrió el incidente han, desde el foro de la Naciones Unidas y su consejo de seguridad, condenado a los separatistas por lo que consideran un acto de “barbarie” como en efecto, lo es, sin esperar una investigación seria y científica sobre el derribamiento del avión, Pero nada dicen de la masacre que esta haciendo el Estado Nuclear de Israel, que bajo las ordenes de Benjamin Netanyahu invadieron la franja de Gaza, asesinando por aire y tierra a cientos de palestinos, muchos, muchísimos de ellos niños, como lo hemos observado en las imágenes que nos llegan más por la vía de las redes sociales que por los medios de comunicación, propiedad de millonarios al servicio del imperio.
 
¿Por qué allí, frente a la masacre que el ejército israelí esta haciendo sobre una población, que lo único que hace es defender su territorio arrebatado en 1948 por los Estados Unidos para crear el Estado de Israel, no están esos mismos medios condenando tan viles y cobardes asesinatos, y tampoco los gobiernos de Inglaterra, Francia, Italia, Alemania o los Estados Unidos?

 
Van más de 10 veces que el pleno de las Naciones Unidas ha condenado a Israel y su gobierno por sus políticas belicistas contra el Estado palestino, ordenándoles, inclusive, la devolución de sus tierras.
 
¿Por qué entonces el gobierno Israelí no ha cumplido con tal resolución?
 
¿O porque siempre el gobierno norteamericano ha sido el único del planeta que ha defendido aquel gobierno, a pesar de la condena mundial, y no ha hecho que cumplan con los resolutivos de la ONU?

 
Dos raseros miden estos conflictos que estallaron la semana pasada por parte del Goliat mundial y sus gobiernos abyectos: Respecto al avión de Malaysia derribado, sin esperar una investigación seria ya encontraron culpable, mientras que cuando la comunidad internacional condena a la nación Israelí por los crímenes de >lesa humanidad< que están cometiendo, el gobierno estadounidense se obnubila y se ensordece.
 
Nosotros, el pueblo de México, ya estamos acostumbrados a este trato de ese Goliat que sin misericordia alguna ejecuta, a través de sus milicias en la frontera, a mexicanos indefensos sin que medie un castigo para los responsables, a pesar de que esos asesinatos son televisados a todo el mundo.
 
Solidaridad pues con las víctimas del avionazo en Ucrania, pero también y más, con el pueblo sufrido de Palestina que están siendo exterminados por los que han hecho del exterminio, su principal queja y justificación en el mundo.