El por qué y seriedad de las encuestas de Visión de Futuro

Se ha hecho fama común que las encuestas para medir opinión y sobre todo preferencias electorales, son utilizadas por algunos candidatos o partidos para presentar resultados falsos de supuestas tendencias con la intención de influir en el electorado y ganar adeptos, es decir, convierten un instrumento de estadística en una mecanismo de publicidad

Inclusive, son conocidas las empresas “encuestadoras” que fabrican resultados al gusto del cliente, sea por pedido especial o sea porque timan al cliente, de ahí la mala fama que se han ganado las encuestas sobre todo a nivel nacional, pero, ni todas las encuestas son falsas (o “cuchareadas”) ni todas las empresas encuestadoras aceptan falsear la medición de la realidad. La encuesta es una herramienta válida que se aplica en todo el mundo, tan válida que está contemplada en las legislaciones como parte de un proceso electoral.

Este es el caso de la encuestadora “Visión de Futuro”, filial del periódico en línea “Alcalorpolitico”, que durante doce (12) años ha venido realizando encuestas y que a lo largo de este tiempo, se ha ganado el respeto de aquellas personas que han comprobado cómo, las encuestas que se publican respecto de las tendencias de los votantes, son finalmente validadas por el resultado de la elección con mínimos márgenes de error (también contemplados por la ciencia como parte del proceso estadístico).

El último de los éxitos estadísticos que fueron constatados por lectores e interesados en el quehacer político, fue en la elección federal de julio del año en curso, cuando aquí se publicaron dos encuestas que incomodaron a mucha gente, una aplicada un mes antes y otra una semana antes de la elección, en que ambas medían la opinión en el distrito de Xalapa y daban por perdedor a Reynaldo Escobar Pérez y ganador a Uriel Flores; obviamente los priístas criticaron y llegaron a opinar que estábamos atacando al señor Escobar. El resultado de la elección como en otras anteriores, nos dio plenamente la razón y estos resultados fueron mostrados ante los ojos de expertos en la materia, quienes jamás han cuestionado la validez de esos estudios.

Ahora que se aplicó una encuesta en Xalapa con relación a los aspirantes a la presidencia municipal, la encuestadora expuso ante las personas que participaron en la muestra, los nombres de los políticos o académicos destacados que han manifestado en algún momento que podrían aspirar a la candidatura en sus respectivos partidos o que simplemente son mencionados en comentarios periodísticos.

También se midió la preferencia electoral, sin candidato, que podrían tener los ciudadanos encuestados y se obtuvieron dos resultados interesantes:

El resultado respecto de los nombres, dio tendencia favorable al político de uno de los tres partidos más importantes que participan en la elección y por esa razón, algunos lectores con simpatía por otros aspirantes o partidos, escribieron para reclamar, por creer que se está poniendo una herramienta estadística al servicio de una persona o un partido para manipular a la opinión pública.

Pero no.

Ese es el resultado exacto de la encuesta que, por supuesto, ni es definitiva para la elección ni es inamovible porque el proceso hará variar las preferencias del electorado, dependiendo de la calidad de los candidatos que sean postulados en su momento y de la calidad de las campañas y las propuestas que cada quien haga.

Inclusive, cada partido y varios de los aspirantes a las candidaturas han aplicado también encuestas que contratan a alguna empresa, para tener un juicio personal y nos han comentado que efectivamente, la tendencia aquí publicada es la correcta.

El segundo resultado fue la preferencia por partidos (sin candidato) en que, efectivamente, el PRI aparece como puntero en las preferencias pero seguido muy de cerca por el PRD con sólo 3.3 puntos porcentuales, que si se le suman los que obtienen ahí mismo el PT y MC, quedan prácticamente empatados.

Entendemos y lo hemos comentado inclusive con dirigentes y militantes de diversos partidos, que en Xalapa, hay preferencias electorales muy distintas y muy marcadas, e inclusive hay muchos ciudadanos que no simpatizan con partido alguno pero que en cambio tienen un marcado antipriísmo, que están en contra de ese partido y quieren que pierda, como sea pero que pierda, pero como cualquier experto lo sabe, eso depende de muchos factores que están más allá del resultado que el poder de una encuesta pueda generar.

De hecho, se tiene la creencia (que ni siquiera es teoría) de que quien obtiene la delantera en una encuesta, logra que otros se adhieran y es cuando la encuesta se convertiría en un instrumento publicitario, pero para comenzar eso no está probado y luego, si se comprobara, su publicación se tendría que incluir dentro de los paquetes publicitarios o de plano, prohibir, pero no es ese el caso.

Repetimos: la ciencia perfecciona sus diseños estadísticos, sus instrumentos de muestreo y el trabajo de campo de los encuestadores y no puede desacreditarse el resultado simplemente porque a alguien no le guste o no sea de su preferencia, pero al propio tiempo, los ciudadanos deben saber cuál es la encuestadora que los presenta, el diseño estadístico que aplica y que ahora, por ley, ya debe ser conocido por las autoridades electorales, así como los instrumentos y registros que se utilizaron.

La encuestadora Visión de Futuro se ha registrado como tal en los últimos procesos estatales ante el Instituto Electoral Veracruzano y se ha apegado siempre a la legislación, de modo que su historial puede comprobarse en ese Instituto y los éxitos y confiabilidad de sus mediciones se han refrendado en los resultados de las elecciones que son conocidos por todos.

Ante ello, Visión de Futuro no podría atentar contra el respeto y la confianza que se ha ganado entre los ciudadanos y por ello, presentará los resultados de sus encuestas siempre apegados a la realidad que mide, sin intereses personales, económicos o partidistas porque sólo así se habrá de consolidar su presencia entre los veracruzanos como una empresa digna de confianza, digna de los veracruzanos.