Embargar inmuebles no resolvería crisis financiera de la UV: Julen Rementería

Para el diputado secretario de la Comisión de Hacienda del Estado de la actual Legislatura estatal, Julen Rementería del Puerto, el Gobierno del estado, a través de la Secretaría de Finanzas y Planeación, debe pagar en efectivo la deuda de dos mil 500 millones de pesos que tiene con la Universidad Veracruzana, “no hay de otra”.

Por lo que dijo estar en contra de que la Máxima Casa de Estudios haya solicitado embargos precautorios de bienes inmuebles propiedad del Estado para garantizar el pago de la deuda, como es el World Trade center de Boca del Río y el Velódromo de Xalapa.

Ambos inmuebles —dijo — no generan dinero, ya que sólo ofrecen un servicio a los ciudadanos, y no se distinguen por ser generadores de dinero; ambos tienen fines distintos a la generación de recursos.



“Un embargo precautorio con estos dos inmuebles no le serviría de gran cosa a la Universidad. No sé si ese tipo de embargo le convenga, porque a final de cuentas lo que necesita es dinero para poder operar eficientemente sus actividades académicas y cumplir con sus programas y presupuesto anual. Evidentemente, si le dan inmuebles eso no le significa la oportunidad de tener recursos y mucho menos de cumplir con su objetivo, que es el de un carácter docente. Yo creo que lo que hay que resolverle a la UV es un asunto en metálico y no con inmuebles”.

En ese sentido, aseveró que SEFIPLAN debe pagarle a la UV “no hay de otra”, por lo que se debe hacer un convenio para ir generando el pago del adeudo en el entendido de que Veracruz es, en este momento, un Estado insolvente.

El pago de la deuda financiera de la UV no se consigue embargando bienes o propiedades del Estado, porque esos bienes no le van a generar ingresos a la Universidad.



Por lo que insistió que un embargo precautorio del World Trade Center y del Velódromo de Xalapa en realidad no le conviene mucho a la Universidad Veracruzana, porque lo que la institución necesita es dinero y no inmuebles.

Sin embargo, es necesario, y urgente, buscar la forma de que el dinero que se han llevado en este sexenio regrese a las arcas públicas, para que se empiece a pagar todo lo que se le debe, no sólo a la UV, sino a proveedores, contratistas, maestros y jubilados, principalmente.