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Sección: Estado de Veracruz

Genera polémica inauguración de avenida; vecinos afirman que no está completa

Ayuntamiento de Veracruz entrega 30 cuadras de concreto hidráulico; un grupo defiende la obra

Doris Castaneyra Veracruz, Ver. 05/11/2012

alcalorpolitico.com


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Previo a la inauguración de pavimentación en la calle Antonio García Gómez, de las colonias Reserva Tarimoya 2 y 3, habitantes se manifiestaron argumentando que está inconclusa la obra, pues faltan calles por pavimentar y sistema de drenaje.

A pocos minutos de arribar la presidenta municipal, Carolina Gudiño Corro, vecinos de la colonia Reserva 2 protestaron con cartulina en mano, no obstante fueron abordados por personal del Ayuntamiento para evitar dicha manifestación.

Además, cuando los vecinos comenzaban a expresarse, habitantes de la colonia aledaña empezaron a alegar con éstos para defender la obra que inauguró la Alcaldesa.

Es de mencionar que el Ayuntamiento de Veracruz informó que la obra beneficia presuntamente a 10 mil habitantes, pues son 30 mil metros cuadrados de pavimentación asfáltica, guarniciones y banquetas en concreto hidráulico, alcanzando un total de 30 cuadras de longitud.

Encabezando la manifestación la señora, Martha Reicher Onorato, denunció que no fueron tomados en cuenta diversas calles para pavimentarse, ni tampoco en el sistema de drenaje.

Acompañada por más de 10 vecinos, indicaron que las calles son Aguacate, Copite, Cuasia, El Árbol, Mangle, entre las cuales se encuentran en malas condiciones, poco transitables para la ciudadanía y vehículos.

Tras declarado esto, fue interrumpida por otra señora, quien omitió su nombre, y la cual expresó, “yo siento que no se puede pavimentar todo, cuando 20 años estuvimos sin nada de esto. Entonces ahora no se le puede exigir nada a la licenciada (Carolina Gudiño) algo que no puede hacer”.

A lo cual respondió la señora Martha: “No se estamos exigiendo, solamente que no se venga a parar el cuello con decir que lo hizo ella”.

Arremetiendo la otra mujer: “Esas calles yo siento están bien, no se viene a parar el cuello. Y si lo hace es porque se lo merece”.

Prosiguiendo la señora Martha con un tono más fuerte, “me deja hablar. Me deja hablar. Ya termino de hablar.” Lo cual derivó en una alegata a la cual se unieron más voces sin llegar a un punto en común.