Herencia de plazas se ha viciado; la evaluación debe ser continua: Daniel Domínguez

Daniel Domínguez Aguilar, secretario general delSindicato de Trabajadores Normalistas de la Educación en Veracruz, precisó que todo cambio es bueno para mejorar, esto respecto a la reforma educativa que presentó el presidente, Enrique Peña Nieto hace unos días.

Aseguró que podría acabar con los vicios que ha padecido el sistema educativo, al pretender que tanto la permanencia como el ingreso y la promoción del personal vigente, esté sujeto a criterios académicos, como la preparación y habilidades entre otros. No obstante, lo preocupante sería que tuviera tintes “punitivos o de castigo”.

En entrevista, mencionó que esta reforma implica mejorar el desempeño en aras de una educación de calidad. Por ello, el servicio profesional docente implica una evaluación constante, tal y como se hace actualmente en otras profesiones.

“Es una forma en que la Secretaría como entidad rectora de la educación, detecte permanentemente cuáles son las debilidades que pudieran mostrarse en el desempeño para que los programas de capacitación y actualización incidan para resolver esa problemática. Suponemos que será una entidad autónoma, manejadas por instancias ligadas con la educación que aportará insumos para que la Secretaría implemente actividades que mejoren el desempeño”.

Domínguez destacó la propuesta que la educación debe ser inclusiva, sobre todo en un estado como Veracruz, donde debe incidir esta reforma en el mejoramiento de las escuelas.

“Veracruz es un estado con un sistema educativo extremadamente complejo, porque cohabitan más de 14 organizaciones sindicales. Esto nos pega porque todo lo que tiene que ver con ingreso, permanencia y promoción vislumbra que las reglas van a cambiar. Tendrán que mostrar documentos que acrediten que tienen derecho a promoverse”.

Añadió que esto implica modificar algunos lineamientos sobre todo los que tienen que ver con las reglamentaciones secundarias, que abarcan desde la educación básica hasta la superior.

Del mismo modo, esperan que los nombramientos que se dieron en la SEP, sean para personas con esta visión, críticas de las prácticas indebidas y dañinas a la actividad magisterial. Lo cual dijo que se refiere a cómo el sistema ha utilizado el corporativismo para beneficiarse de esa parte.

“Es como si a un adicto le quitas de inmediato el objeto de su adicción y lo matas. El sistema se ha manejado con tantos vicios que de momento los queremos terminar y se requieren plazos, debería ir por etapas para evitar que haya demasiada inconformidad”.

Reiteró que una evaluación es indispensable, ya que permitirá conocer tanto debilidades como fortalezas para avanzar.

En el aspecto de la certificación o el hecho de aprobar ciertos indicadores para mantener el trabajo, indicó que implica un impacto laboral. Recordó que el Sindicato Nacional de Trabajadores al Servicio de la Educación tiene una aposición muy contestataria, sobre todo cuando se habla sobre las plazas vitalicias.

“La herencia de plazas se ha pervertido, en sí no es mala; si alguien tiene un hijo con un perfil profesional que puede acceder a ella no le veo nada en particular; el peligro es que ese beneficio se pervirtió y entró gente que nada tiene que ver con la función, pero todo eso tendría que irse aterrizando para saber cuál será nuestra posición”.

Refirió que aún es muy pronto para evaluarse, ya que esta reforma aún debe ser estudiada.

“Creo que es una reforma que tiene que irse asentando poco a poco. Desgraciadamente el sistema ha funcionado así. La maestra que muchos llaman 'la innombrable', ha sido muy benéfica al sistema durante muchos años; por eso tenemos ciertas dudas. Hay ciertas ventajas que veo como académico, pero como representante sindical hay que irla sopesando”, concluyó.