La autobiografía, de los géneros con mayor auge; a la gente le gusta conocer la vida de sus escritores

Algunos géneros que eran poco cultivados dentro de la literatura hispanoamericana han renacido, como por ejemplo la autobiografía, y es que ha despertado durante las últimas épocas el interés por conocer la vida de los escritores. La gente ya no se conformaba con leer los libros de Borges, o de Cortázar, ahora quería saber quiénes eran, cómo vivían y este interés se empezó a crear por el desarrollo de un género del siglo xx, que era relacionado con el periodismo: la entrevista.

Juan José Barrientos Contreras, habló durante el martes de lectores y lecturas realizado en la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Informática (USBI) de la Universidad Veracruzana (UV) de qué ejemplo de esto, es que en 1967 aparece un libro que es un mito, en este sentido, llamado "Los Nuestros" de Luis Harss, escritor chileno que decidió entrevistar a Borges y otros autores, y crear una publicación que se vendió mucho, al generarse un interés por la vida de los escritores.

El también escritor y autor del libro "La Gata revolcada" destacó que hay un auge de lo biográfico en escritoras como Guadalupe Nettel, y Rosario Ferré Ramírez de Arellano, que aunque con publicaciones distintas, dado su origen - la segunda fue hija de un expresidente de Puerto Rico y gozaba de una muy buena posición económica-, ambas hablaron en algunos libros de sus orígenes e incluso de sus familias.



Mientras Guadalupe Nettel era más autocrítica en sus libros, incluso con su familia y la manera en la que había vivido, Rosario Ferré demostraba un fehaciente amor a su padre, a quien le dedicó varios capítulos de sus libros, así como a sus antepasados, en un ejercicio para que quienes la leyeran comenzaran a entender un poco el origen de su vida, explicó el analista.

Otro ejemplo de autobiografía es el libro de "Memorias", de Elena Paz, hija del conocido autor mexicano, Octavio Paz quien en uno de los capítulos narró una historia de su juventud donde, junto con unos amigos, viajaron a alguna playa de Tuxpan, y vivieron algunos contratiempos, enterándose de eso su padre, quien al volver le propinó una buena regañada, cosa que para Barrientos Contreras permitía ver a un Octavio Paz más humanizado.

Por último recomendó a los asistentes, entre quienes se encontraba el alcalde de Teocelo y un grupo de jóvenes que serán los encargados de realizar círculos de lectura en ese municipio, comenzar a hacer ejercicios de escritura autobriográfica, leer, biografías que permiten desarrollar este tipo de género, tan socorrido en estos tiempos.