Ir a Menú

Ir a Contenido

Sección: Estado de Veracruz

La discriminación se institucionalizó en México, lamenta rector de la Ibero

David Fernández Dávalos señaló que las principales víctimas de esto son las mujeres indígenas y las personas no heterosexuales

?ngel Camarillo Xalapa, Ver. 26/08/2016

alcalorpolitico.com


Click para ver fotos
En México prevalece una creciente discriminación, e incluso esta es una práctica "institucional", afirmó el rector de la Universidad Iberoamericana de la Ciudad de México, David Fernández Dávalos.

"En México, una de las grandes lacras que tenemos como pueblo es el de ser discriminadores, decimos que no lo somos y que somos buena onda y tratamos a la gente de manera distinta según su color de piel, cómo habla el castellano y el sexo, si es hombre o mujer", criticó.

Tales situaciones, observó Fernández Dávalos, se "institucionalizan" y las principales víctimas de esto son las mujeres indígenas y las personas no heterosexuales.



Por esto, calificó de "ofensiva" la postura de la Arquidiócesis de la Ciudad de México en torno del matrimonio igualitario. "Y en general hay una falta de comprensión del tema", dijo.

Este viernes, el Rector presentó una ponencia para rememorar el aniversario 25 de la fundación del Movimiento de Apoyo a Niños Trabajadores y de la Calle (MATRACA) en el Museo de Antropología de Xalapa.

"Fui fundador de MATRACA hace 25 años, en 1991, empezamos a trabajar en niños en situación de calle, en ese tiempo; don Sergio Obeso, el Arzobispo, me pidió que me encargara de la Pastoral Universitaria y entonces empecé a trabajar con muchachos y muchachas de la Facultad de Psicología", narró.



De las primeras acciones, detalló, integraron un grupo denominado Universitarios por el Compromiso, habilitaron una vivienda para tal propósito y en poco tiempo se les solicitó dar albergue a un menor expulsado de una institución denominada Menores en Situación Extraordinaria, perteneciente al DIF.

"Y así recibimos a este muchacho y a los dos días recibimos un grupo grande y no supimos qué hacer con ellos, nos tuvimos que poner a estudiar cómo se hacía este trabajo y así nace MATRACA".

"En aquel momento, algo muy característico de la niñez trabajadora de las calles es que eran muchachos migrantes de la Ciudad de México y el puerto de Veracruz, relativamente más preservados de las drogas duras", comparó.