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Sección: Estado de Veracruz

Mañana jueves acudirán CAEV, PC y SEDESOL a Banderilla; resolverán el problema: Director de Gobernación

Vecinos pidieron estar presentes para escuchar las decisiones que se tomarán sobre el colector

?ngeles Gonz?lez Ceballos Xalapa, Ver. 19/09/2012

alcalorpolitico.com

El bloqueo de la carretera federal a la altura de La Martinica, en Banderilla, generó la molestia de muchos, incluidos los funcionarios representantes del gobierno de Veracruz, pues no se esperaban que les cayera la marabunta.

Primero llegó alguien de Política Regional, pero no llegó de muy buen humor, por ello los afectados le dijeron “mijito, si te molesta, mejor vete”.

La mañana fue de consignas, de gritos, de abucheos para pedir que llegara el gobernador Javier Duarte, que era la única voz autorizada para destrabar el cierre de la vía de comunicación; mientras, se hacían largas filas en ambas direcciones.

¡Que pase otro ratón!, ¡que venga Obama!, ¡vemos que ya lo resolvieron, sí cómo no!, le decían al director de Gobernación, de la Secretaría de Gobierno, Rogelio Hernández Madrid, mientras intentaba decir que de parte del secretario de Gobierno, Gerardo Buganza, había el compromiso para concluir la obra, pero seguía siendo interrumpido: “¡no, no, no, eso no sirve, que venga él, el Secretario!”.

Mientras que otros le decían: “cállate, escúchalo y después lo tumbas”. El funcionario proseguía: “la instrucción es muy precisa en el sentido como lo manifestaba el Alcalde: mañana mismo, en este momento que firmemos el documento, mañana mismo estamos reunidos con la empresa, con la autoridad municipal, que va a resolver con SEDESOL, Protección Civil, con CAEV para iniciar los trabajos pendientes”.

Los vecinos pidieron estar presentes para escuchar las decisiones que se tomarán sobre la construcción del colector.

“Mañana nos reuniremos a las 12 del día en Palacio de Gobierno”, les expuso a los vecinos; sin embargo, no estuvieron de acuerdo y dijeron que mejor fuera en Banderilla: “es la misma distancia de aquí pa´ allá, que de allá pa´ cá”.

Para ser mejor escuchado el funcionario le pasaron un megáfono; sin embargo, al parecer no funcionó y se ganó otra rechifla: “¡no sirve la corneta!”.