Al anciano se le desvaloriza, se le desecha y discrimina: Investigador

Previo al festejo del Día del abuelo en México, que se celebrará este 28 de agosto, el catedrático e investigador de la UV, Javier Beltrán Guzmán, no dudó en mencionar que al anciano se le desvaloriza, se le desecha y discrimina.
 
Después de dar una amena charla con personas de la tercera edad, en el auditorio del Ágora de la Ciudad acerca de “La vida, un continuo decir adiós”, el investigador de la UV por más de treinta años, resaltó que el reconocimiento a los ancianos debe ser de forma permanente y no sólo es cuestión de un mes o un día.
 
“Al anciano no se le valoriza, esta sociedad lamentablemente a los adultos mayores los consideran desechables, ya no les dan la misma importancia. Algunas instituciones de salud, no mencionaré cuáles, reducen la atención que le brindan al anciano, una forma de expresarlo es dándole citas cada año para que los vea el cardiólogo, por decir un ejemplo”.
 
Fue enfático al señalar que desafortunadamente los adultos mayores reciben un trato discriminatorio, no sólo por autoridades sino por la misma sociedad y en ocasiones la familia.
 
“Desafortunadamente es una cuestión cultural de nuestra sociedad civilizada, esta sociedad se ha encargado de irnos marginando y se nos discrimina en muchos de los casos, inclusive en la propia casa, los hijos poco a poco los van haciendo a un lado, no todos, unos más otros menos, pero sí necesitamos una evolución cultural hacia el anciano, lo mismo que al niño o al joven”.
 
También explicó que otro de los factores causantes de esta desvalorización o discriminación por parte de la sociedad o instituciones gubernamentales es el económico, ya que no es lo mismo invertir en un joven que en un anciano que pronto puede morir.
 
“En las nuevas leyes de jubilación se nota perfecto, ahora te hacen trabajar más años y te jubilas a mayor edad, porque los que nos jubilamos jóvenes, digamos tienes un periodo mayor para estar disfrutando de esta pensión y ahora sales y esperan que te vayas al menor tiempo posible y ya no resultes una carga”.
 
Al preguntarle sobre los programas de apoyo que existen para los ancianos, como el de “65 y más”, señaló:
 
“Son solamente paliativos, o sea, darles un dinero extra ¿cuánto puede servirle a alguien?, 500 ó mil pesos yo creo que sería más digno ofrecerles oportunidades de trabajo a su nivel con un salario decoroso aparte de su pensión, pero existe la contraindicación de que si eres pensionado y comienzas a trabajar, en unos casos te retiran la pensión y obviamente a todas luces es injusto”.
 
Indicó que la generación de oportunidades de empleo favorecería en la autoestima de muchos ancianos.
 
“Lo ideal sería eso, brindar oportunidades para la gente adulta de una manera formal y que tengan un ingreso que los haga sentir útiles e importantes, porque el problema, si acaso hubiera problema de autoestima en el adulto mayor, pues es eso, que somos desechables hechos a un lado”.
 
Cabe destacar que el desinterés del cual hablaba el investigador Javier Beltrán Guzmán se hizo visible al observar que el auditorio estaba con muchos adultos mayores, pero ninguna autoridad importante o en su defecto jóvenes o familias que se preocupen por escuchar y atender este vulnerable sector de la sociedad.