36 millones de jóvenes entre 12 y 29 años de edad, enfrentan problemas de violencia y desempleo

De acuerdo a datos de la Encuesta Nacional de Juventud, en México hay 36.2 millones de jóvenes entre 12 y 29 años de edad, quienes hoy en día enfrentan problemas de violencia y falta de oportunidades laborales.

Algunos especialistas explican que los jóvenes no sólo viven un escenario de agresión estructural del Estado, sino que algunos, debido a las condiciones geográficas donde viven se ven obligados a involucrarse en acciones delictivas.

Roberto García Salgado, profesor de posgrado de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la Universidad Nacional Autónoma de México, expresó que para algunos jóvenes, este modo de vida se convierte en una forma de subsistencia, al verse obligados a buscar soluciones a sus precarias condiciones de vida.

De la población de jóvenes más del 50 por ciento se distribuye en ocho entidades: Distrito Federal, Estado de México, Veracruz, Chiapas, Michoacán, Jalisco, Puebla y Guanajuato.

Pese a que podría considerarse que los jóvenes en ciudades con mayor infraestructura cuentan con más oportunidades, lo cierto es que el poder de adquisición delimita el alcance de dichas opciones. En este rubro, el especialista comentó que algunos enfrentan condiciones de exclusión, a pesar de su demanda constante y participación social.

De los 12 a los 16 años, se concentran en actividades educativas; posteriormente se limitan por las oportunidades que se les presentan y es ahí donde muchos se insertan en actividades económicas informales. Ya sea por ser víctimas y partícipes de la violencia.

El Investigador refirió que en los últimos años, los jóvenes han tenido la iniciativa de unirse para generar alternativas de desarrollo en sus propios espacios y buscar soluciones a sus problemáticas.

Sin embargo, las instituciones públicas no han logrado diseñar una política de Estado incluyente, que realmente tenga la capacidad de fortalecer la participación de los jóvenes.

Finalmente, concluyó diciendo que los jóvenes tienen el gran reto de ser reconocidos y ser partícipes de la construcción para solucionar sus problemas.