Acciones del Gobierno Federal para frenar la trata son insuficientes: diputada

La trata de personas hoy se ha llevado a una forma de esclavitud difícil de imaginar, se ha convertido en un infierno que se desarrolla en la oscuridad, afirmó la diputada federal Julieta Fernández Márquez.

Sostuvo que “en esta práctica ilegal se mezclan quienes cometen delitos del crimen organizado como secuestro, narcotráfico, lavado de dinero y tráfico de armas”.

Al participar en el foro “Reflexiones sobre la trata”, que se llevó a cabo en el auditorio “Aurora Palacios” del recinto legislativo de San Lázaro, la diputada guerrerense mantuvo que “en pleno Siglo XXI a las personas se les esclaviza de manera atroz y aberrante, se les obliga a hacer trabajos de toda clase y sin respetar su dignidad humana ni sus derechos”.



En ese sentido, comentó que estas personas se encuentran sometidas a las más terribles formas de violencia física, moral, sexual y humana a través de amenazas, abuso y maltrato, en general.

Julieta Fernández expresó ante legisladores de todos los partidos, funcionarios de Gobierno y especialistas en la trata, que si bien, la ley en la materia ya ha cumplido varios años y es un avance muy importante, el aspecto cultural aún representa un reto de la mayor relevancia.

“La compra y venta de personas con fines de explotación como la pedofilia, la pornografía y el turismo sexual son las formas más visibles de la trata, sin embargo, es un delito que va en aumento y las acciones de los gobiernos son insuficientes para frenarlo”, acotó.



Sustentó que el Gobierno de la República ya realiza acciones contra la trata de personas, de manera transversal con la participación de las secretarías de Turismo y de Trabajo y Previsión Social, entre otras dependencias que ya han adoptado protocolos, como el caso de turismo que ya emitió un código para la detección y denuncia del delito.

A pesar de los esfuerzos de difusión para la prevención, indicó la legisladora guerrerense, “existen muchas formas en que se puede practicar, pero el desconocimiento, la ignorancia y la falta de compromiso de algunas autoridades mantienen en riesgo a mujeres y niños que son las víctimas más numerosas”.

Lamentó que, en el Estado de Guerrero, “tuvo que haber un escándalo internacional para que la autoridad volteara a poner atención en el asunto y así incrementó las penas para quienes cometen este delito”.



Concluyó, “debe trabajarse en un sistema de difusión para crear la cultura contra la trata de personas porque muchas veces se desconoce la gravedad del tema y los protocolos son poco coercitivos, situación que se subsanaría con el conocimiento pleno de las formas de trata que existen”.