Los ayuntamientos de los municipios de Álamo-Temapache y Tihuatlán que fueron gobernados por el PAN durante la administración pasada dejaron las finanzas en bancarrota, lo que ha generado serios problemas para las actuales autoridades.
José Luís Rodríguez Rivera presidente municipal de Tihuatlán manifestó que el ayuntamiento heredó de la pasada administración una deuda de cerca de 10 millones de pesos, de los cuales la mayor cantidad se deriva de las demandas laborales que empleados que han sido despedidos presentaron ante la autoridad correspondiente, la mayoría fueron ganadas por los trabajadores a quienes ahora deberá pagarse salarios caídos y las prestaciones de ley que les fueron suspendidas.
Asimismo mencionó que se adeuda cuatrocientos mil pesos por concepto de alumbrado público, treinta mil pesos por el servicio telefónico, lo que ha generado que se haya suspendido el servicio de teléfono en algunas áreas, además de la deuda que enfrentan con el IMSS, toda vez que la pasada administración no pago el servicio médico de los trabajadores sindicalizados en los tres años de la administración del panista Francisco de Jesús Ortiz Yorio.
"Aunado a esto se debe pagar setecientos mil pesos por concepto de gasolina a las gasolineras propiedad del ex alcalde Ortiz Yorio, además de otras cuestiones que no se cubrieron, además de la deuda que contrajeron con Banobras, es por ello que en breve presentarán una denuncia ante las instancias correspondientes.
Por lo que respecta Álamo-Temapache la presidenta municipal Blanca Arminda Batalla con una actitud resignada señaló que el anterior alcalde panista Jorge Vera Hernández hizo alarde público de que su administración era ejemplar, lo que a ella le hizo pensar que encontraría sin problemas la nueva administración, sin embargo sucedió todo lo contrario.
Señala que la deuda heredada del ex gobierno panista es de 12 millones de pesos, esto porque se tienen 22 demandas laborales, mismas que fueron ganadas por los trabajadores que desde administraciones pasadas se habían presentado, sin embargo esos recursos tendrán que pagarse.
Otras deudas heredadas es el pago del IMSS y el impuesto sobre la renta que se les retuvo a los trabajadores en la administración pasada, por lo que recayó en el delito de desvío de recursos porque nunca depositó ese recurso a la Secretaría de Hacienda, esto lo absorbió ella al iniciar su administración para evitar una multa mayor.
Agregó que hasta ahora el ex alcalde continúa terminando las obras que no concluyó durante su administración, hoy día el solo anda supervisando que se concluya, porque desgraciadamente se confió en sus colaboradores.