El ayuntamiento de este lugar, argumentando que es debido a los recortes presupuestales, dio de baja a siete empleados de confianza, dentro de estos está la secretaria personal del alcalde Juan Manuel Diez Francos.
Estos siete ahora ex empleados, se dedicaban a realizar actividades administrativas, en su mayoría de apoyo a regidores y directores.
En este sentido el ayuntamiento a través de su departamento de comunicación social informó que:
“A cambio, con este recorte se da trabajo a 40 personas productivas que agilizarán el rescate de la fábrica de cerritos en sus edificios y explanadas, para que este mercado y central de abastos se encuentre listo para fines del mes de noviembre, con ello se dé trabajo al comercio semifijo y así se creen empleos en Orizaba”.
Se espera que en enero los trabajadores de confianza administrativos puedan volver a sus puestos una vez que los diputados aprueben la cuenta pública y se conozcan las participaciones federales a los municipios.