Anarquía en el deporte municipal: Casarín, sin control

Con la llegada de David Velasco Chedraui a la gubernatura municipal, se pensaba que las cosas serían mejores que con Ricardo Ahued. A unos días del ascenso, al menos en el deporte del municipio, por citar algo, se da una anarquía, pues no existe manejo o control. Por un lado, la presencia de un advenedizo que de deporte y relaciones publicas cero, ignorancia que lo ha llevado al ridículo y ese, se llama Fernando Quevedo.

Por otro lado, se encuentra el Director de Cultura y Deporte, Rafael Casarín, un ilustre y exquisito profesor, que del manejo del deporte, conoce igual que el señor Quevedo, también cero.

El que sigue, es el profesor Gerardo Arcos, el que se salva por haber estado allí ya en el ayer, como responsable y que ahora tiene la función de subdirector.

Se asoma, un cuarto, David García, también ya con experiencia en el mando, bajo la égida de Rafael Hernández Villalpando, populachero por consecuencia y ahora, se dice, aunque documentalmente no se ha comprobado su calidad profesional.

Todos y nadie manda.

El advenedizo, Quevedo, viene a manejar las cosas estilo su rancho, queriendo ser el manda más, llegando a situaciones que como ya se dijo, se pueden calificar de ridículas.

Nos indicaban, que en días pasados, ante la presencia de invitados de alto relieve, se refirió al Campo Deportivo M. Quirasco, con el “estadio Nohemí Quirasco”, hágame usted el favor. El pobre tipo, seguramente piensa que está en su rancho, o en una manifestación de Antorcha Campesina, no sabe que su madrina, la Regidora Cuarta, es de las más minivalentes del municipio; por cierto, el señor Quevedo, pretende que la presa local lo apoye, pero pobre, sus actos operan en contrario.

El licenciado Casarín, muy exquisito, pero poco productivo, es el Pérez Roque de la administración de David Velasco. De donde viene, quien lo trajo, eso sólo el Alcalde lo sabe, pero nada positivo le va a brindar al municipio, por la mediocridad y falsedad con que se desenvuelve.

Gerardo Arcos, dizque Subdirector de Deporte del Ayuntamiento, tiene en contra al recomendado de la Regidora Cuarta, el tal Quevedo, que lo única que le interesa es manejar la lana del municipio en los deportes, al amparo de ser designado Presidente del Comité Municipal del Deporte. A su favor, el conocimiento de la plaza, las relaciones con los medios de comunicación y el gremio de la educación física.

Su espíritu corto, es algo en su contra; la Olimpiada Juvenil, lo pondrá a prueba.

Por cierto, este martes se entregaron uniformes deportivos para los participantes de la Olimpiada Estatal. Uniformes corrientes a más no poder, que dejan mucho que decir del Municipio, pero estando Quevedo allí, es inexplicable, él es corriente a más no poder. David García Rosas, pudiera ser la solución, al menos así se vislumbra desde arriba. Ya titulado, con su futuro económico asegurado, pudiera ser finalmente el que mejor pudiera desempeñar la labor.