APIVER impidió a inspectores de la Procuraduría estatal del Ambiente verificar almacén de coque

A pesar de que está prohibido en el recinto portuario, el almacenamiento de coque expuesto, sin las medidas de confinamiento adecuadas, la Administración Portuaria Integral prohibió el ingreso a los inspectores de la Procuraduría de Medio Ambiente para verificar que la acumulación sea la adecuada.

A decir del Procurador del Medio Ambiente en el estado, Eduardo Aubry de Castro Palomino, dijo que los supervisores se encargaban de constatar que el coque tuviera un buen confinamiento.

Comentó que en la tercera ocasión que acudieron a inspeccionar, ante las constantes quejas de la población por la presencia de coque, el director de APIVER, Juan Ignacio Fernández Carvajal, les envió una carta avisándoles que no podían entrar más al recinto dado que es zona federal.

Explicó que ante cualquier queja que llegue al respecto a las oficinas de la Procuraduría es turnada a las oficinas federales de protección al ambiente para que actúen conforme a la ley.

“Tratamos de hacer una inspección hace poco, recibimos una carta por parte del Director de APIVER, donde decía que como bien sabemos esa es una zona federal y si nosotros teníamos una queja o una denuncia que las presentáramos ante las autoridades correspondientes, en este caso PROFEPA”.

Mencionó que hasta donde él tiene conocimiento se han aplicado todos los acuerdos firmados, a excepción del principal que es respetar el convenio en el tratamiento del material, que se presume es tóxico, pues han hecho caso omiso a las indicaciones del estado.

“Cada vez que nosotros recibimos una denuncia inmediatamente la atendemos, vamos a ver qué está sucediendo pero ya después, por ahí de la tercera inspección fue que recibimos la carta y nos dicen que ya no pueden entrar los inspectores de la Procuraduría y que tienen que canalizarse a la autoridad federal”.

Cabe mencionar que para evitar que el coque vuele a las casas de los vecinos ubicados en aquella zona de la ciudad, es aplicarle una celulosa a las montañas de polvo, lo cual tienen la obligación de realizar porque así se acordó.