Baja producción de mandarina en Álamo tras sequía del 2019

Por la ubicación geográfica, el Municipio de Álamo, principal productor nacional de cítricos, se ve afectado por inundaciones pero también por prolongadas sequías, situación última que provoca estrés hídrico en las plantaciones.

Tan sólo en este 2020, la ausencia de lluvias recién se cortó tras casi un año de estiaje, apunta Israel Pardo Mar, director de Fomento Agropecuario en el Municipio, al estimar que se vieron afectadas alrededor de 4 mil de las 60 mil hectáreas dedicadas a la citricultura.

Una consecuencia inmediata es que, en este ciclo agrícola, la producción de mandarina, por ejemplo, bajó considerablemente, primero por la falta de suficiente humedad y escasa floración y también porque el año pasado hubo sobreproducción.



Con la sobreproducción, explicó, los precios en el mercado fueron los más bajos en muchos años, provocando que un alto porcentaje de productores no pudiera vender sus cosechas y las dejaron secarse en los árboles, lo que también estresó a los árboles, generando escasa floración.

Asimismo, la sequía que arrancó desde febrero y marzo de 2019 secó gran cantidad de árboles viejos, especialmente de la variedad “tardía”, por lo que éstos tuvieron que ser reemplazados o podados para que retoñaran pero el proceso de rejuvenecimiento durará más de 5 años, periodo en el que en dichas huertas no habrá producción.