Buscan “norma” que impida a los alcaldes cometer barbaridades administrativas

El presidente de la Asociación Nacional de Autoridades Municipales, Tito Delfín Cano, dio a conocer que está impulsando el establecimiento de una norma que impida a los alcaldes hacer “barbaridades” en la recta final de sus administraciones.

El también presidente municipal de Tierra Blanca, recordó que su antecesor José Alfredo Osorio Medina, recibió una plantilla laboral de 130 empleados sindicalizados y al término de su gestión dejó 330 trabajadores sindicalizados, lo que implicaba una nómina de 65 millones de pesos.

“Estamos peleando que haya una norma que nos impida a los alcaldes hacer barbaridades cuando nos vamos. No es posible que recibas 130 trabajadores y entregues 330, le pones una madriza al presidente municipal que llega que no se la acaba”.

Aunque hoy la nómina del municipio de Tierra Blanca se redujo a 50 millones de pesos porque se concesionó el servicio de la recolección de los desechos sólidos.

En lo personal, aseguró que al cierre de su administración no hará “barbaridades” para no heredar problemas a su sucesor.

Aunado a lo anterior, en este año las participaciones federales que corresponden a los municipios de Veracruz han llegado en tiempo pero no en forma, ya presentan una disminución mensual de entre un 3 y 4 por ciento.

En el caso concreto de Tierra Blanca con un presupuesto anual de 74 millones de pesos, ha dejado de percibir participaciones federales de entre 80 y cien mil pesos mensuales, “tal vez no es mucho, pero si se suma se hace poco más de un milloncito de pesos”.

La Federación ha reiterado a los estados y a los municipios que hubo una disminución en la recaudación fiscal y por consecuencia bajan las participaciones federales, “recaudo menos, te doy menos”.

Pero dijo tener confianza de que en enero del próximo año llegue el recurso faltante a través de un Fondo Especial que será distribuido de manera equitativa.

A lo anterior le agregó dos millones de pesos que se le han descontado al municipio por concepto del pago de la bursatilización, aunque el compromiso del Gobierno del Estado es reembolsar esos recursos para el mes de enero.

Hasta el momento ningún ayuntamiento enfrenta la posibilidad de una quiebra financiera, pero de continuar esa situación, los problemas se podrían agravar.