El presidente Felipe Calderón admitió que comparte la suspicacia y la desconfianza que manifiestan los juarenses, sobre los hechos de violencia en la ciudad
Pidió a la sociedad ver las cifras e indicar en dónde están erradas, y hacer un balance objetivo de las acciones que se han hecho en Juárez.
"Creo que hay cifras, que aunque sean verídicas, no necesariamente corresponde a la realidad", expuso.
El mandatario dijo que "las cosas en Juárez están delicadas".
Han ocurrido sucesos, aseveró el mandatario, que han encendido las preocupación de propios y extraños.
Y destacó, el asesinato absurdo e irracional de los muchachos en Salvarcar, la muerte de una madre en un campo de juego y las tres personas vinculadas al consulado de Estados Unidos.
Todos estos hechos, apuntó, causan preocupación.
"Estamos presenciando el asesinato de personas probablemente ajenas a cualquier circunstancia delictiva. Hay un daño que se está haciendo a la sociedad".