Cansados de asaltos y robos, comunidad de Papantla se organiza para atrapar a delincuentes

Armados con palos, piedras, machetes y algunas armas de fuego, campesinos oriundos de la comunidad "Francisco I. Madero", de este municipio, decidieron enfrentar a los delincuentes que mantienen asolada la región, donde se han registrado innumerables asaltos, robos e incluso intentos de violación, como el ocurrido hace unos días, donde los delincuentes decidieron ingresar a un domicilio.

Al respecto, el subagente municipal, Fermín Gayosso Flores, revela que por las tardes, los habitantes de "Francisco I. Madero", se reunían en el Auditorio municipal para coordinarse y determinar las rutas y los puntos donde instalarían los retenes para revisar todos y cada uno de los vehículos y personas que entraban y salían de la comunidad.

“Nos destinamos a puntos estratégicos, machetes, garrotes, palas, picos, lo que tenemos a la mano, algunos tienen permiso para portar armas de fuego y las llevaban también, toda la comunidad está participando, hombres, mujeres, niños y jóvenes están en la vigilancia, anoche apagamos las luces y casi 300 personas estábamos a la espera de poder atrapar a los ladrones”, dijo Gayosso Flores.



Explicó que ayer jueves por la noche, estuvieron a punto de atrapar a un grupo de sujetos que ha ingresado en moto, camionetas y algunos otros vehículos, pero el temor es que también están armados. A los grupos de vigilancia también se han unido personas de otras comunidades como La Catalina e Ignacio Allende.

“Nos levantamos en armas por acuerdo del pueblo, el pueblo nos prometió respaldo en lo que nos llegara a pasar, nos unimos policías auxiliares y voluntarios para enfrentar a la delincuencia, asaltando a los jóvenes, casas, además de que les tomaban fotos a los niños cuando salían de las escuelas, no estamos preparados, pero lo vamos a estar, ya no vamos a permitir un abuso más”, dijo por su parte Héctor Pérez Martínez.

El acuerdo



Este viernes, autoridades municipales y de la Policía Municipal arribaron a la comunidad, el objetivo: evitar que se afianzara la conformación de los grupos de autodefensa, para ello prometieron capacitar a los policías auxiliares, además de a quienes se han enlistado como voluntarios, para que dentro del marco jurídico, en lugar de ser autodefensas, sean un grupo de vigilancia que funcione en coadyuvancia con la Policía municipal.

Asimismo, las autoridades se comprometieron a mantener una unidad que vigile de manera permanente en la zona. También, se señaló que de no cumplirse el acuerdo, volverán a iniciar el movimiento armado, para garantizar la seguridad de los casi mil habitantes de esa comunidad, donde la gente se dedica en su mayoría a las actividades citrícolas y ganaderas.

No hay patrullas



Además de otros problemas, la reciente administración municipal se enfrenta a la falta de patrullas para la Policía, esta situación ha originado que se incrementen los índices delictivos en el municipio, principalmente en las comunidades, donde la población está expuesta a diversas situaciones, ya que los delincuentes operan a sus anchas.