Al exigir una visa humanitaria para migrantes en Estados Unidos, la caravana de “Monseñor Romero” de El Salvador, busca concientizar a gobiernos y países de los peligros que enfrentan miles de centroamericanos que arriesgan su vida a bordo de “La Bestia”, expuestos a ser víctimas de la delincuencia que los extorsiona o recluta.
Al arribar al comedor “La esperanza del migrante” con “Las Patronas” en Amatlán, José Osvaldo López y Raúl Marion, voceros de la peregrinación con “Monseñor Romero; paso de la persona migrante”, hicieron un llamado a gobiernos y organismos defensores para que frenen las violaciones a los derechos humanos.
"Ahora los migrantes no solo tiene el riesgo de ser deportados, ahora el peligro está en los grupos de crimen organizado, les secuestran y obligan a los familiares a que les envíen dinero y muchas veces le asesinan", expresó José Oswaldo López.
Y es que tan solo en El Salvador estimaron que diariamente 150 personas dejan su país, anhelando conseguir un empleo y una mejor condición de vida, pero lamentablemente cada vez están más expuestos a ser víctimas de la delincuencia.
Sostuvo que la migración no va a terminar aunque Estados Unidos ponga muros, guardias y soldados, únicamente cuando se hagan inversiones que permitan tener trabajo con salarios justos para que las personas no tengan que abandonar sus lugares de origen.
Criticaron que los gobiernos usen a la democracia como un payaso y, destacaron que en México se cuenta con gente que ayuda a los migrantes.
La Caravana que lleva como estandarte a Monseñor Romero, busca concientizar a los gobiernos y organismos del drama que representa la migración, al desintegrarse familias porque los padres o madres viajan a Estados Unidos en busca de darle una oportunidad de vida distinta a sus hijos.
Por ello, buscan que se pudiera conseguir la visa humanitaria para los migrantes que prácticamente se ven forzados a permanecer en el país hasta por décadas, por qué de lo contrario tendrían que volver a vivir todo ese calvario.