Coatepec, rico en cultivos y con potencial para la buena agricultura: Slow Food

El coordinador del programa Slow Food en Centroamérica, el Caribe y Colombia, Andrea Amato, dijo que aunque no conoce la región de Coatepec, sí le han hablado del café que se produce y de su calidad, lo que puede significar un mundo de oportunidades para que la gente voltee a ver productos que no consume regularmente.

Tras los recorridos que ha realizado, ha palpado que la región es rica en cultivos y denota un gran potencial.

En un mundo que vive de prisa, Amato considera que la gente se habituó a la comida rápida, la cual no le representa beneficios a su salud, de ahí que coordine un programa como Slow Food, que es la contraparte del concepto de comida rápida, pues con ello se involucra a los propios productores para que introduzcan productos de calidad y que contribuyen a la salud de los consumidores.



Entrevistado en Coatepec, el joven de nacionalidad italiana, informó que Coatepec se une a más de mil 500 comunidades locales en todo el mundo y la finalidad de todo esto es para defender al campesino: al productor se trabajar con el consumidor.

Consciente de que las empresas de comida rápida se llevan las ganancias y sus productos no son precisamente de la mejor calidad, Amato dijo que no sólo basta apoyar a que los productores traten de presentar buenos productos, sino que los consumidores estén conscientes de que esos productos deben ser aprovechados: “Es educar a ambas partes, nos enfocamos también en preparar a quien consume esos alimentos”.

Consideró que la llegada de establecimientos de comida rápida a un lugar significa que la gente dejará de lado el consumo de alimentos tradicionales y por consiguiente ya no habrá ningún vínculo entre el productor y el consumir, “porque ambos están involucrados: uno lo produce y el otro lo consume, es una tradición; eso viene desde tiempos inmemoriales”.



Pero está convencido de que si se quiere vencer a los restaurantes de comida rápida, se tiene que apoyar al productor, para que a la vez, éste contribuya a conservar las tradiciones culinarias de la región: “Que los alimentos, que por tanto tiempo se han consumido, tengan una influencia muy particular con el que consume y hacer que se olvide de esa comida rápida”.

La intención de Slow Food no es arruinar a las empresas de comida rápida, pero sí insiste que debe haber apoyos a productores para que estos lleven los mejores productos al consumidor y, que a la vez, el consumidor no deje de comer todo aquello que consumió en la vida, entendiendo que la comida preparada en casa es mejor.

También, se trata de hacer entender a los consumidores que cada productor está dedicado a una agricultura buena y limpia, “pero también justa, con el campesino y con el medio ambiente”.



Para el italiano, cada municipio o comunidad que se dedique a la agricultura, tiene un gran potencial. “Y yo creo que Coatepec lo tiene, tiene ese potencial que se requiere para salir adelante”.