9 de febrero de 2017
alcalorpolitico.com
Con el ruido mediático a que ya estamos casi acostumbrados, el día lunes se festejaron dos acontecimientos (así los llaman ellos): los cien años de la promulgación de la Constitución que nos rige a los ciudadanos de a pie (aunque poco y nada le queda de aquella de 1917 al acumular más de 600 modificaciones y solo 26 de los 136 artículos son originales) y la promulgación de la respectiva de la Ciudad de México, el antiguo Distrito Federal convertido en Estado.
Muy poco vale la pena comentar el espectáculo político celebrado en el Teatro de la República, en Santiago de Querétaro, donde se habló de lo mismo: «defender los valores de nuestra Constitución: soberanía, libertad, justicia, democracia e igualdad» (EPN), etc., mientras afuera miles y miles de mexicanos se manifestaban tanto en el centro histórico de esa hermosa ciudad, todo sitiado por militares, como en otras partes de la república en clarísimo y patente desmentido de lo que en el interior del teatro se escenificaba.
Adentro, los discursos eran los mismos en los que ya nadie cree; afuera, las protestas eran las mismas a las que los gobernantes no suelen escuchar ni ver.
Así lo reseñaron los periódicos: Adentro: «A la sesión solemne acudieron 500 invitados entre políticos, legisladores, integrantes del Poder Judicial y miembros del gabinete, entre otros». Afuera: «fueron desplegados 3 mil elementos de seguridad, entre ellos 300 elementos de la Policía Federal del equipo antimotines. De acuerdo con fuentes militares fueron empleados siete helicópteros para el traslado de invitados, 90 vehículos y 35 minibuses… Alrededor de 200 comercios establecidos se vieron afectados por el cerco de seguridad, que abarcó 10 manzanas del centro histórico. "Nos echó a perder el domingo esta celebración, los domingos son cuando vienen los turistas a pasear", señaló una vendedora de antojitos».
Adentro: «Peña Nieto aseguró que se deben cerrar filas para alcanzar las más altas aspiraciones jurídicas plasmadas en la ley suprema, y para lograr una convivencia pacífica y civilizada». Afuera: «Integrantes de organizaciones campesinas, comerciantes, a favor de los derechos humanos y otros, reclamaron los efectos de las reformas estructurales impulsadas por el Gobierno federal... Bernabé Abraham, padre de uno de los 43 desaparecidos, dijo que “no puede haber un festejo de los 100 años de la Constitución cuando no (este no debió ser errata del redactor) ha sido violentada por el propio Estado. Tuvieron que venir expertos de otros países para desmentir las investigaciones de la PGR, torcieron la ley y dijeron que nuestros muchachos fueron quemados en Cocula, después se supo que eso no fue cierto, mintieron, se le pide a Peña Nieto que investigue y hasta hoy sólo encontramos oídos sordos"».
Adentro: El Presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis María Aguilar, afirmó que «autoridades y mexicanos deben cuidar la autodeterminación y soberanía nacional frente a coyunturas. Ni líderes de Gobierno preponderantes ni factores económicos o políticos ni circunstancias coyunturales deben determinar la fuerza del cambio. Nuestro destino como nación encuentra guía en los principios de autodeterminación y no intervención». Afuera: «Hay una gran irritación por el gasolinazo, por el aumento al gas, a los servicios básicos, hay una gran indignación, y luego vienen a sitiar el centro histórico con militares, ¿y los ciudadanos, qué festejamos si todo es para la clase política?», cuestionó Pablo González, del Movimiento Democrático de Querétaro.
Adentro: «Nadie puede pedir al pueblo imposibles, en cambio, se le debe(n) garantizar posibilidades reales de vigencia de sus derechos», dijo el mismo Luis María Aguilar. Afuera: «El paso constante de camionetas blindadas y de lujo, de convoyes militares y de vehículos del Estado Mayor Presidencial (EMP), molestó a algunos ciudadanos. "Tengo que abrir mi negocio, por qué no me dejan pasar, a qué le tienen miedo, hagan sus eventos, pero no nos perjudiquen", reclamó una señora, que lamentó ante los elementos del EMP el bloqueo de las calles». (Con informaciones de http://www.elmundodecordoba.com/ 5/2/17).
Y mientras esto sucedía en Querétaro, en la capital del país otro escenario con los mismos actores: políticos y pueblo, en torno a la promulgación de la Constitución de la Ciudad de México.
Adentro: «el patio oriente del Antiguo Palacio del Ayuntamiento estaba repleto de presidentes de partidos políticos, titulares del gabinete del gobierno capitalino, diputados locales, así como los miembros del grupo redactor de la propuesta de carta magna y de los integrantes de la Asamblea Constituyente» (http://www.jornada.unam.mx/2017/02/06). Afuera: «Organizaciones civiles de la Ciudad de México (protestando) por la promulgación de la Constitución de la capital del País, la cual consideraron de corte neoliberal» (http://www.elmundodecordoba.com//ibid).
Adentro: «Osorio Chong destacó que la carta magna capitalina es producto de intensos debates y consensos, que da voz a las mayorías, pero sin descuidar los derechos de las minorías» (http://www.jornada.unam.mx/ibid.). Afuera: «La composición de la (asamblea) Constituyente fue un acuerdo entre partidos políticos, el Gobierno federal y el de la Ciudad, para asegurar tener el control del proceso y hacer la constitución como un traje a la medida», comentó José Montes de Oca, secretario del Sindicato de Electricistas, coordinador de la Nueva Central de Trabajadores y de la Confederación de Jubilados y Pensionados de la República Mexicana (http://www.elmundodecordoba.com//ibid).
Adentro: «Muñoz Ledo y Encinas destacaron que la constitución local será un referente para los cambios que requiere el país, y es una obra colectiva resultado de movimientos ciudadanos». Afuera: «Como parte de la fiesta, se repartieron raciones de comida elaborada por los comedores públicos de la ciudad» (http://www.jornada.unam.mx/ibid.).
La UNAM, citando datos de una encuesta del Instituto de Investigaciones Jurídicas, señala: «La democracia mexicana está cimentada sobre una débil cultura de la legalidad, fruto de la desconfianza de los ciudadanos hacia las instituciones, de los elementos autoritarios presentes en segmentos de la población a lo largo del país, de la percepción negativa del desempeño de las instituciones y funcionarios encargados de la procuración y administración de la justicia» (http://www.animalpolitico.com/2017/02).
Circo completo.
[email protected]
Muy poco vale la pena comentar el espectáculo político celebrado en el Teatro de la República, en Santiago de Querétaro, donde se habló de lo mismo: «defender los valores de nuestra Constitución: soberanía, libertad, justicia, democracia e igualdad» (EPN), etc., mientras afuera miles y miles de mexicanos se manifestaban tanto en el centro histórico de esa hermosa ciudad, todo sitiado por militares, como en otras partes de la república en clarísimo y patente desmentido de lo que en el interior del teatro se escenificaba.
Adentro, los discursos eran los mismos en los que ya nadie cree; afuera, las protestas eran las mismas a las que los gobernantes no suelen escuchar ni ver.
Así lo reseñaron los periódicos: Adentro: «A la sesión solemne acudieron 500 invitados entre políticos, legisladores, integrantes del Poder Judicial y miembros del gabinete, entre otros». Afuera: «fueron desplegados 3 mil elementos de seguridad, entre ellos 300 elementos de la Policía Federal del equipo antimotines. De acuerdo con fuentes militares fueron empleados siete helicópteros para el traslado de invitados, 90 vehículos y 35 minibuses… Alrededor de 200 comercios establecidos se vieron afectados por el cerco de seguridad, que abarcó 10 manzanas del centro histórico. "Nos echó a perder el domingo esta celebración, los domingos son cuando vienen los turistas a pasear", señaló una vendedora de antojitos».
Adentro: «Peña Nieto aseguró que se deben cerrar filas para alcanzar las más altas aspiraciones jurídicas plasmadas en la ley suprema, y para lograr una convivencia pacífica y civilizada». Afuera: «Integrantes de organizaciones campesinas, comerciantes, a favor de los derechos humanos y otros, reclamaron los efectos de las reformas estructurales impulsadas por el Gobierno federal... Bernabé Abraham, padre de uno de los 43 desaparecidos, dijo que “no puede haber un festejo de los 100 años de la Constitución cuando no (este no debió ser errata del redactor) ha sido violentada por el propio Estado. Tuvieron que venir expertos de otros países para desmentir las investigaciones de la PGR, torcieron la ley y dijeron que nuestros muchachos fueron quemados en Cocula, después se supo que eso no fue cierto, mintieron, se le pide a Peña Nieto que investigue y hasta hoy sólo encontramos oídos sordos"».
Adentro: El Presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis María Aguilar, afirmó que «autoridades y mexicanos deben cuidar la autodeterminación y soberanía nacional frente a coyunturas. Ni líderes de Gobierno preponderantes ni factores económicos o políticos ni circunstancias coyunturales deben determinar la fuerza del cambio. Nuestro destino como nación encuentra guía en los principios de autodeterminación y no intervención». Afuera: «Hay una gran irritación por el gasolinazo, por el aumento al gas, a los servicios básicos, hay una gran indignación, y luego vienen a sitiar el centro histórico con militares, ¿y los ciudadanos, qué festejamos si todo es para la clase política?», cuestionó Pablo González, del Movimiento Democrático de Querétaro.
Adentro: «Nadie puede pedir al pueblo imposibles, en cambio, se le debe(n) garantizar posibilidades reales de vigencia de sus derechos», dijo el mismo Luis María Aguilar. Afuera: «El paso constante de camionetas blindadas y de lujo, de convoyes militares y de vehículos del Estado Mayor Presidencial (EMP), molestó a algunos ciudadanos. "Tengo que abrir mi negocio, por qué no me dejan pasar, a qué le tienen miedo, hagan sus eventos, pero no nos perjudiquen", reclamó una señora, que lamentó ante los elementos del EMP el bloqueo de las calles». (Con informaciones de http://www.elmundodecordoba.com/ 5/2/17).
Y mientras esto sucedía en Querétaro, en la capital del país otro escenario con los mismos actores: políticos y pueblo, en torno a la promulgación de la Constitución de la Ciudad de México.
Adentro: «el patio oriente del Antiguo Palacio del Ayuntamiento estaba repleto de presidentes de partidos políticos, titulares del gabinete del gobierno capitalino, diputados locales, así como los miembros del grupo redactor de la propuesta de carta magna y de los integrantes de la Asamblea Constituyente» (http://www.jornada.unam.mx/2017/02/06). Afuera: «Organizaciones civiles de la Ciudad de México (protestando) por la promulgación de la Constitución de la capital del País, la cual consideraron de corte neoliberal» (http://www.elmundodecordoba.com//ibid).
Adentro: «Osorio Chong destacó que la carta magna capitalina es producto de intensos debates y consensos, que da voz a las mayorías, pero sin descuidar los derechos de las minorías» (http://www.jornada.unam.mx/ibid.). Afuera: «La composición de la (asamblea) Constituyente fue un acuerdo entre partidos políticos, el Gobierno federal y el de la Ciudad, para asegurar tener el control del proceso y hacer la constitución como un traje a la medida», comentó José Montes de Oca, secretario del Sindicato de Electricistas, coordinador de la Nueva Central de Trabajadores y de la Confederación de Jubilados y Pensionados de la República Mexicana (http://www.elmundodecordoba.com//ibid).
Adentro: «Muñoz Ledo y Encinas destacaron que la constitución local será un referente para los cambios que requiere el país, y es una obra colectiva resultado de movimientos ciudadanos». Afuera: «Como parte de la fiesta, se repartieron raciones de comida elaborada por los comedores públicos de la ciudad» (http://www.jornada.unam.mx/ibid.).
La UNAM, citando datos de una encuesta del Instituto de Investigaciones Jurídicas, señala: «La democracia mexicana está cimentada sobre una débil cultura de la legalidad, fruto de la desconfianza de los ciudadanos hacia las instituciones, de los elementos autoritarios presentes en segmentos de la población a lo largo del país, de la percepción negativa del desempeño de las instituciones y funcionarios encargados de la procuración y administración de la justicia» (http://www.animalpolitico.com/2017/02).
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