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Columnas y artículos de opinión
Prosa Aprisa
¿Ajustes, al entrar al quinto mes?
Arturo Reyes Isidoro
31 de marzo de 2017
alcalorpolitico.com
¿Le está funcionando al gobernador Miguel Ángel Yunes Linares el equipo humano que nombró y del que se rodeó para gobernar Veracruz?
 
¿Es que la infraestructura que heredó está obsoleta, es inadecuada o ya no sirve para realizar y cumplir con la gran obra y los servicios que ofreció en su campaña?
 
¿El grave e incontrolable problema de la inseguridad debe atribuirse sólo a la falta de recursos económicos?
 

¿Calculó mal, o al llegar al gobierno de pronto se encontró con un Veracruz que no conocía, muy diferente de aquél que cogobernó cuando fue Secretario General de Gobierno en 1992 y por eso no ha dado los resultados que se esperaban?
 
En las respuestas puede que haya un poco de todo.
 
Él, un político avispado y con una gran experiencia, debió haberse dado cuenta ya que, siendo benevolente con ellos, varios de sus colaboradores no es que sean malos en el sentido de que resultan ineficientes, sino que no están hechos para el momento actual. O sea, puede que le echen ganas, pero nada más.
 

Como todos los gobernadores –unos más que otros–, nombró en los cargos claves a sus amigos, a los que le han guardado lealtad desde siempre y tal vez así los quiso reconocer, premiar, compensar, lo cual, de paso, habla bien de él. En otros puso a jóvenes inexpertos cuando las condiciones del Estado no están para llegar a aprender o a experimentar, además cuando su administración será muy corta.
 
¿Qué lo llevó, por ejemplo, a cambiar de decisión y nombrar a un civil, a un amigo amigo suyo como Secretario de Seguridad Pública cuando como candidato y como gobernador electo dijo que a esa enorme responsabilidad llegaría un general del Ejército? Habló incluso de que pediría al instituto armado una terna para de ahí seleccionar. Los hombres de verde olivo se quedaron esperando.
 
Jaime Téllez Marié no es una mala persona y he podido comprobar que pone toda su capacidad al máximo para servir, que quiere verdaderamente ayudar a su amigo, pero seguramente ahora está seguro que le hubiera quedado mejor otra posición.
 

La delincuencia organizada y la común, que casi se puede afirmar que están fuera de control, necesitan ser combatidas, neutralizadas al menos si no eliminadas, por un profesional estratega y con carácter de la estatura de un general del Ejército o de un vicealmirante de Marina, que empiecen por poner orden y por imponerse entre toda la tropa, que si no se le impone disciplina y rigor hace lo que quiere, hasta negociar y entenderse con los otros.
 
El secretario Téllez, de quien en lo personal tengo de su persona la mejor impresión, creo que ya quisiera poder dormir y comer a sus horas ante tanta violencia e inseguridad que azotan el Estado, pero tampoco, pienso, tiene el carácter para lidiar con los propios malosos que son los de dentro.
 
“Jefe –me han dicho policías rasos y trabajadores administrativos de Seguridad Pública a los que conozco por tantos años que estuve en el servicio público–, casi todos hacen lo que quieren. El señor Secretario no les impone nada ni algunos de los funcionarios que nombró”, y me citan el ejemplo del director de la Academia de Policía, también un buen hombre con merecimientos académicos, pero muy ajeno a la fauna que lo rodea. Cuando no se compadecen se ríen de ellos.
 

En este espacio me ocupé ya del Secretario de Gobierno, Rogelio Franco Castán, perredista, de izquierda (es un decir, es un decir), y para medir su estatura política y su capacidad al frente de la segunda posición más importante hice una comparación con el gran Secretario que fue en el cargo el mismo Miguel Ángel Yunes Linares. Nada qué ver (se ve que lo quiere bien, porque ante mi comentario, de alguna forma lo desagravió el 21 de marzo poniéndolo como orador oficial en el acto a Juárez).
 
¿En esas dos posiciones claves, política interior y seguridad pública, tiene el Gobernador a los funcionarios ad hoc, apropiados para la circunstancia que vive Veracruz?
 
Creo que ha resultado mejor la Secretaria de Finanzas, Clementina Guerrero, quien lo ayudó a salir bien de la bronca de la reestructuración de la deuda y lo ayuda a contener los efectos de la grave crisis económica, y ahora con un grupo de expertos habrá de conducir la negociación con los bancos, que no es cualquier cosa y está obligada a entregar buenos, los mejores resultados, porque de eso dependerá lo poco o mucho que pueda lograr y realizar la administración a la que sirve.
 

Secretaría de Gobierno, Seguridad Pública y Finanzas son las posiciones clave para el buen funcionamiento y el éxito del Gobierno del Estado.
 
Se dirá que es muy poco tiempo para plantearlo, pero dada la cortedad de la administración que será de sólo dos años, a la que le restan sólo 20 meses; dada la persistencia de los problemas y la necesidad urgente de resultados si se quiere prolongar un proyecto político de dos a ochos años, ¿hará ajustes el Gobernador en la composición de su gabinete, ya, ya, ya?
 
Todos sus antecesores los han hecho, incluso su gran enemigo político y personal, Fidel Herrera Beltrán, de entrada dijo que tendría tres gabinetes: con el que iniciaba, uno intermedio y otro para concluir. Así lo hizo. Otro gobernante, Miguel Alemán Velasco, habló de la carreta y las calabazas: explicó que en el trayecto unas calabazas se caen solas, otras se pudren y algunas se colocan bien y son las que llegan a su destino en buen estado.
 

No sería, pues, la excepción si hiciera movimientos, los que considerara adecuados, como tampoco sería sorpresa si echara mano de nombres y hombres o mujeres impensables hasta ahora. No, porque él es un político pragmático para quien el fin justifica los medios. Al menos no para mí que lo conozco desde jovencito –somos contemporáneos– y sé que es capaz de tomar las decisiones más inesperadas con tal de que sean efectivas.
 
¿Afectaría debilidad del PRD a Franco?
 
A quien podría afectar la debilidad y el desmoronamiento de su partido, el PRD, es al Secretario de Gobierno, Rogelio Franco Castán.
 

Ayer en la sección “Bajo Reserva” del diario El Universal se comentó que un bloque de tribus se prepara para convocar a una sesión de Consejo Nacional para acelerar la salida de la dirigente nacional de ese partido, Alejandra Barrales, cuyo periodo termina en agosto.
 
De más está decir la grave crisis que vive ese otrora fuerte partido, como lo evidenció la pugna por el control de la coordinación parlamentaria en el Senado.  
 
Si la Barrales cae, podría dejar huérfano a Rogelio, a quien el gobernador Yunes podría darle las gracias diciéndole además que ya le cumplió al haberlo llevado al cargo.
 

Franco Castán tampoco le ha servido como dirigente real, estatal, del PRD, como se acaba de demostrar cuando no supo o no pudo, o ambas cosas, sostener a David Velasco Chedraui como candidato de sus siglas a la alcaldía de Xalapa (la debilidad de la Barrales también dejaría casi en la indefensión a la candidata Miriam Ferráez).
 
En cuanto a la Secretaría de Seguridad Pública, esa posición la vienen reclamando desde la administración anterior tanto la Secretaría de Marina como la del Ejército.
 
Mañana sábado inicia el quinto mes de gobierno. Casi se va ya un semestre de sólo cuatro. Ya veremos si el gobernador apuesta por la permanencia de sus actuales colaboradores, si decide llevar en el pecado la penitencia. Y entonces sí, diríamos, que Dios nos agarre confesados.  
 

Montano, en homenaje a “Palillo”
 
Haciendo proselitismo, entre caricaturistas, el virtual candidato del PRI a la alcaldía de Xalapa, Alejandro Montano Guzmán, cortó el listón inaugural de la exposición dedicada al cómico mexicano “Palillo”, en el Museo de la Sociedad Mexicana de Caricaturistas de la Ciudad de México.
 
Entre los caricaturistas presentes estuvieron Luis Carreño, Alarcón, Manjarrez, Toño Garci, Apebas, Paco Baca, Román, Castrux, Salazar Berber y Mateo Villa, así como los veracruzanos Marcos Cruz "El Tlacuilo", presidente de la Sociedad Mexicana de Caricaturistas, Adrián García y Fernando Morales Fernández.