Los líderes políticos y de opinión acaban de recibir una gran lección sobre democracia en los resultados electorales que erróneamente se previeron en los 4 procesos que se vivieron el 4 de junio y que son la antesala de la elección presidencial.
 
Primero, cuando todos los medios de comunicación, líderes, analistas y comunicadores, pronosticaban y alentaban el seguro triunfo del Partido Movimiento de Regeneración Nacional MORENA en el Estado de México y pronosticaban que en Veracruz el comportamiento electoral de los ciudadanos iba a producir un ventarrón que los elevaría triunfantes en más de 100 municipios. Para su frustración y descontento los resultados les fueron adversos en ambas entidades y no se produjo, ni lo uno, ni lo otro.
 
Segundo, fue y es tan impactante en la conciencia nacional, la propaganda incisiva mediática, continua y depredadora, respecto a los actos de corrupción de los ex Gobernadores priistas Javier Duarte en Veracruz, César Duarte de Chihuahua, Rubén y Humberto Moreira Valdez en Coahuila, Tomás Yarrington en Tamaulipas, Andrés Granier en Tabasco, Roberto Borge en ese momento prófugo y la consecuente embarrada al señor Presidente Enrique Peña Nieto, sobre todo en su feudo mexiquense y responsable de todo lo bueno y lo malo que suceda en el país, tanto que se llegó a creer por sus sepultureros que ya preparaban alegres y burlones en sus expresiones y gestos, el festivo funeral del PRI, para su desencanto los priistas menguaron su confianza, pero no cambiaron sus convicciones y en todo el territorio nacional ese día a quienes tocó votar, con su sufragio inyectaron suero vivificante al casi nonagenario PRI, que hoy se pavonea, lleno de energía y vitalidad, listo para las próximas contiendas en las que va dispuesto a triunfar.
 

Tercero.- La gran lección a los líderes nacionales, se las dio Veracruz (PAN-PRD) y Nayarit, (PAN, PRD, PT) en que con sólidas alianzas entre partidos nacionales y locales lograron imponerse territorialmente, casilla por casilla a veces con mínimos márgenes porcentuales que finalmente les permitieron a sus candidatos alcanzar la victoria, gubernatura en Nayarit y 112 alcaldías en Veracruz.  
 
Lamentablemente después de la elección quienes atados por sus personalismos y vanos orgullos, creyéndose amados del pueblo y engañados por su propio engreimiento, ahora se unen para reclamar sin sustento, triunfos que no obtuvieron más que en su ingenua imaginación.
 
Caso contrario es el de los priistas que con altura reconocen donde fueron derrotados y donde el triunfo les fue escamoteado por campañas dispendiosas, en donde se rebasó el tope en los gastos de campaña, por coacción, inducción a dar el voto a favor o en contra de algún partido o candidato, por alteración de actas o cualquier otro incidente, prestos, con pruebas documentales como son las actas de cómputo por casilla debidamente firmadas, foto videos y estudios contables, no sombrerean ni gritan, ni litigan en los medios de comunicación, sino que se van directo a los tribunales competentes a reclamar una sentencia justa.
 

Estas pruebas de civilidad política las valora y las reconoce la sociedad que previamente ha creado instancias y tribunales para que las elecciones sean transparentes, de ahí que si alguien quiere acusar y tiene pruebas sobre la intromisión de particulares o de autoridades en el proceso, debe de denunciarlo y cerciorarse de que se castigue a los infractores no importando el rango, ahí está el ejemplo de la vilipendiada diputada Eva Cadena, a quien se le ha abierto una carpeta de investigación por recibir dinero quién sabe de dónde y quién sabe de quién, pero hasta donde se sabe era para su próxima elección.
 
El panorama nacional con los resultados electorales recientes ha cambiado radicalmente, el exigente y desesperado llamado de Andrés Manuel López obrador a la unidad en su torno.- Solo esa unidad y no otra, rompió el esquema que veníamos contemplando en su partido, que realmente no sabemos en el fondo qué es lo que tiene en su bolsa de votos, aparte de su tronante discurso y los cientos de intelectuales, políticos, analistas y millones de resentidos que hay en el país en contra del sistema y a favor de la esperanza que pregona. En Veracruz por los pésimos resultados, descubrimos que era un enano que brincaba tronante en el tapanco causando incertidumbre y zozobra.
 
El gran problema de Andrés es que carece de operadores de base y todo lo trae, lo trae en el aire, con tiempo dijimos que en Veracruz no iba a obtener lo que el anhelaba, porque sus candidatos se registraron y se tiraron a la milonga, siendo desconocidos para la generalidad de los electores, particularmente de los propios que se autoderrotaron ante la falta del estímulo presencial, el discurso aunque claro, no logró cambiar la inercia mental de los ciudadanos que en las campañas y en la elección según informaciones, cayó en los mismos vicios de siempre, recibiendo las despensas y mordiendo el anzuelo, supuestamente comerciando el voto de alguna manera, a cambio de promesas.
 

La izquierda nacional fracturada por orgullos, ha perdido el rumbo ideológico y se ha extraviado en individualismos caducos que la empinan a la derrota. El PRD, nace inspirado en una política nacionalista de izquierda que en sus orígenes se inclina a la economía mixta con el viejo modelo de la intervención del Estado, con el monopolio en áreas estratégicas como el petróleo, comunicaciones, energía, ferrocarriles y otros. PT y MORENA con aproximaciones se colocan en la misma ruta. En tanto el Parido de Movimiento Ciudadano que nace como un movimiento social con la estrella aliancista, actitud que le puso el sello en su nombre original de Convergencia, colocándose en el centro izquierda de la política nacional por su inspiración en la social democracia.
 
En México no se pacta por identificación ideológica o por identificación sentimental, todos los pactos son por interés y tratándose de la Presidencia de la República el pastel es tan grande y tan rico, que el saqueo iniciado por los españoles hace 500 años, no le ha mordido ni una tapa todavía, eso sí, su población mayoritaria permanece empobrecida, desempleada y con las grandes angustias que produce la necesidad.
 
Pero desde allá desde los Pinos, se reparten las secretarías de estado, senadurías, diputaciones, gubernaturas, ayuntamientos, concesiones y todo el dinero del mundo, pero primero habría que llegar para tener el cuchillo por el mango y repartir las sustanciosas rebanadas y las nada despreciables menusas.
 

De los grandes partidos nacionales que hasta la elección pasada competían como alternativas mayoritarias, PRI, PAN y PRD, los últimos 2 ya han colocado en la pasarela a sus aspirantes, de los cuales a ninguno se le ven los suficientes espolones para ser competitivos, excluyendo desde luego al Gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes.
 
Ricardo Anaya se había metido a la carrera presidencial con la bandera de invencible, por los triunfos logrados por su Partido en las últimas elecciones de Gobernadores, pero casi al llegar a la meta se tropieza, cae estrepitosamente por la derrota en Coahuila y en el Estado de México y desesperado hace esfuerzos por levantarse rehuyendo los señalamientos que le hacen sus compañeros para que renuncie.
 
En el PRD se respira decadencia por la deserción masiva de líderes y militantes que corren deslumbrados a sumarse al CAUDILLO de MORENA, situación que mantiene estático al partido y abatidos a sus aspirantes y líderes, quienes esperan el momento de negociar las alianzas necesarias. Para permanecer en el juego se aliarían hasta con el diablo para sobre vivir, vamos hasta con el PAN o con MORENA, aunque no guarden ningún parentesco.
 

Pero por el momento solo se ven henchidos e hinchados el PRI sin candidato, sin aspirante y sin pasarela. El PAN que ya no engorda y MORENA. El éxito de cada uno dependerá de las alianzas que logren concertar.
 
La más posible alianza de MORENA seria con el Movimiento Ciudadano, partido con el que Andrés Manuel se ha entendido en diversas ocasiones, la más trascendente fue en la última elección del 2012, en las que mientras los partidos PRD y PT discutían quien sería el candidato, el licenciado Dante Delgado les dio el albazo, tomándole antes que nadie la protesta como candidato a Presidente de la República.
 
El Movimiento Ciudadano crece de manera paulatina, a nivel nacional tiene un importante número de alcaldías sobre todo en Jalisco, Michoacán y Chihuahua, ha sido artífice en las alianzas con el PRD para conquistar las gubernaturas y en Veracruz se ha mantenido con una votación dispersa en todo el Estado que le suman el importante capital político de 221 000 votos en esta elección con 9 alcaldías. Logrando superar las escasos 37 000 obtenidos en la elección para Gobernador del año pasado.
 

El partido MORENA que en la elección pasada para Gobernador, obtuvo 810 000 votos, con un candidato desconocido, entonces sin presencia, a escaso un año descendió alarmantemente a 556 000 sufragios, es decir más de un cuarto de millón a pesar de la intensa campaña de Obrador y la abúlica conducta de sus candidatos que se dejaron ganar sin meter las manos.
 
De ahí que se avizora según corren versiones entre correligionarios y allegados, una alianza nacional y estatal que de ser cierta llevaría como candidato a Gobernador por esta alianza MORENA M.C. a López Obrador a la Grande, Dante Delgado a la Gubernatura, Cuitláhuac García, Manuel Huerta o Rocío Nahle a las Senadurías y para las Diputaciones uni y pluris sobran nombres. Esta sí sería una formula competitiva.  
 
Pero quien sea el candidato, tendrá que pensarle 2 veces, el candidato a vencer en este momento se llama Miguel Ángel Yunes Márquez, el alcalde vencedor de Boca del Río que de salida solo con 5 municipios (Veracruz, Boca del Río, Tantoyuca, Álamo y Pánuco) tiene una bolsa fresca de 200 000 votos para jugarla con quien sea, además del impulso y apoyo de 108 municipios más, que su partido junto con el PRD controlan y movilizaran cuando sea necesario y prudente hacerlo.
 

Mientras esto sucede, a pesar de los vientos en contra, la segunda fuerza estatal, el PRI, sigue firme, los veracruzanos sorteando toda clase de obstáculos lograron mantenerlo firme en la palestra, pero al parecer sus líderes no han sido capaces de asimilar las experiencias del pasado y continúan manteniendo una estéril lucha interna, si bien es cierto que aún es prematuro hablar de la sucesión, las indecisiones nuevamente lo llevarán al fracaso. Es tiempo de reconocer la dinámica de fuerza y activismo que le imponen sus bases.  
 
Renato Alarcón, su líder ya barrió hacia fuera de la casa al Duartismo, ya cumplió un ciclo importante en la vida del partido, ahora le toca dirigir y poner orden en la sucesión del 2018, si es que Enrique Ochoa se lo permite, pero el PRI se impondrá a pesar de los pesares.  
 
En fin que el resultado de las pasadas elecciones acercó sospechosamente al importante capital nacional encabezado por el magnate Carlos Slim, hacia el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, con quien se le vio profusamente en fotografías y videos donde firman pactos. También propició la detención del ex Gobernador prófugo de Quintana Roo, Roberto Borge y una prueba de la confianza en los gobiernos priistas fue la inmediata alza en la bolsa de valores y la baja del dólar. No olvidemos que todo son circunstancias y actitudes que se dan en el tiempo, lo que ayer fue, ya no es. Y lo que hoy es, no será mañana. Esa es la fuerza de la dialéctica, a nosotros nos queda prepararnos para esos cambios eligiendo siempre lo mejor para todos.- Por el bien de la causa.
 

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