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Columnas y artículos de opinión
Prosa Aprisa
Xóchitl, ¿justicia o venganza?
Arturo Reyes Isidoro
4 de agosto de 2017
alcalorpolitico.com
Según una versión que dio el martes el columnista Raymundo Riva Palacio, Arturo Bermúdez Zurita le permaneció fiel a Javier Duarte hasta que la PGR (en realidad la Interpol Guatemala) atrapó al gordo.
 
Apuntó que el exsecretario de Seguridad Pública se hacía cargo de la logística familiar de Duarte, “que incluyó el escape por carretera, en vehículos separados –e intercambiados en la carretera de Veracruz a Coatzacoalcos–, de Duarte y su esposa Karime Macías”.
 
Para su versión el periodista debió tener buenas fuentes, o incluso para algunos datos como el que cita de la huída, acceso a las declaraciones ministeriales de Bermúdez.
 

El tema de la columna es sobre “los informantes de Yunes”, excolaboradores de Javier, quienes presuntamente habrían dado información al gobernador Miguel Ángel Yunes Linares para fincar acusaciones contra el exmandatario, Arturo Bermúdez Zurita incluido.
 
Si en actas constara que fue Bermúdez quien facilitó la huida de Duarte, tal vez se aclararía entonces la situación del exgobernador interino Flavino Ríos Alvarado, sujeto ahora a proceso acusado por el actual gobernador de haber sido quien presuntamente ayudó a escapar a quien había sido su antecesor.
 
Si recojo el detalle es porque un personaje político, que solicitó el anonimato, soltó la versión en meses pasados, ante un pequeño grupo de periodistas, de la que presuntamente fue la verdadera causa del encarcelamiento de Flavino.
 

Tan pronto supo que lo acababan de aprehender, según la versión escuchada durante una comida, una persona intercedió ante el gobernador Yunes Linares para abogar por el también exSecretario de Gobierno. Obtuvo una respuesta negativa y la explicación correspondiente.
 
El gobernador presuntamente le comentó al peticionario que el 5 de junio de 2016, día de la elección de gobernador, cuando su hijo el senador Fernando Yunez Márquez fue detenido con su vehículo en Coatzacoalcos, él llamó por teléfono a Flavino, entonces Secretario de Gobierno, para solicitarle que lo dejaran libre. Ríos Alvarado le habría respondido que no podía porque eran instrucciones (se supone que de Duarte). Por eso lo encarcelaba ahora. En el fondo, pues, de acuerdo a la versión, se habría tratado de un acto de venganza política y un mero pretexto la acusación de que el minatitleco había ayudado a huir a Javier.
 
Sería grave que una motivación parecida, esto es, un agravio político pudiera ser la causa del ensañamiento con la detención de Xóchitl Tress Domínguez, su “prisión preventiva necesaria” de dos años a causa de un presunto enriquecimiento ilícito y su vinculación a proceso determinado ayer por el juez de control Rafael Hernández Virúes.
 

Que se sepa, a menos que con pruebas se demuestre lo contrario durante la investigación complementaria que se realizará durante los próximos seis meses, esta joven y atractiva mujer en su breve paso por la función pública no le metió la mano al cajón y su delito fue haberse enredado sentimentalmente con el entonces gobernador y haber aceptado los obsequios de un hombre perdidamente enamorado de ella, tan perdido que le hizo los regalos que presuntamente le hizo.
 
Si la señora Tress robó recursos públicos y se comprueba fehacientemente que lo hizo, debe recibir el castigo legal proporcional, sin contemplación alguna.
 
El 22 de abril de 2015 publiqué en “Prosa aprisa” (“¿Xóchitl cruzó el pantano y no manchó su plumaje?”) que seis días antes mi compañero columnista Raymundo Jiménez había publicado en “Al Pie de la Letra” que los más sorprendidos con el despido de Xóchitl Dominga Tress Domínguez (el 23 de diciembre de 2014) como directora general del Instituto de Espacios Educativos eran los contratistas veracruzanos.
 

Según Raymundo, el presidente de la Asociación de Constructores del Estado de Veracruz, A.C. (ACEVAC), Rafael Nuñez Landa, había declarado el martes 14 de ese mes y año, en el programa de televisión por internet “Polaca a la veracruzana”, que durante su corta administración la exdirectora de Espacios Educativos había logrado darle un cambio rotundo a la institución ya que nunca les había pedido “moches” y había sido “la única” que se la había “jugado” con los empresarios locales al asignarles contratos por más de dos mil millones de pesos del programa “Escuela Digna”.
 
Apunté entonces: “Hoy, si me atengo a lo declarado por el líder constructor Nuñez Landa, hizo bien las cosas, cumplió y no abusó del poder, y tiene que reconocérsele”, a lo que añadí: “hay un testimonio público de un actor con autoridad que nos dice que… cruzó por el pantano (el de Veracruz es un enooorme pantano, un pantanote) y no manchó su plumaje, y eso sí, ante una administración tan cuestionada, resulta verdaderamente excepcional. Y tiene que reconocérsele”.
 
Ahora, si se le castiga con ensañamiento porque en su momento dejó las filas del PAN, si ese fuera el caso, y aceptó luego una invitación de Duarte para incorporarse a su gobierno (aparte cualquier relación personal, sentimental), entonces se estaría ante una grave arbitrariedad inaceptable.
 

No soy jurista y sólo acudo al sentido común: ¿no hubiera funcionado con que se le pidiera, con que se le citara y se le conminara a hacerlo, que devolviera lo que presuntamente le regaló Duarte y que presuntamente compró con recursos públicos, ya que de lo contrario tendría serios problemas e incluso podría ir a prisión?
 
No creo que se hubiera negado si presuntamente varios duartistas han devuelto millones en efectivo o en especie a cambio de no ser molestados y andan libres y se pasean impunes, como si nada. Una buena negociación hubiera hecho que la señora Tress hubiera entregado lo que presuntamente había sido adquirido en forma ilícita para regalárselo.
 
¿Es que es muy alta la peligrosidad de esta mujer porque en la madrugada del martes –seguramente ante una pregunta capciosa– cuando la interrogaban aceptó que tiene familiares en Estados Unidos, lo que bastó para que el juez determinara que entonces podía fugarse y la refundió en prisión “necesaria” por dos años? Con el respeto que como mujer me merece, creo que su única peligrosidad es ser joven, guapa y atractiva que cualquier hombre estaría en riesgo de caer bajo su encanto y, eso sí, fugarse pero con ella.
 

¿Por qué con Xóchitl sí y con Karime no?
 
¿Es que acaso es delito ser pareja sentimental de alguien, así sea un gobernante? ¿Acaso incluso ese es peor crimen que haber dejado en la ruina al Estado y con ello a miles, acaso a millones de veracruzanos quienes pagan las consecuencias?
 
Insisto: si la señora Tress desvió recursos públicos, si hay pruebas, sombra y barrotes por buen tiempo para ella, pero si incluso ya le aseguraron una propiedad sin haberla juzgado y sentenciado un juez todavía, esto es, si se ha recuperado parte del presunto cuerpo del delito, ¿no se le pudo haber otorgado el beneficio de la fianza para que siga el proceso en libertad?
 

No soy defensor de oficio de la señora, para nada, estoy en contra del abuso del poder como lo estuve cuando Duarte se ensañó con la ahora diputada local Maryjose Gamboa. Estoy por el respeto al debido proceso legal, por la legalidad. Y, claro, como todos los veracruzanos no sólo pido y espero sino que exijo castigo ejemplar para los verdaderos saqueadores de las arcas del Estado, y que se les quite lo más que se pueda de todo lo que se llevaron.
 
No dejan de asaltarme varias preguntas: ¿y las defensoras de los derechos de la mujer?, ¿dónde están los institutos oficiales en la materia?, ¿dónde las oenegés?, ¿dónde los “colectivos”?, ¿también ellas la van a lapidar mediáticamente, la van a linchar como en las redes sociales y en casi toda la prensa, la van a juzgar y a sentenciar y a declarar culpable antes de que lo haga un juez, un tribunal?
 
Ley antiaborto, ahí la llevan
 

El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso del Estado, Sergio Hernández, señaló que la iniciativa para la despenalización del aborto hasta las 12 semanas de gestación podría discutirse en el siguiente periodo de sesiones ordinarias que comienza en el mes de noviembre, ya que hay otros temas “más urgentes”, según leí ayer una nota del reportero José Topete, de alcalorpolitico.com.
 
¡Claro que hay temas “más urgentes”!, como la próxima elección para elegir gobernador en 2018. El PAN, su bancada en el Congreso (y con ello el Gobierno del Estado) no pondrá en riesgo un posible triunfo enfrentándose con la Iglesia, que sería perder el voto de toda la feligresía, que la constituye la mayoría de los veracruzanos.
 
Se no se dude. El tema lo irán bateando, así que los promotores de la iniciativa ya pueden sentarse a esperar y a llenarse de paciencia, prudencia…