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Columnas y artículos de opinión
Al Pie de la Letra
Dante: frentazo a Veracruz
Raymundo Jiménez
6 de septiembre de 2017
alcalorpolitico.com
Por más argumentos y explicaciones que dé sobre su adhesión al Frente Ciudadano por México registrado este martes ante el Instituto Nacional Electoral junto con los dirigentes nacionales del PAN y PRD, el exgobernador Dante Delgado, líder de Movimiento Ciudadano (MC), muy difícilmente podrá justificar su incongruencia de aliarse en Veracruz con el panista Miguel Ángel Yunes Linares, el verdugo que no solamente violó el Código Penal para llevarlo a prisión hace un par de décadas sino que actualmente encabeza el peor gobierno estatal, pues en los primeros nueve meses de su administración se han disparado la inseguridad, la deuda pública, el desempleo y la pobreza, mientras que a la Fiscalía General del Estado la ha usado para coaccionar a sus adversarios políticos.
 
El domingo 12 de marzo de este año, por ejemplo, a través de su cuenta de Twitter, el propio Delgado Rannauro calificó como “aberración jurídica” la detención del exgobernador interino Flavino Ríos Alvarado, quien ocupó la Subsecretaría de Gobierno en su cuatrienio 1988-1992.
 
Dante criticó que “en lugar de gobernar Yunes prefiere circo y actos de pirotecnia. Cortado por misma tijera”.
 

¿De concretarse entonces este frente opositor en 2018 en Veracruz, Delgado Rannauro y sus aliados apoyarán el proyecto transexenal de Yunes Linares, quien pretende heredarle la gubernatura a su primogénito Miguel Ángel Yunes Márquez, o acaso en las negociaciones el líder de Movimiento Ciudadano tendrá la suficiente fuerza política para vetar la candidatura del alcalde de Boca del Río, la que aparentemente tampoco estaría decidido a avalar el dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya?  
 
Y es que, como se recordará, a principios de diciembre de 2016, cuando apenas llevaba una semana en la gubernatura, Yunes recibió un duro mensaje a través del exdiputado y exsenador Juan José Rodríguez Prats, un panista doctrinario muy allegado a Anaya. En un texto publicado en el diario Excélsior, el político tabasqueño le advirtió desde entonces al mandatario veracruzano que “no intente heredar el cargo a uno de sus hijos”, pues apuntó que “sería el colmo del nepotismo”.
 
Igualmente le dio a la razón al desaparecido exdirigente Carlos Castillo Peraza, quien decía que “todos llevamos un priista en nuestro interior”, y que “en el caso de Yunes, no es pequeño y sí bastante mañoso”, por lo que apuntaba que hasta “los panistas temen que pretenda hacer del partido una dependencia del gobierno, sin respetar sus prácticas democráticas y sus ordenamientos internos.”
 

La percepción de Rodríguez Prats no era equivocada. Yunes no sólo se adueñó del PAN sino también del PRD, a cuyos líderes cooptó con cargos en su gabinete y candidaturas municipales para sus parientes, aunque hay exdirigentes perredistas que no se le han alineado como el diputado local Sergio Rodríguez, Celso Pulido y Daniel Nava. Sin embargo, el expriista será un factor relevante en la sucesión estatal y presidencial del año entrante, pues no ha dejado crecer políticamente a ningún otro aspirante del PAN y PRD a la gubernatura por encima de su hijo, el munícipe boqueño, al que anda placeando por todo el estado.
 
Dante podría ser muy competitivo también como candidato de este frente opositor, pero habrá que ver si Anaya aparte de la candidatura de Jalisco le concede también al líder de Movimiento Ciudadano la de Veracruz, lo que obviamente les podría representar un costo electoral si le descarrila a Yunes su proyecto nepotista.  
 
¿Qué podrían ofrecerle a cambio al gobernador y a su primogénito? ¿La senaduría o una diputación federal plurinominal? Porque ni modo que el junior se vaya a rebajar aceptando una curul en el Congreso local que ya ocupó en su debut político en 2004.
 

Sería interesante conocer la opinión de Yunes Linares sobre la conformación del frente PAN-PRD-MC, pues hasta la tarde de ayer no había hecho pronunciamiento alguno.  
 
DANTE, ESCUDERO DE ANAYA
 
Por cierto, pocos recuerdan que hace diez meses, a principios de noviembre de 2016, Dante Delgado salió en defensa de Ricardo Anaya cuando el dirigente nacional del PAN fue exhibido por primera vez en los medios de comunicación por la lujosa vida que llevaban él y su familia en el extranjero.
 

En esa ocasión, el líder de Movimiento Ciudadano afirmó que lo que hacía Anaya “es correcto y plausible”.
 
Delgado Rannauro le envió “fortaleza y ánimo” al dirigente panista tras la revelación de las costosas colegiaturas, la renta de una residencia de lujo y los constantes viajes que pagaba cada mes por tener a sus hijos y esposa en la ciudad de Atlanta, Estados Unidos.
 
“Ricardo Anaya. El esfuerzo que realizas para brindarles una preparación bicultural a tus hijos es correcto y plausible. Fortaleza y ánimo”, publicó Dante en su cuenta de Twitter.
 

El mensaje del exgobernador veracruzano causó extrañeza entre los usuarios de las redes sociales, pues ni siquiera los principales miembros del PAN habían salido en defensa de su líder.
 
Sin embargo, este martes, al acudir al Instituto Nacional Electoral junto con Anaya y Alejandra Barrales, dirigente del PRD, Delgado Rannauro expuso: “Este es el momento de pensar en México, de aceptar que gobierno, partidos y actores políticos hemos llevado al país por el camino equivocado, que la corrupción se convirtió en el pilar de un sistema que caducó, que ya no funciona y que le dio la espalda a los ciudadanos. Un sistema que permitió el ascenso al poder de la generación de gobernantes más corrupta de la historia, que pervirtió a las instituciones.”
 
Pese a que el PAN y PRD firmaron con el PRI el cuestionado Pacto por México al inicio de la administración del presidente Enrique Peña Nieto, el líder de Movimiento Ciudadano justificó ahora su alianza con los partidos blanquiazul y del sol azteca porque, dijo, se debe terminar con el sistema actual que funciona a base de acuerdos y traiciones, de discursos y promesas no cumplidas, de cuotas, prebendas, abusos de poder e impunidad, un sistema sin alma, sin corazón, sin consideración alguna hacia México.