icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Cabos Sueltos
Silvia Sigüenza
25 de julio de 2018
alcalorpolitico.com
Y como en los cuentos de hadas (que por cierto acabamos de vivir todos los mexicanos) vivimos un proceso electoral inédito por el lado que se le quiera ver:
 
Un candidato sin partido que después de varios intentos, al fin logra cuajar su viejo sueño. Ser la máxima autoridad de México.
 
Un país bastante sui generis en el concierto de los países latinoamericanos. Y en estricto sentido y buen castellano el señor Andrés Manuel López Obrador, no tiene partido. Después de haber pasado por algunos otros y por supuesto por el que el 97 por ciento de aspirantes y presidentes del país han sido acunados en sus primeros años, por el PRI. Y MORENA hasta donde públicamente se sabe no tiene registro como partido. Inició como (un) Movimiento de Regeneración Nacional.
 

Y, lleva varios años haciendo “campaña para lo que sea”. Y en esta reciente campaña donde se eligió Presidente de la República, al fin, merced al hartazgo ciudadano que durante sexenios se entregó al PRI. Andrés Manuel López Obrador gana la elección presidencial.
 
Vivimos un periodo de campañas bastante agitado, en diversas ocasiones se llegó al insulto o falta de respeto a todos los contendientes.
 
La historia y relatoría de los hechos está más que exhibida. Sorpresa causó el que el otrora partido triunfante (PRI) alcanzó apenas unas cuantas diputaciones y senadurías Ahora y pasará un buen tiempo todavía en que en corrillos de políticos y de ciudadano que barría por tradición con los triunfos, pasó a obtener unas cuantas posiciones.
 

Y como suele suceder, al paso de los días y semanas las aguas comienzan a querer tomar su nivel, lo que no significa que la derrota sufrida por el PRI vaya a quedar en punto muerto.
 
Lo que fue muy notorio fue la desbandada y traición de muchos personajes que durante su vida nada corta vivieron cobijados por los beneficios del PRI. A quienes por cierto, quizá pensando la siempre sabia naturaleza que muchos de los que se abrieron cuando vieron venir la derrota, y que muchos ya rebasan los sesenta y más, pues que se van llevando la sorpresa de que el partido al que se unieron, también mordió el polvo de la derrota.
 
Ahora nos queda esperar que el Presidente electo le pare en un buen al ofrecimiento de cosas y actuaciones que prometió en campaña y que obviamente no podrá cumplir. Un ejemplo: bajar el precio de la gasolina. Imposible, lo más seguro es que siga en aumento, el petróleo será nuevamente la fuente de riqueza del país.????¿¿¿¿¿ofrece cosas que no podrá hacer, que no podría hacer ningún otro que hubiera ganado. Se trata de acuerdos internacionales que no dependen de la voluntad del presidente electo, este o cualesquier otro que hubiera ganado.
 

Ya tuvo que meter reversa con la venta del avión presidencial, con la negativa a la construcción del aeropuerto, en fin. Creo, estoy segura que el Presidente electo habrá de entender que no es lo mismo comer que tirarse con los platos.
 
Y finalmente ha integrado a su gabinete a muchitos ex priistas, priistas y demás.