1.- En el concurso de egos en que han convertido algunos guindas la función pública, el ciudadano común ya no sabe a qué atenerse.
 
Hoy se difunde intencionadamente un dicho o alguna declaración de la autoridad federal y mañana se afirma otra cosa.
 
Y así transcurren los días.
 

Ya se mencionó que regresa el Pago de la Tenencia Vehicular, y de rebote por lo ácido de los comentarios verbales y escritos, se aclara que no hay tal intención del gobierno federal.
 
Ahora nos salen con que el pago del impuesto predial [seguramente rústico y urbano] se federalizará en cuanto al cobro, y “se regresará” a los municipios conforme lo confeccionaran las autoridades recaudatorias.
 
Que se aumentará el número de Ministros de la SCJN [Corte de Justicia] para ponerla en 16 integrantes [nótese que es par, para que alguien “decida” el sentido de la votación final] y se insiste en medios que esto no es cierto; que es “jalada” del Jucopo mayor que “se ha ido por la libre”.
 

2.- Y así transcurre el tiempo. “Nada es verdad ni es mentira, todo es según el color con que se mira”
 
Pero allí van, los dichos y díceres rodando.
 
3.- Bien a bien no sé a qué autoridad corresponda, pero de que alguien debe hacer algo, es cierto.
 

Los cuerpos de bomberos no están regulados como obligatorios en la Ley Orgánica del Municipio Libre, porque algunos municipios tienen cuerpo de bomberos y otros no.
 
Y cuando sucede algún incendio: Todos a correr para ayudar a “cubetear” cuando no existen ni bomberos ni bombas.
 
Esto es más provechoso: regular este servicio que pudieran dar los cuerpos de Protección Civil al nivel que se guste, pero que se intervenga en este asunto es muy necesario.
 

En la zona norte, por ejemplo, donde hay instalaciones de Petróleos Mexicanos [Poza Rica, Naranjos, Cerro Azul] seguro que existen cuerpos de bomberos. Pero ¿y los otros de todo el estado?
 
En Xalapa, Veracruz Puerto, Coatzacoalcos y Minatitlán, seguro que los hay. También en Córdoba y Orizaba. En fin, al parecer este asunto es de menor importancia para las autoridades. Para qué preocuparse.
 
4.- Las trombas no tienen palabra de honor. Y aquí también intervienen los bomberos.