12 de noviembre de 2019
alcalorpolitico.com
+No venganza sino legalidad
+Angustia de los mexicanos
+El polémico Evo Morales
No se puede… O más bien deberíamos señalar no se debe que, refiriendo lealtad y coincidencia hacia los senderos y postulados de la “Cuarta Transformación”, aceptemos el punto de vista externado en el transcurrir de las mañaneras por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, al referir en los marcos de su peculiar estilo que “todo esto de la violencia en Culiacán, hasta los hechos de la familia que fue asesinada, despertó los afanes autoritarios”, punto de vista que nos induce a suponer interpretaciones no apropiadas en los ámbitos presidenciales, sobre las reacciones registradas entre incontable número de mexicanos, habitantes de todas las regiones de nuestro territorio, en las cuales se escucha el reclamo ciudadano para que se aplique enérgica respuesta de rangos inmediatos y eficaces, con estricto apego a la legalidad y realidad de los hechos, ejerciendo de manera eficaz e inmediata la aplicación plena de la justicia.
No es venganza autoritaria ni exceso de poder lo que se reclama, y el tema no es de ahora sino que proviene de muchos años atrás, porque los niveles de violencia sobre nuestras tierras no constituyen un escenario nuevo, proviene desde administraciones gubernamentales anteriores, con el agregado que en lugar de disminuir, de reducir sus efectos letales, está aconteciendo lo contrario y los hechos recientes así lo ratifican.
El triunfo registrado en las elecciones federales pasadas, que precisamente llevó a la Presidencia de México a nuestro actual Ejecutivo de la Nación y que, paralelamente a ello, le sumó un Congreso favorable, se consumó precisamente por tales tendencias y en gran medida, como resultado del monstruoso crecimiento de la inseguridad, porque definitivamente fueron los ámbitos de violencia que para entonces privaban en el país, factor determinante para incrementar las votos en beneficio del triunfo de MORENA, entornos que obligan a la reflexión en el sentido que tales sufragios representan, aún en nuestros días, un reclamo contra el sistema imperante en aquel entonces, rechazo colectivo originado por la incapacidad para brindar seguridad, así como por la incompetencia para restaurar niveles apropiados de tranquilidad social, favoreciendo la reactivación de la economía… Bajo tales argumentaciones debe quedarnos claro que por las referidas causas se fueron de los mandos nacionales los del PRI y los PAN.
Pero lo que hoy preocupa a los integrantes de la colectividad que activaron con su sufragio el cambio, es que los índices de violencia que más irritaban a los electores y por los que negaron el sufragio a los rojos y a los azules, son ahora escenarios de mayor terror que cuando se ejecutó el golpe de timón en los mares electorales, no se sufragó para instaurar un gobierno “autoritario y prepotente”, de ninguna manera, pero sí para la vigencia de una administración sabia, menos corrupta y de mayor eficacia, que brindara a la colectividad la respuesta positiva a su mayor reclamo electoral: Retornarnos la tranquilidad social, restaurar un país libre de violencia, respetuoso de las leyes y con mayores niveles de productividad y desarrollo integral.
Los apuntes en referencia que se encuentran apegados a la realidad, reflejan por sí mismos que el reclamo de mayor seguridad en el territorio nacional, no se originó en los ámbitos del actual sexenio presidencial, prueba de ello es que tal reclamo lo escucharon todos los candidatos presidenciales, así como aspirantes a diputados y senadores en todo el país, exigencia del electorado que en aquellos días representó, de hecho, una pancarta permanente colocada frente a todo candidato presidencial o con aspiraciones para ingresar al Congreso de la Unión, por lo que no se originó precisamente con especial dedicatoria al actual Presidente de la República, sino que el voto por el cual ahora despacha en Palacio Nacional, ya llevaba implícito el reclamo de mayor eficacia y energía para frenar la violencia y rescatar la tranquilidad del país… Tal es el reclamo nacional que abrió camino institucional a la Cuarta Transformación, exigencia que, por más que se sostenga lo contrario, aún se encuentra en espera de la respuesta apropiada, al tiempo que la inseguridad prosigue ensanchando sus tentáculos en el territorio nacional… ¿O constituye una fantasía la creciente violencia en el país?
LO QUE SE LEE
En las redes de Internet se difunde un mensaje que refiere:
Cuando nadie apueste por ti, hazlo tú mismo.
Cuando nadie crea en ti… Ten confianza en ti mismo.
Y cuando ya no tengas a nadie a quien querer, ámate a ti mismo, porque ante tales circunstancias no necesitas a nadie más… ¿Será?
LO QUE SE VE
Claramente se encuentra confirmado, que el tramo de la autopista entre la región cordobesa y la zona poblana, constituye uno de los que refieren mayor número de hechos delictivos no sólo en contra de unidades del transporte público, sino igualmente se afecta a quienes se trasladan en vehículos particulares, pero lo más angustiante del tema, es que pese a tales escenarios de clara inseguridad, las autoridades responsables de brindar plenas libertades y seguridad a los viajeros, brillan por su notoria ausencia y, así transcurren los días con notables marcos de incertidumbre y angustias en “las flamantes” carreteras de la región poblana y veracruzana.
LO QUE SE OYE
Que la renuncia de Evo Morales como Presidente de Bolivia y su intento para arribar a territorio argentino, refiere que el daño a su prestigio ha trascendido a distintos países incluyendo obviamente a los argentinos, secuencia que originó la posibilidad de que el ahora expresidente pudiera pensar en México como el puerto de salvación, escenario que ya despertó comentarios en pro y en contra sobre tales posibilidades.
Ya se verá de manera inmediata en que termina la historia del episodio en referencia, tema que no deja de originar puntos de vista encontrados en las tierras del Águila y el Nopal, mientras tanto. Al escribir éstas líneas se informa sobre supuestos operativos de la Fuerza Aérea Mexicana para trasladar al depuesto presidente Evo Morales, hacia tierras mexicanas donde aparentemente se le abren las puertas como exiliado… Ya se verá el final de la historia y si los protocolos obligados para el tema se cumplieron tal y como lo marcan las leyes vigentes en el territorio nacional.
Gracias por el favor de su atención.
+Angustia de los mexicanos
+El polémico Evo Morales
No se puede… O más bien deberíamos señalar no se debe que, refiriendo lealtad y coincidencia hacia los senderos y postulados de la “Cuarta Transformación”, aceptemos el punto de vista externado en el transcurrir de las mañaneras por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, al referir en los marcos de su peculiar estilo que “todo esto de la violencia en Culiacán, hasta los hechos de la familia que fue asesinada, despertó los afanes autoritarios”, punto de vista que nos induce a suponer interpretaciones no apropiadas en los ámbitos presidenciales, sobre las reacciones registradas entre incontable número de mexicanos, habitantes de todas las regiones de nuestro territorio, en las cuales se escucha el reclamo ciudadano para que se aplique enérgica respuesta de rangos inmediatos y eficaces, con estricto apego a la legalidad y realidad de los hechos, ejerciendo de manera eficaz e inmediata la aplicación plena de la justicia.
No es venganza autoritaria ni exceso de poder lo que se reclama, y el tema no es de ahora sino que proviene de muchos años atrás, porque los niveles de violencia sobre nuestras tierras no constituyen un escenario nuevo, proviene desde administraciones gubernamentales anteriores, con el agregado que en lugar de disminuir, de reducir sus efectos letales, está aconteciendo lo contrario y los hechos recientes así lo ratifican.
El triunfo registrado en las elecciones federales pasadas, que precisamente llevó a la Presidencia de México a nuestro actual Ejecutivo de la Nación y que, paralelamente a ello, le sumó un Congreso favorable, se consumó precisamente por tales tendencias y en gran medida, como resultado del monstruoso crecimiento de la inseguridad, porque definitivamente fueron los ámbitos de violencia que para entonces privaban en el país, factor determinante para incrementar las votos en beneficio del triunfo de MORENA, entornos que obligan a la reflexión en el sentido que tales sufragios representan, aún en nuestros días, un reclamo contra el sistema imperante en aquel entonces, rechazo colectivo originado por la incapacidad para brindar seguridad, así como por la incompetencia para restaurar niveles apropiados de tranquilidad social, favoreciendo la reactivación de la economía… Bajo tales argumentaciones debe quedarnos claro que por las referidas causas se fueron de los mandos nacionales los del PRI y los PAN.
Pero lo que hoy preocupa a los integrantes de la colectividad que activaron con su sufragio el cambio, es que los índices de violencia que más irritaban a los electores y por los que negaron el sufragio a los rojos y a los azules, son ahora escenarios de mayor terror que cuando se ejecutó el golpe de timón en los mares electorales, no se sufragó para instaurar un gobierno “autoritario y prepotente”, de ninguna manera, pero sí para la vigencia de una administración sabia, menos corrupta y de mayor eficacia, que brindara a la colectividad la respuesta positiva a su mayor reclamo electoral: Retornarnos la tranquilidad social, restaurar un país libre de violencia, respetuoso de las leyes y con mayores niveles de productividad y desarrollo integral.
Los apuntes en referencia que se encuentran apegados a la realidad, reflejan por sí mismos que el reclamo de mayor seguridad en el territorio nacional, no se originó en los ámbitos del actual sexenio presidencial, prueba de ello es que tal reclamo lo escucharon todos los candidatos presidenciales, así como aspirantes a diputados y senadores en todo el país, exigencia del electorado que en aquellos días representó, de hecho, una pancarta permanente colocada frente a todo candidato presidencial o con aspiraciones para ingresar al Congreso de la Unión, por lo que no se originó precisamente con especial dedicatoria al actual Presidente de la República, sino que el voto por el cual ahora despacha en Palacio Nacional, ya llevaba implícito el reclamo de mayor eficacia y energía para frenar la violencia y rescatar la tranquilidad del país… Tal es el reclamo nacional que abrió camino institucional a la Cuarta Transformación, exigencia que, por más que se sostenga lo contrario, aún se encuentra en espera de la respuesta apropiada, al tiempo que la inseguridad prosigue ensanchando sus tentáculos en el territorio nacional… ¿O constituye una fantasía la creciente violencia en el país?
LO QUE SE LEE
En las redes de Internet se difunde un mensaje que refiere:
Cuando nadie apueste por ti, hazlo tú mismo.
Cuando nadie crea en ti… Ten confianza en ti mismo.
Y cuando ya no tengas a nadie a quien querer, ámate a ti mismo, porque ante tales circunstancias no necesitas a nadie más… ¿Será?
LO QUE SE VE
Claramente se encuentra confirmado, que el tramo de la autopista entre la región cordobesa y la zona poblana, constituye uno de los que refieren mayor número de hechos delictivos no sólo en contra de unidades del transporte público, sino igualmente se afecta a quienes se trasladan en vehículos particulares, pero lo más angustiante del tema, es que pese a tales escenarios de clara inseguridad, las autoridades responsables de brindar plenas libertades y seguridad a los viajeros, brillan por su notoria ausencia y, así transcurren los días con notables marcos de incertidumbre y angustias en “las flamantes” carreteras de la región poblana y veracruzana.
LO QUE SE OYE
Que la renuncia de Evo Morales como Presidente de Bolivia y su intento para arribar a territorio argentino, refiere que el daño a su prestigio ha trascendido a distintos países incluyendo obviamente a los argentinos, secuencia que originó la posibilidad de que el ahora expresidente pudiera pensar en México como el puerto de salvación, escenario que ya despertó comentarios en pro y en contra sobre tales posibilidades.
Ya se verá de manera inmediata en que termina la historia del episodio en referencia, tema que no deja de originar puntos de vista encontrados en las tierras del Águila y el Nopal, mientras tanto. Al escribir éstas líneas se informa sobre supuestos operativos de la Fuerza Aérea Mexicana para trasladar al depuesto presidente Evo Morales, hacia tierras mexicanas donde aparentemente se le abren las puertas como exiliado… Ya se verá el final de la historia y si los protocolos obligados para el tema se cumplieron tal y como lo marcan las leyes vigentes en el territorio nacional.
Gracias por el favor de su atención.