En Veracruz, las bandas se asesinan
 
De entre las tantas cosas que se han publicado del señor Hugo Gutiérrez Maldonado, flamante secretario de Seguridad Pública en el estado, quien llegó al cargo “palomeado” por el Presidente de la República, hay datos que nos preocuparon desde el momento en que la agencia APRO los hizo públicos, pero hay otros que nos parecen dignos del anecdotario jarocho, de la picardía veracruzana.
 

Un ejemplo es la del doctorado del que presumía Javier Duarte de Ochoa, supuestamente cursado en la Universidad Complutense de Madrid; dicha versión fue desmentida por Jorge Uscanga cuando a un auténtico egresado de esa institución, colaborador suyo en el Subsemun, le pagó los gastos para que fuera a la institución española a revisar el cárdex y como no apareció el nombre de Javier Duarte, pidió una constancia de la inexistencia de los supuestos estudios del ex gobernador, misma que le enviaron firmada por el propio rector.
 
Cosas de la grilla jarocha: nos gobernó realmente un colaborador de Fidel Herrera encargado de hacer la síntesis de prensa, en sus oficinas del Senado de la República.
 
Pues resulta, poniéndonos en la realidad, que el doctorado que presume en la página del Gobierno de Veracruz Hugo Gutiérrez Maldonado, Secretario de Seguridad Pública, no existe en la institución educativa que supuestamente le brindó el título, el Centro de Estudios Superiores en Ciencias Jurídicas y Criminología (Cescijuc), como lo confirmó a APRO una vocera del Centro.
 

“Hugo Gutiérrez Maldonado es egresado de la Facultad de Derecho y Criminología por la Universidad Autónoma de Nuevo León. Cuenta con dos maestrías y un doctorado en el nuevo sistema penal acusatorio”, precisa la presentación en la página oficial del gobierno veracruzano.
 
En su currículum, el titular de la Secretaría de Seguridad precisa que estudió un “doctorado de un año” en el Cescijucl, una institución educativa ubicada en una sórdida calle de Monterrey a la que la SEP le negó en 2008 el Registro de Validez Oficial de Estudios (RVOE).
 
Y en la oferta educativa de la página oficial de dicho centro no existe el Doctorado en el Nuevo Sistema Penal Acusatorio... Pero como dijera el propio presidente de México, eso no importa, lo que cuenta es que tengan un diez por ciento de experiencia y un noventa de honestidad. Que en el caso de don Hugo, mentir no es un acto de honestidad.
 

Y en verdad, no sería preocupante el dato de la mentira sobre el doctorado, si los resultados de su trabajo como encargado de la seguridad de los veracruzanos fuera buena, tuviera los resultados que todos quisiéramos que diera, que los índices de inseguridad, no solo se redujeran, sino que fueran desapareciendo y la sociedad lo sintiera en su día a día, no con las encuestas y muestreos que mandan a hacer, a modo, las propias autoridades para justificar algo que nos está lacerando y, lo peor, que amenaza con el exterminio de los veracruzanos en la medida en que se siga tolerando la presencia de bandas del crimen organizado que actúan con impunidad, lo que se traduce en complicidad.
 
En relación a los constantes crímenes o ejecuciones que se vienen dando sin parar en todo el estado pero en especial en el sur, Hugo Gutiérrez afirma que “el día de ayer ordené que bajara gente de Fuerza Civil, tenemos un grupo especial, ayer llegaron para poder reforzar y no se nos eleven los índices delictivos en Coatzacoalcos.”
 
Quién garantiza que se reduzca la criminalidad con la presencia de los policías del señor de los títulos falsos si ahí han estado todo tipo de grupos del gobierno federal y estatal y es cuando más masacres ha habido.
 

Y luego nos lanza la que ya nos sabemos de memoria desde que el general Valentín Romano, siendo Subsecretario de Seguridad Pública, nos dijo con respecto a los enfrentamientos entre sicarios de las bandas del crimen organizado: “Si se matan entre ellos, que lo hagan, nos importa la seguridad de los veracruzanos” y ¡madres! las críticas no se hicieron esperar.
 
Cómo es posible que un jefe policíaco piense de esa manera aceptando que hay bandas de narco criminales conviviendo con los ciudadanos que habitamos en esta entidad, pacíficos, que pueden ser víctimas colaterales de esos enfrentamientos.
 
Bueno, pues don Hugo es de la misma idea que Valentín Romano, cuando asegura: “Lo que pasa es que son las bandas, tienen sus viejas rencillas, sus ajustes de cuentas y es lo que vamos nosotros a evitar, por eso mandamos a la gente de Fuerza Civil que próximamente estarán viendo patrullar Coatzacoalcos y Minatitlán”.
 

Gutiérrez Maldonado confirmó que los uniformados de la Fuerza Civil que llegaron a Coatzacoalcos vienen del norte del estado, pues aseguró que hay tranquilidad en aquella región (¿de dónde saca eso?). El jefe policíaco aseguró que los elementos pertenecen a un grupo especial que se encarga de enfrentar a los responsables de las ejecuciones.
 
¿Será que en verdad AMLO tomará medidas drásticas en los días por venir para Veracruz?... Ojalá
 
Dante, el veracruzano más político
 

Desde que lo conocí como delegado del INJUVE en la entidad, Dante Delgado Rannauro ya era un político profesional. Tendría 22 años el cordobés nacido en Alvarado, pero ya actuaba como político de grandes vuelos, comprometido con sus paisanos.
 
Dante estuvo un tiempo en la ciudad de México, participando en el gobierno federal, consolidando una amistad que traía con don Fernando Gutiérrez Barrios, en aquel tiempo titular de la Dirección Federal de Seguridad de la Secretaría de Gobernación, a quien visitaba y, sobre todo, con quien conversaba sobre la especialidad de ambos: la política.
 
Dante vino como delegado de la SEP en tiempos de Agustín Acosta Lagunes, luego lo nombró Subsecretario de Gobierno y terminó ese sexenio como presidente del CDE del PRI, cuyo edificio reconstruyó hasta dejarlo como hoy lo conocemos. Y como todos lo sabemos y recordamos, bueno, al menos los que están de cincuenta para arriba, fue el gobernador que más obra pública construyó en solo cuatro años de gobierno, como sustituto de don Fernando Gutiérrez Barrios; en este espacio hemos enumerado algunas de las más importantes obras de ese gobierno, en el que no hubo un solo municipio en el que el gobierno dantista erigiera una obra.
 

Bueno, pues Dante, hoy Senador de la República, rendirá su informe como representante en la más alta tribuna del país el próximo lunes, a las 11:00 horas, en las instalaciones del World Trade Center, que por cierto él construyó en su gobierno, y la invitación tiene una frase muy interesante que dice: “Mi generación le falló a México y no me puedo ir sin contribuir a que esta generación cambie al viejo régimen”.
 
Hay que escucharlo.
 
Los soñadores de izquierda
 

Don José Mujica, ex presidente uruguayo, fue el invitado de honor en el acto del aniversario de AMLO en el poder. Lo vimos ahí sentado junto al hijo menor del presidente con su clásica vestimenta modesta escuchando muy atento el discurso pejista de triunfalismo.
 
Pepe Mujica anduvo en México dando entrevistas a los medios e impartiendo conferencias que suelen ser de gran interés venidas de la mente de un gran líder e ideólogo latinoamericano. El uruguayo, en una de sus conferencias resaltó la importancia de la diversidad como un factor de fortaleza, y no de debilidad, que impulse la formación de un “paraguas de defensa común para defender nuestros intereses. Tenemos que juntarnos como somos. Algunos soñadores de izquierda piensan que tenemos que ser socialistas todos, no, nunca va a haber nada mejor que como estamos, atomizados”.
 
“El punto de convergencia es la “cultura subliminal” que se ha insertado en cada uno de los latinoamericanos como parte de su herencia, y que ayudará a contrarrestar el bombardeo mediático del capitalismo que nos instruye que el tener es ser.
 

“El consumismo no es una deformación secundaria, es una cuestión esencial de esta etapa del capitalismo”.
 
La cultura a la que Mujica hace referencia permitirá a las nuevas generaciones de jóvenes latinoamericanos cambiar sus conductas, como una estrategia para, gradualmente, ir cambiando el mundo.
 
“Esta cultura que tiene olor a comida, a mesa familiar. Es una cultura que no se piensa pero que se siente”.
 

REFLEXIÓN
 
Ante la llegada de puras mujeres al poder, no faltan los políticos que ya planean hacerse la jarocha para acceder a un cargo público en esa nueva faceta tan exitosa en la 4T.
 
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