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Columnas y artículos de opinión
Causas y efectos
El virulento pandemonio
Alfredo Ríos Hernández
23 de junio de 2020
alcalorpolitico.com
*Metanol, en gel antivirus
*IFE: Un pilar democrático
*La preocupante realidad
 
Viernes, sábado y domingo, días de fin de semana que debieron de representar un homenaje para todos los jefes de familia (en el marco de las “festividades” del “Día del padre”) pese a los efectos de aislamiento por la pandemia que no merma en la captura de víctimas, nuestro país, por sobre tales festejos, refirió con escalofriante realidad que paralelamente al avance incontrolado (no incontrolable) del coronavirus que siembra angustia entre la sociedad, la otra rama incontrolada (no incontrolable) que impera en nuestro territorio, identificada como “violencia”, inundó de miedo y preocupación con elevados rangos de angustia y desesperación, al originar hechos altamente violentos en diversos puntos del país, en regiones como Guanajuato, incluyendo la bella zona de San Miguel Allende, Sonora, Sinaloa, Chihuahua, Michoacán, Oaxaca, Estado de México y así, listados frecuentes de hechos recurrentes sobre la superficie de nuestro lastimado territorio nacional.
 

Con el paso de los días y desde años atrás, infinidad de reacciones se encuadran ante los escenarios de ilegalidad, que refieren rangos escalofriantemente violentos, mismo que han dado curso a un claro, notorio y prolongado pandemonio virulento, todo ello pese a las esperanzas anidadas por muchos mexicanos, ante las referencias gubernamentales de una, Transformación, en todos los escenarios de la nación, pero mientras tanto, persisten en su crecimiento hechos que constituyen herencias nefastas desarrolladas desde sexenios atrás, sobre las cuales nada han logrado las ahora autoridades municipales, estatales y, obviamente, las que se encuadran en los marcos de la Federación.
 
Desde antes de los inicios de la actual administración federal e incluso de los hoy gobernadores y alcaldes en funciones, la violencia en México representaba el mayor problema y reto a vencer en tierras mexicanas, herencia que con apego a la legalidad y obviamente a las facultades que nuestra Constitución le confiere al ciudadano, se transformó por urgente necesidad en un reclamo y, al mismo tiempo en un claro y contundente mandato de rangos prioritarios, expuesto y dispuesto por el pueblo de todo México, hacia quien incluso, por tal efervescencia, alcanzó el honor y la clara responsabilidad que se confiere al huésped sexenal del Palacio Nacional de nuestras tierras, el reclamo ciudadano aún sin respuesta, es el de extinguir la virulencia y restaurar la tranquilidad.
 
Y cuando referimos por nuestro rango ciudadano “nuestras tierras”, en los turbulentos tiempos actuales nos viene a la mente que los capos delincuenciales, también externan sobre el mismo espacio “nuestra plaza”, porque en verdad que el país ha sido dividido entre los grupos armados que operan al margen de la Ley con cotos de poder, referencias que con frecuencia, sobrepasando todos los rangos constitucionales, originan violentas confrontaciones entre los unos y los otros, agregando a ello víctimas colaterales, panoramas que por sí mismos dejan en claro (como los del reciente fin de semana) que los organismos oficialmente creados, instruidos y subvencionados por las instituciones gubernamentales, para mantener la legalidad, la paz y el ámbito apropiado en bien del desarrollo y tranquilidad de la colectividad, no reflejan en su actividad avances significativos...
 

En el tema de inseguridad tanto por sus características como por sus dimensiones, se podría repetir la eterna expresión que “Roma y su imperio no se hicieron en un día”, pero en esta tarea y compromiso de reinstaurar la tranquilidad social, la nueva administración transformista tanto federal como veracruzana, ya llevan operando aproximadamente 547 días, son muchos días o, por lo menos suficientes, para que se captaran (por lo menos) indicios de un claro repliegue de grupos armados, aparejado a un consistente y notorio decrecimiento en hechos delictivos de toda índole o, cuando menos en los renglones de levantones, secuestros y asesinatos, que son los de mayores agravios en contra de la población en lo general.
 
En el caso presidencial y de la gubernatura veracruzana, la Cuarta Transformación se encuentra a escasos seis meses de haber transitado por la tercera parte de sus respectivas administraciones sexenales, lo que es notorio y claro que su andar no refiere (por lo menos) el calificativo de una administración de justicia social y penal pronta y expedita, como claramente lo asienta el espíritu de la Constitución, en el que se marcan como objetivos primarios la administración de justicia, en todo nivel de los espacios que conforman la administración pública.
 
Los resúmenes informativos sobre el reciente fin de semana, sangrientos y atemorizantes en amplias regiones del territorio nacional, dejan clara constancia que por el momento en el territorio mexicano, no se ha logrado el objeto primario de todo colectivo social y que constituye compromiso ineludible de las actuales autoridades, el conducirnos hacia un país de próspero y equitativo desarrollo económico y social, enmarcado en ámbitos de tranquilidad y significativo bienestar... Ahí la dejamos.
 

Lo que se lee 
 
Circulan avisos de alerta en redes de internet, en referencia al probable contenido de metanol en cierta marca de gel desinfectante.
 
De acuerdo al equipo de investigadores de FDA, que efectúa evaluaciones sobre la calidad y contenido de productos alimenticios y otros, el gel desinfectante en referencia supuestamente contiene metanol, producto que es absorbido por el organismo y puede originar afectaciones riesgosas para el cuerpo humano.
 

Sobre el tema es realmente emergente que las autoridades de México procedan de inmediato a la suspensión comercial de los productos que refiere el estudio, retirándolos del mercado nacional hasta que se despejen todas las dudas que sobre el caso pudieran existir.
 
Pero a más de ello debería investigarse si tales afectaciones resultan reales y son secuelas perniciosas de dicho producto, el por qué fue autorizada su comercialización sin la constancia claramente certificada por autoridades competentes y si, efectivamente se realizaron los estudios en referencia ¿en dónde radicó el error para aprobar su comercialización?
 
Lo que se ve
 

Que el Presidente Mexicano anunció su decisión de convertirse en guardián de las elecciones, para con ello evitar que se cometan fraudes...
 
Resulta extraño que un Presidente que en el marco de las más severas polémicas se convirtió en candidato a la Presidencia de la República, para posteriormente ganar las elecciones frente a expertos y poderosos partidos políticos, como lo son el PRI y el PAN, ahora refiera o, mejor dicho, deje correr la idea de vigilar las próximas elecciones, “para evitar que se cometan fraudes”, cuando él propio Primer Magistrado del país, tiene claro por experiencia propia que desde hace muchos años, primero el IFE y posteriormente el INE, han sido claros, confiables y sólidos garantes de la legalidad de los comicios y de obviamente de los resultados.
 
Insistido, el propio Presidente actual de los mexicanos es testigo y actor de dichos rangos de apego a la legalidad electoral, luego entonces, su anuncio de intervenir en procesos electorales en su calidad de autoridad suprema de los mexicanos, no dejará de originar inquietudes y preocupaciones entre la sociedad mexicana en lo general, e incluso activará reflectores en ámbitos internacionales... Y yo diría: “¿Pero qué necesidad?
 

Lo que se oye
 
Con el trote diabólico constante del pandémico coronavirus, Veracruz se viene transformando en una de las regiones que encabezan el liderazgo en el país, tanto por el número de contagiados como por lo que representan los porcentajes en comparación con otras entidades del país, referencia negativa que no podemos esquivar ante la implacable realidad, igual que como nos está sucediendo en materia delincuencial y en declives registrados en los ramos productivos.
 
Lo cierto es que el año anterior y el actual no han sido de alcances productivos significativos, al tiempo que se mantuvieron y crecieron problemas de distinta índole, como es el caso de la debacle económica de cañeros, citricultores, ganaderos y cafeticultores, podríamos agregar más, como el renglón pesquero y con toda obviedad el turístico, escenarios que con el arribo del coronavirus a nuestras tierras, se convirtieron de quebrantados en caóticos, apunte que prácticamente ya constituye una sentencia que se escenifica en el año por el que transitamos, al tiempo que se augura mayores escenarios de crisis para tierras de jarochos y de prácticamente todo el país... Decían nuestros ancestros: Dios nos agarre confesados.