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Columnas y artículos de opinión
Causas y efectos
Evitar manipulación legislativa
Alfredo Ríos Hernández
27 de noviembre de 2020
alcalorpolitico.com
*Las palas para un colectivo
*No eliminar, mejor encausar
*10 años para recuperarnos
 
Cimbra al ámbito partidista del Estado de Veracruz, el que un grupo de abogados del municipio orizabeño, refiera la urgencia de que, en los marcos de los procesos electorales, se dictaminen leyes y normatividades, en las que quienes sean propuestos por los partidos políticos para un cargo legislativo, tanto a nivel estatal, como federal, no sean aspirantes ajenos al conocimiento de las leyes que nos rigen y, que de la misma forma, rigen los procedimientos legislativos.
 

Y sobre el tema debemos sostener, que los fines y procesos que enmarcan la existencia de un Congreso, por su propia normatividad, son claramente definidos como un organismo que decide lo que habrá de otorgar vigencia precisamente a normas y ordenamientos, que serán puntualmente los que rigen los destinos de municipios, estados y del propio país, por lo que indudablemente debemos en todo México, retornarle la riqueza intelectual y de valores tanto legales, como sociales y morales, a los integrantes de un organismo que pese a sus dimensiones de supremacía en el sistema político mexicano, es notoriamente endeble en la capacidad y competencia de muchos de sus integrantes, porque simple y sencillamente no tienen ni idea de cuál es su papel, cuáles sus responsabilidades ante el país y, qué se requiere en materia de legislación para lograr una nación donde prive el imperio de la Ley, no sólo de la razón y lo positivo, sino primordialmente de la legalidad.
 
La ignorancia de numerosos legisladores sobre leyes, reglamentos y objetivos fundamentales, sobre cada uno de los sector de la administración pública municipal, estatal y federal, pareciera que en México es una práctica diseñada por los propios grupos de poder, para que las estructuras legislativas sean manipuladas al antojo precisamente de los poderosos, quienes regularmente despachan en los sectores de la administración pública que presiden alcaldes, gobernadores y el mayormente influyente del país, que es el Presidente de la República rodeado de su Gabinete.
 
El término de “se van todos a la cargada” es una permanente realidad en nuestro país, porque tiempo tiene que Don Porfirio Muñoz Ledo, en una de sus etapas como legislador hace ya muchos años, al intervenir frente al entonces Presidente de los Mexicanos, pronunció un discurso histórico en el que en sus inicios refirió con serenidad y energía: “Señor Presidente... Recuerde Usted que juntos, los legisladores de éste Honorable Congreso, somos más que Usted”.
 

Y sobre tal referencia no existe vuelta de hoja, ello lo entienden con toda claridad los gobernadores e incluso los alcaldes, ya no se diga el Presidente de la República, saben que los cuerpos legislativos tienen facultades superiores no sólo para aprobar y ordenar rutas en la aplicación del presupuesto, sino de la misma forma, para decidir en qué se invierte más y en qué se invierte menos por parte del Ejecutivo, e incluso en qué no se invierte y, lo que es más notorio y notable es que los cuerpos legislativos tienen acreditas facultades para que juntos, efectivamente “ser más que los alcaldes, que los gobernadores y que el mismo Presidente de la República”.
 
La real democracia y facultades de los pueblos, más allá de estar en los niveles ejecutivos municipales, estatales o federales, debería palpitar en manos de los congresistas, así las cosas, si “los legisladores son más” que las administraciones municipales, estatales y federales, tal magnitud de responsabilidad no debería recaer en quienes desconocen las leyes y las reglamentaciones gubernamentales, sean estatales o municipales, escenario que obliga para que los legisladores conozcan con claridad las dimensiones de su área de competencia y, al mismo tiempo, las leyes que rigen todos los ámbitos administrativos del país.
 
Por ello la propuesta del grupo de abogados orizabeños debe ser entendida, dimensionada y en todo lo posible aplicada, en tanto que por lo ya expuesto, el desconocimiento de muchos legisladores sobre las leyes, sus alcances y obviamente sus efectos, daña, desdibuja, anula las posibilidades de un Congreso Estatal o Nacional, con neófitos o aprendices de la legalidad, tanto en materia legislativa como en las leyes y disposiciones que rigen al país.
 

¿Por qué se practican tales aberraciones entre los mexicanos?... La respuesta se encuentra “a la vuelta de la esquina”:
 
Porque así ha convenido y sigue siendo conveniente para quienes son depositarios de los poderes ejecutivos, sean municipales, estatales o federales, en donde priva el criterio que más vale tener legisladores desconocedores de la legalidad y de sus claras facultades, que contar con un nido de rebeliones contra la arbitrariedad y el abuso de quienes despachan como gobernantes.
 
Constituye ese marco incuestionablemente que “vale oro” la intención inicial de las organizaciones de abogados, para aplicar programas de capacitación a quienes aspiran o son ya legisladores, mismos que resultarían de mayor valía para la sociedad en lo general, si recibieran cursos de orientación tanto de sus responsabilidades como de sus facultades, todo ello en los marcos de la Constitución y las leyes que nos rigen en lo general... Ya se verá si se avanza, se retrocede o simplemente se estanca una iniciativa de abogados veracruzanos que es sobresaliente notable.
 

 
Lo que se lee
 
Resultado de los tiempos y las circunstancias en los ámbitos de la función pública, es que hoy leemos que en el estado de Sonora, precisamente en el municipio de Guaymas, en el transcurrir de una reunión efectuada con integrantes de organismos civiles en búsqueda de personas desaparecidas, las autoridades municipales les entregaron palas en tono de colaboración, lo que ya realmente resulta asombroso en nuestro territorio, en tanto que los picos y las palas mejor se las deberían de haber entregado a los síndicos y regidores, así como quedarse con una la propia alcaldesa, para que en real gesto de solidaridad, todo el cuerpo edilicio se sumara a las excavaciones en busca de personas desaparecidas, porque en realidad tal tarea corresponde a las autoridades y no a ciudadanos angustiados por la desaparición de seres queridos desaparecidos.
 
De alguna forma debemos de encontrar juntos todos los mexicanos, que escenarios como el referido dejen de repetirse y, sólo sean motivo de sorpresa e indignación entre toda la población que es informada sobre el tema, pero que nada se haga “ni arriba ni abajo” para que, de las ocurrencias nuestras autoridades se trasladen a la realidad y, con ello, a la efectividad, en respuesta a las carencias, angustias y demandas de la población, que incluso carga con el dolor y la terrible angustia de la desaparición de familiares.

 
Lo que se ve
 
Ya creada la Alianza Federalista integrada por diez gobernadores del país (no militantes de MORENA) como uno de sus primeros pasos acuerdan la impugnación (obviamente ante los integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación) del proceso en marcha para desaparecer los más de cien fideicomisos, cuya acción en opinión de la los gobernadores, afectan de manera severa programas de sobresaliente valor social, como son los fideicomisos vinculados con la investigación, la educación, así como la actividad deportiva y el muy delicado renglón de salud pública.
 
El tema es superar en el presente niveles de corrupción del pasado (si es que por ello se cancelaron los programas) pero no desaparecerlos sino por el contrario, fortalecerlos y estimular sus acciones en los marcos de la eficacia y la honorabilidad, como cuando se podan los árboles para limpiarlos, fortalecerlos y aprovecharlos en mejor forma, porque tales fideicomisos en verdad sí los requiere el país y, obviamente, los reclaman los núcleos de población que están siendo afectados por su cancelación.

 
En nuestra opinión yo diría que, transformar no es precisamente eliminar, sino reencausar.
 
Lo que se oye
 
Qué bueno que “El Buen Fin” resultó en éste año en especial un “fin afortunado” para el sector comercial y, como resultado de ello para distribuidores y fabricantes, ello obviamente abonó significativamente ciertos niveles de la recuperación financiera, lo que fortalece en algo a la economía nacional que el año pasado cerró a la baja y en el que está por terminar, cierra con claros efectos de una economía con síntomas pandémicos, pues la reciente recuperación no es lo suficiente como para echar las campanas al vuelo.

 
Mucho esfuerzo de los mexicanos y apropiados programas gubernamentales es lo que se requerirá en el ya cercano 2021, no para avanzar, sino para recuperarnos de lo que en los marcos de la economía nacional hemos perdido... ¿Será verdad que requeriremos de cuando menos ocho o diez años, no para ganar, sino para reponernos de lo ya perdido?...
 
Disfrute Usted de un excelente fin de semana, obviamente respetando la sana distancia.