icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Causas y efectos
Nefasta depredación ecológica
Alfredo Ríos Hernández
11 de enero de 2021
alcalorpolitico.com
*Polémica sobre seguridad
*Las secuelas pandémicas
*Los soplos del nepotismo
 
Una de las mayores aberraciones que impregnan de vergüenza a la historia de las Instituciones Públicas, e incluso de manera directa a la casi totalidad de gobernadores veracruzanos, agregando a ello Presidentes de la República, que se han desempeñado en el siglo pasado y en lo que va del presente, es la depredación forestal de gigantescas áreas boscosas de diversas regiones veracruzanas, tal como se ha registrado en muchos espacios del país, pero de manera singular en tierras veracruzanas, en donde como resultado del crecimiento de la mancha urbana y empresarial, así como la ampliación de zonas agrícolas e industriales, agregando la escandalosa e irracional explotación de árboles maderables, escenarios como las faldas y entornos de las áreas montañosas como el Pico de Orizaba, el Cofre de Perote, la Sierra del Totonacapan, los amplios espacios de La Huasteca Veracruzana y el sur de la Entidad, como la región de San Andrés Tuxtla, regiones que han sido objeto del negocio inmoderado antiecológico y atentatorio para toda clase de vida (incluyendo la del ser humano) que ha originado paralelamente a la industrialización sin apropiados controles de protección ambiental, el dramático curso hacia la degradación de la calidad no sólo de nuestro hábitat, sino de toda clase de vida alterando el natural proceso biológico de todo nuestro entorno, lo que nos está colocando frente al trágico riesgo de nuestra propia subsistencia.
 

Entre la contaminación derivada de la industrialización, así como el uso cotidiano de hidrocarburos y el inapropiado manejo de los desechos urbanos, paralelamente a la deforestación, ya no sólo irracional sino criminal, el clima se altera, el oxígeno pierde calidad, los mantos acuíferos decrecen, el agua disponible para el consumo humano disminuye, los cultivos alteran la calidad de sus frutos y, todo ello representa el probable inicio de presagios apocalípticos (sin exagerar en el tema) porque desde años atrás, científicamente está demostrado que como resultado de la contaminación, originada no sólo por el uso de productos nocivos para el medio ambiente y para el consumo humano, sino en gran medida por la depredación de bosques y contaminación con desechos humanos e industriales de mantos acuíferos, ríos, lagunas, arroyos y mares, todo ése cúmulo de irregularidades tendrá como resultado (y sus inicios ya se advierten) que la humanidad sea agredida no sólo por pandemias insospechadas, sino por el dramático y mortal medio ambiente contaminado con efectos degradantes, e incluso mortales para todos los pueblos del mundo, iniciando por inmoderados y peligrosos cambios climáticos que también ya inician su dañina presencia en diversas regiones del orbe.
 
Pero nadie, ni la publicitada “Cuarta Transformación” está logrando que el Pico de Orizaba se aleje del escenario dantesco de la deforestación, de hecho prácticamente nada se ha logrado con claridad para rescatar en su totalidad y plenitud (como debería de ser) una de las que fueron riquezas forestales sin par en tierras nacionales, tanto así es el daño que el clima ha cambiado radicalmente en ésta región que abarca tanto al Estado de Veracruz, como a los de Puebla, Tlaxcala e incluso Oaxaca, todos ellos hoy son directamente afectados climáticamente por la deforestación en la gigantesca montaña.
 
Debido a la deforestación que en parte es origen del cambio climático, las benéficas lluvias y el agua potable, ya dejan sentir sus limitantes y a su vez alteraciones dramáticamente destructivas en toda la región central veracruzana, incluyendo al mismo Puerto de Veracruz, en donde la amenaza de prolongada sequía y a la vez de tormentas severas, son efectos de que se han alterado los equilibrios ecológicos marcados por la propia naturaleza, porque con nuestra indolente capacidad depredadora, hemos convertido en tablas y leña, nuestros propios generadores de oxígeno y del vital líquido, paralelamente a que incrementamos la furia de la naturaleza con tormentas destructivas o agobiantes sequías, que no son sino el resultado de nuestros propios excesos.
 

Figuras del periodismo veracruzano como Don Rubén Pabello Acosta, combatieron toda su vida la irresponsable y depredadora actividad maderera ejecutada irracionalmente, incluso hasta la extinción de áreas boscosas en regiones como el Cofre de Perote, el Pico de Orizaba, la zona del Totonacapan o de la sierra Huasteca y las áreas sureñas, al igual que reaccionaba enérgico el combativo periodista ante la contaminación de los arroyos, los ríos, las lagunas y las aguas del mar, él, Don Rubén Pabello Acosta, sembró en el periodismo veracruzano la semilla de la defensa al medio ambiente, fue el pionero en esa compleja e incomprendida ruta, que dejó como herencia en la actividad periodística la lucha de los reporteros vía prensa, radio y televisión, para denunciar y evitar en todo lo posible la deforestación de montañas y bosques en tierras veracruzanas, hoy no tengo del todo claro si nosotros los “tunde teclas” que en todo o en parte nos forjamos a su lado, le estamos fallando en esa defensa ecológica, o simplemente la ineficacia gubernamental en tal rubro, sobrepasa la fuerza del reclamo que, en los medios de comunicación se difunden para salvaguardar los espacios generadores de vida, tal como lo son las áreas boscosas, los ríos, arroyos, lagunas, mantos acuíferos y mares.
 
Actualmente ya se habla del nuevo programa federal “Sembrando Vida”, pero paralelamente a ello y tal como se advierte en la realidad, en las faldas del Pico de Orizaba, al igual que en las montañas zongoliqueñas y las áreas ya citadas líneas arriba ubicadas al norte y sur de la Entidad, la depredación forestal continúa refiriendo una práctica cotidiana.
 
Prensa, Radio, Televisión y Medios Impresos siguen denunciando la barbarie de arrojar negrura a las aguas veracruzanas, incluyendo a las del Golfo de México, pero dado que defender al ecosistema genera más fricciones que reconocimientos, nuestros políticos se convierten en funcionarios de “la vista gorda” o, simplemente, como decía Don Rubén Pabello Acosta: “Están económica y políticamente coludidos con los depredadores de la ecología”... ¿Hasta cuándo?
 

Lo que se lee
 
Ahora se sostiene en los ámbitos fiscales de la Ciudad de México, que se “han detenido 209 objetivos primordiales del crimen organizado”, discurso claramente optimista que pareciera “contagiar de positivismo” a todas las fiscalías del país, percepción o evaluación (como usted guste calificarla) que no coincide definitivamente con la sensación de inseguridad que priva en el colectivo social, así como en amplios núcleos de especialistas en la materia, quienes tanto en el centro del país como en la provincia en lo general, sostienen opiniones diferentes y obviamente con rangos de preocupación...
 
¿Y por qué los rangos de preocupación?... La respuesta es simple y está cimentada en que, si en México sigue privando la sensación de notoria inseguridad, como resultado tanto de los actos delictivos comunes como vinculados con grupos violentos, al tiempo que en sistemas gubernamentales se sostiene que hemos logrado “avances en renglones de menor actividad delictiva”, surge la sensación ciudadana de que en los ámbitos gubernamentales, no se tienen con claridad las dimensiones que han alcanzado los ámbitos delictivos, hechos que se encuentran claramente detectados por la sociedad en todas las vecindades y fraccionamientos, que incluso están registrados y difundidos en los medios de comunicación...
 

Tiempo es que, en los espacios de la administración pública, exista un discurso en materia de seguridad que se encuentre acorde con la realidad que se percibe en el núcleo social, porque tales coincidencias en base a la realidad, permitirán mayor coincidencia y esfuerzos mutuos entre la sociedad y los sectores gubernamentales, lo contrario es acrecentar distanciamientos que sólo generan estancamientos socioeconómicos.
 
Lo que se ve
 
Expertos asiáticos en el renglón de salud, han detectado que un promedio superior al 75 por ciento, de quienes fueron pacientes afectados por el Covid-19 y lograron ser “dados de alta”, siguen registrando algunos de los síntomas pandémicos, incluso después de seis meses de haber “superado” en los centros hospitalarios el peligroso coronavirus.
 

Entre dichos efectos registrados por la ciencia médica china, se encuentra que un 76 por ciento sigue registrando la sensación de fatiga, así como diversos niveles de insomnio, ansiedad, depresión e incluso función pulmonar no del todo al cien por ciento, sino con ciertos rangos de disminución.
 
Cabe referir que médicos chinos continúan otorgando seguimiento a los “ex pacientes”, los cuales en un nivel del 76 por ciento han registrado efectos leves, calificando a los síntomas de fatiga y debilidad muscular, como las más frecuentes secuelas del padecimiento, después de haber sido dados de alta.
 
Se confía en que tales estudios, permitan otorgar mejorías a quienes superaron la contaminación del coronavirus en referencia.
 

Lo que se oye
 
No todos los ciudadanos están de acuerdo en que un hermano de un funcionario público emergido de elección popular, sea relevado en el cargo por un familiar del funcionario saliente, hechos que se pretenden escenificar en el municipio de Córdoba, cuna de la independencia de México y que, por tales características debería proyectar una imagen de, no sólo la no reelección en la Presidencia Municipal, sino también ser ajenos a la conformación de grupos de poder familiar, en los que la silla de la Presidencia Municipal sea entregada de un hermano a otro, con todo y que nada lo prohíbe en los marcos de las leyes, pero sí en los rangos de la salud socio-política sobre la cual, se debe forjar invariablemente un criterio de sobriedad y conductas que erradiquen todo rango de posible nepotismo, aún el respaldo por el elector, dado que éste puede ser influido por el pariente en el poder.
 
Es indudable que moralmente el concepto de la no reelección, de alguna forma se lastima cuando se utiliza la posición y fama de un familiar, para favorecer el arribo al mismo escenario del poder, de un consanguíneo directo, como lo es el de un padre con su hijo o de un hermana con su hermano, lazo sanguíneo que de alguna forma, en tales escenarios, bien podría estar salpicando de irregularidad a un proceso electoral, que al final del día también refiere soplos innegables de antidemocracia, ente lo factible del nepotismo... Ya veremos.