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Columnas y artículos de opinión
Apuntes
El dilema de Ahued
Manuel Rosete Chávez
3 de marzo de 2021
alcalorpolitico.com
“¿Embajada de Cuba en Veracruz,
que no es Consulado, señor?”

Yo
 
El dilema de Ahued
 
Todo le había salido bien en la vida. Heredó un modesto negocio de venta de artículos de porcelana, lámina y plástico que su señor padre creó e hizo crecer gracias a su gran esfuerzo y al trabajo compartido de la familia, entre ellos Ricardito, el más acomedido de los hermanos.

 
Formales, serios, cumplidos, pero sobre todo muy trabajadores los Ahued se fueron consolidando en Xalapa pequeñas empresas como los Kai, los León, no se diga los Fernández, y los Fong Wong, árabes, chinos y de otras nacionalidades que encontraron en la capital del estado un lugar para trabajar y prosperar porque el espacio era el ideal: no había autoridades ladronas ni en el estado y menos en el municipio, los habitantes éramos muy hospitalarios, no existían las bandas de la delincuencia organizada que cobraran derecho de piso y menos autoridades a las que se les fuera ocurriendo aplicar impuestos por cualquier cosa, éramos por nuestro ADN muy honestos todos.
 
Con mucho esfuerzo y trabajo los Ahued lograron crecer hasta abrir una tienda en la esquina de Juárez y Lucio y... vino la invitación de Reynaldo Escobar Pérez a Ricardo para que lo acompañara los fines de semana. Reynaldo como presidente municipal atendía a sus gobernados en las colonias y Ricardo, o Don Ricardo como le dice la gente que depende de él, que lo conocen por respetuoso que es, o los más fregados, repartía los saldos de mercancía que en sus tiendas se quedaban. La visión de lanzarlo como candidato a Alcalde fue de Reynaldo, no como equivocadamente se ha dicho que fue Fidel Herrera Beltrán, el Tío hacía en Xalapa lo que Reynaldo le recomendaba.
 
Total que Ahued con el respaldo de las siglas del PRI y el apoyo de la llamada “Fidelidad” salió como candidato y arrasó en las urnas, se convirtió en Presidente Municipal de Xalapa. Un comerciante de plásticos y artículos de porcelana, sin un respaldo académico de nada, con la visión de Reynaldo Escobar y el apoyo político de Fidel Herrera, quien vio en el descendiente de árabes un gran negocio, lo convirtió en Presidente Municipal de Xalapa. De inmediato creó y se hizo dueño de una comercializadora que montó en la ciudad de Puebla, a través de la cual él y sus socios surtieron todas las necesidades del municipio durante su administración: millones y millones de pesos de utilidad para los socios amigos de Ricardo Ahued y, obviamente para él mismo.

 
El crecimiento político y económico del señor fue meteórico. Los negocios que hizo con el DIF le redituaron mucho dinero de ingreso, tanto que se comenta que todos los artículos que el DIF obsequió a lo largo del sexenio de Fidel, pasaron por el negocio de Ahued, es decir miles de millones de pesos que facturó el DIF durante el sexenio de Fidel Herrera de artículos que fueron regalados a lo largo y ancho del estado, salían de las bodegas del próspero comerciante a quien le dieron una diputación local y una federal, y cuando exigió escaño en el Senado y un favor en el SAT, lo mandaron a la goma por insaciable, por lo que buscó refugio en Morena donde no le fue nada mal.
 
Los ingenuos morenos convirtieron al comerciante de plásticos, lámina y porcelana, en Senador de la República comiéndose el cuento de que Ricardo en las urnas era invencible, por lo que le vieron cara de candidato a gobernador, con lo que comenzaron sus problemas.
 
En el Senado no hizo nada que no fuera en favor de su jefe El Peje, de ahí saltó a la Dirección General de Aduanas del SAT, en sustitución de Ricardo Peralta. En ese cargo se mantuvo unos meses y fue retirado por razones que aún se desconocen, lo cierto es que regresó a su escaño en el Senado de donde acaba de ser retirado para que compita en Xalapa por la presidencia municipal porque los morenos locales son incapaces de ganar, y piensan que Ahued viene, la gana y se va para que ocupe la alcaldía quien quieran.

 
Su problema real es que siente que puede ser candidato a la gubernatura del estado por Morena, partido en el que lo consideran un arribista, oportunista y ladino. Y si lo anterior fuera poco, se está enfrentando a la Secretaria de Energía, Rocío Nahle, aspirante natural a la gubernatura, quien además cuenta con el apoyo de todo el gabinete de segunda que gobierna Veracruz.
 
El dilema de Ricardo Ahued en este momento es: si no me quieren en Morena qué madre hago aquí, me van a tender la cama para perder la presidencia municipal y con ello mi capital político. Lo otro es: ante tanto daño que han causado entre los xalapeños el gabinete estatal de Cuitláhuac García y sus contlapaches, más lo que ha aportado en contra de Morena o la 4T el alcalde Hipólito Rodríguez, quién puede ganar la elección si no es Superman. De plano estamos perdidos, mejor me rajo y a la goma todos, busco a Dante Delgado y a ver si me recibe en su partido, toneladas de productos chinos se las podemos regalar para que se ayude y yo a ver qué pesco, total el popular “Coño loco” ya está alineado conmigo... Nos pos sí.
 
De Templo Mayor

 
Alguien debería explicarle al presidente que construir un aeropuerto es un poquito más complicado que armar un Lego. Y es que, según él, hoy se va a “inaugurar” la primera etapa de Santa Lucía, lo cual, paradójicamente, es una volada. De acuerdo con lo que dijo Andrés Manuel López Obrador, para conmemorar el Día de la Fuerza Aérea, en las nuevas pistas comenzarán a registrarse aterrizajes y despegues de aeronaves militares... ¡y comerciales! Por lo visto, al mandatario no le han informado bien cómo está la cosa. Para empezar, lo que ya se construyó son las nuevas instalaciones físicas de la base militar. Pero, sobre todo, no es posible que realicen operaciones aviones comerciales dado que el futuro aeropuerto “Felipe Ángeles” todavía no cuenta con su PIA, que en pocas palabras es el manual de procedimientos seguros para aterrizar y despegar. Y para que eso suceda, primero lo tiene que autorizar la Agencia Federal de Aviación Civil, un proceso que todavía ni toma pista. Pero, bueno, ya se sabe que eso de tener estudios, permisos y fundamentos es peccata minuta para el gobierno, por lo que harán aterrizar los aviones nomás para la foto.
 
REFLEXIÓN
 
Ya ni la friegan los colaboradores cercanos al gobernador, saben que hay cosas que el jefe ignora (todas) y lo dejan que se vaya solito en vez de orientarlo. Si les está pagando un dineral por lo que considera “sus servicios” cuando menos ayúdenlo. Ese publirrelacionista pasó de noche por la Universidad de Carlos García.

 
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