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Columnas y artículos de opinión
Un vacío al Presidente
Luciano Blanco González
25 de junio de 2021
alcalorpolitico.com
El Presidente Andrés Manuel López Obrador, nos convenció a todos los mexicanos de la necesidad de un cambio en la administración pública, mostrándonos una estela de corrupción y de impunidad que en lo general cubría a todas las administraciones anteriores incluyendo en aquel momento la de Enrique Peña Nieto.
 
Nos mostró cómo una mafia en el poder, encabezada por Carlos Salinas de Gortari, había saqueado a la nación y había enajenado en su provecho los bienes públicos, venteó la inmoralidad de Ernesto Zedillo al enajenar a una compañía extranjera los ferrocarriles nacionales para después ser uno de los consejeros de esa compañía y cómo convirtió la deuda privada en deuda pública que pagamos todos los mexicanos.
 
Así barrió con Vicente Fox y las fortunas mal habidas de sus entonados, se siguió con Felipe Calderón y las masacres, la autorización para introducir miles de armas desde los Estados Unidos, mediante el plan de Rápido y Furioso y el dispendio con el gasto innecesario en un lujoso avión que no tenía ni Obama, nos restregó la casita blanca de don Enrique y los trastupijes de sus colaboradores con ilícitos negocios millonarios como el de la compañía Brasileña Odebrecht, la compra de plantas chatarra a precios elevadísimos y los negocios en la trama fraudulenta de la estafa maestra.
 

Todo ello dijo que se desarrollaba en medio de un inmundo maridaje entre dos partidos que se intercambiaban el chicle para seguir masticando el jugoso tesoro público, señalando la necesidad de remplazarlos, incitando a los miembros de estos partidos a sumarse a su causa con la seguridad de que él no iba a barrer para atrás y se iba a dedicar a abatir los problemas como el de la seguridad pública y la violencia.
 
Con sus banderas a vuelo despertó un entusiasmo inédito entre la población que con su voto se entregó con esperanza al llamado del líder, seguros de que se iba a escribir una nueva historia, entregándole también el control mayoritario del Congreso de la Unión que le permite promover todo tipo de reformas legales y a la Constitución Política que nos rige.
 
Han transcurrido casi 30 meses de gobierno y gran parte de aquel optimismo se ha convertido en escepticismo, pues se han presentado casos en los que la Fiscalía, supuestamente autónoma, ha tenido en su poder elementos suficientes para procesar y detener a connotados corruptos como los involucrados en el caso Odebrecht y nada ha pasado, los peces gordos nadan tranquilamente en sus piscinas palaciegas, como si no fueran responsables de nada, sabiéndose impunes y protegidos, cuando menos eso es lo que piensa maliciosamente el pueblo.
 

Muchos juicios y aprehensiones sin sustento probatorio que obliga a los jueces a ponerlos en libertad, muchas reformas buenas y benéficas para el pueblo y para la nación, pero sin base constitucional y a veces anticonstitucionales que motivan a la Suprema Corte a su anulación en aparente contradicción a los deseos del Ejecutivo.
 
Por eso ahora que cobra vida la llamada consulta para encarcelar a los expresidentes y que realmente, conforme al texto aprobado por La Suprema Corte, es para “esclarecer las decisiones políticas tomadas en los años pasados por los actores políticos, encaminado a garantizar la justicia y los derechos de las posibles víctimas”
 
Ojo, no es para enjuiciarlos judicialmente, no es para llevarlos a los tribunales penales, ello no es necesario, pues la ley le da facultades amplias y suficientes para someter a proceso a cualquier individuo, pero en el caso de los expresidentes que solo podían ser juzgados por traición a la patria, no aplica, porque el término traición no se definió nunca en la Constitución.
 

Esta consulta Popular, en efecto será un gran ejercicio democrático, pero de antemano se puede prever que será un rotundo fracaso, porque ya a estas alturas el ánimo popular sobre el tema está aguado, esta decaído y la asistencia mínima de aquel pueblo que se desbordó en las urnas, el fracaso de la consulta sólo exhibirá al partido oficial por su falta de simpatía y de capacidad para operar.
 
Nada más materialicemos el proceso a partir del hecho de que no fueron capaces de recopilar las firmas para solicitarla y tuvo que entrar el senado para formalizar el procedimiento ante la Suprema Corte, que para su mala suerte les cambió la jugada, variando el texto, sigamos evaluando a partir de la pasada elección en que la coalición integrada por el Partido Morena, Partido del Trabajo y Partido Verde, solos y en conjunto sólo lograron obtener cerca de 21 millones de votos y la cantidad que deben de obtener es un mínimo de 36 millones para lograr vincularlos al proceso político que se pretende.
 
Ahora imaginemos que las demás fuerzas políticas independientes y partidistas se coaliguen para hacerle un vacío al Presidente y que para ello inciten a sus miembros para que no asistan a las casillas y que no se presten al juego, tendremos una consulta pobrísima en resultados que exhibirá la debilidad operativa del aparato del Estado, sus partidos y sus aliados.
 

El Presidente que siempre ve adelante, seguramente percatado de esta circunstancia, tocó como uno de los temas en la reunión de gobernadores celebrada ayer este tema, invitando a los electos a que participen movilizando a la gente, pues no es momento para exhibirse.
 
Así debió de haber sido la comida protocolaria, porque a tres años de la elección presidencial el mandatario evalúa que la situación para reafirmar la permanencia de la cuarta transformación en el Palacio Nacional no es muy halagadora, en número de votos la coalición que obtuvo cerca de 21 millones, apenas rebasa por 2 millones a los votos de la Alianza y el Movimiento Ciudadano solo, casi la cuarta parte y hablamos solo de la elección federal.
 
Lo más peligroso es que en lo municipal perdió en los estados en que existe el mayor número de electores, es decir lo que en el medio se llama reserva electoral, como la Ciudad de México, el Estado de México, Jalisco y para orgullo nuestro Veracruz es el Estado que mayor respaldo le dio y el que más diputados le aporta.
 

Para las grandes reformas, también la Cámara en varios temas le jugará contras, inclusive sus propios aliados como en el tema ya comentado de la desaparición de los diputados plurinominales, en que, si lo quiere hacer de un solo golpe, exhibirá la clase de aliados con los que cuenta y que de ninguna manera renunciarán a la cueva y sustento de las mafias partidistas que se refugian en la boleta anónima de los plurinominales para subsistir. Para salir adelante debe de proponerlo en una reforma aplicable paulatinamente hasta completar 100, que es lo máximo a lo que accederían y realizable en 4 periodos, es decir 25 en cada uno.
 
Y ya que hablamos de la importancia política que ha adquirido nuestro Estado al convertirse en la más importante reserva electoral por los triunfos obtenidos por el partido oficial, resaltemos el manifiesto interés del Presidente por estar cerca de nosotros y del Gobernador Cuitlahuac García, siempre adquiriendo compromisos y apoyando los problemas sanitarios con el envío y aplicación masiva de vacunas en todo el territorio, así como inversión pública y privada en la infraestructura del sur de Veracruz y en el norte reparación de carreteras, conclusión de la autopista que nos traerá inversión, comercio, empleos y bienestar.
 
Los problemas que se presentan se van resolviendo, inclusive el de seguridad poco a poco se va atenuando, importantes zonas del Estado se han rescatado de la delincuencia y ahora, aunque alertas, respiran un poco más de tranquilidad.
 

En fin, ahora que se aproxima la renovación del Rector de nuestra máxima casa de estudios, nuestra alma mater, es justo reconocer la gran obra que ha hecho la doctora Sara Ladrón de Guevara para colocarla entre las mejores del país, Sara realizó un buen trabajo, logró la armonía y el trabajo de toda la comunidad universitaria, resolvió todos los problemas y lo insólito no enfrentó huelgas y en el paro obligado de actividades por la pandemia se fortaleció la educación vía enseñanza virtual, cuyos frutos están a la vista, es de las pocas instituciones que no presentan rezago educativo ni quiebra económica, esto último gracias al apoyo del Gobernador, que sacrificando otras áreas menos importantes liberó de la pesada carga fiscal que por años se tenía con la Secretaria de Hacienda, pagando el total de la deuda.
 
A los veracruzanos que nos gusta ser vistos y escuchados, estrechar la mano de nuestros funcionarios, saber que son parte de lo que tanto amamos como es la universidad, si nos gustaría que la Junta de Gobierno no nos ponga al frente gente alzada, cuya vida se ha desarrollado en los claustros, encerrados en el cubículo pero no conocen a los académicos, a los investigadores, a los maestros, a los alumnos y mucho menos a los modestos trabajadores manuales.
 
Por ello sería bueno que la Junta en este tema escuchara al Presidente y aparte de los grados ecdémicos elija a una persona accesible y tome muy en cuenta lo que dice el Primer Mandatario y no elija uno de esos. “Los que consideran que tener maestrías, doctorados, es como tener títulos de nobleza, que los hay, que se creen superiores”, si no uno que venga a elevar el espíritu y el orgullo de ser parte de la comunidad de la Universidad Veracruzana.- Por el bien de la causa.