icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Causas y efectos
Vacuna: Reclamo infantil
Alfredo Ríos Hernández
11 de octubre de 2021
alcalorpolitico.com
*Escuelas vandalizadas
*Chascarrillo inapropiado
*La envidiable Orizaba
 
Les asiste toda la razón a los reconocidos médicos veracruzanos, quienes sostienen, al igual que ahora lo hace el titular de la Secretaría de Salud en tierras jarochas: Roberto Ramos, quien refirió que “como pediatra soy el primero en levantar la mano” lo que por simple obviedad hace reflexionar, que el funcionario en referencia ya recibió línea proveniente de la cúpula gubernamental, en la que despacha el Gobernador Cuitláhuac García Jiménez, para que iniciara (pero de ya) referencias públicas al respecto, como vía para tranquilizar a diversos sectores del colectivo social jarocho, en los que se ha dejado sentir reflejos de disgusto por la “resistencia del sector oficial” para dotar de vacuna a los menos de edad.
 

Y es que desde el inicio de la pandemia se pretendió encubrir que los niños de corta edad también corrían elevado peligro, ello como una medida política que frenara el oleaje “no pandémico” sino de aguda presión social, para que los chamacos fueran protegidos vacunándolos contra los embates de la pandemia...
 
Es más, toda la sociedad puede dar fe que en el renglón de atención médica, la mayor deficiencia y resistencia gubernamental en materia de salud pública, se ha reflejado en la atención inapropiada hacia el sector infantil, los lamentables hechos de no adquirir los medicamentos (en tiempo y forma, así como con rangos de urgencia) insustituibles para los niños agredidos por el cáncer, lo que disparó la indignación y furia en amplios sectores de la población del país, constituye un ineludible escenario ya inscrito en la historia, referencia indicadora que en materia de salud pública “las cosas en Palacio van despacio”.
 
En tiempos actuales, y ya de manera formal involucrado el sector infantil en el tema de la pandemia, se hace necesario reconocer que, tanto por la generación de amparos que ordenan el que se vacune a menores de edad, así como reclamos al interior del contexto social exigiendo la vacuna, pareciera que, tanto quienes primero reclamaron tal derecho, por su condiciones de salud, al igual que niños en lo general sin dichos problemas, ya son referidos sobre la posibilidad “muy próxima” de ser invitados (primeramente a quienes padecen de problemas crónicos de salud) para una etapa infantil de vacunación, que abarcará con el paso de los días a todos los niños de Veracruz y obviamente de México.
 

Fanfarreas por tales versiones... Sin excluir que indudablemente vale el referir: “Que siempre más vale tarde que nunca”.
 
Lo que se lee
 
Se informa oficialmente que habrá inversiones superiores a los 200 millones de pesos, para la restauración de planteles dañados tanto por actos de vandalismo, como por el obvio descuido de las autoridades municipales, estatales y federales, dado que los centros escolares nunca debieron quedar en el abandono, mucho menos tolerando que tales instalaciones se convirtieran en escenarios y cuevas de malvivientes, porque precisamente tal descuido propició que las aulas fueran severamente dañadas incluyendo los espacios sanitarios.
 

Nunca en todo el pasado de las actuales generaciones de mexicanos, se había registrado en nuestro país afectaciones en instalaciones escolares como las ahora difundidas, lo que bien pudo haber sido evitado si autoridades federales, estatales y municipales, no hubieran cometido el pecado del desinterés que se apareja con el de la ineficacia.
 
Lo que se ve
 
Como incorrecto e inapropiado se deben calificar las opiniones (en voz de elevados funcionarios públicos) en las cuales se externa que “todas las vacunas contra el Covid-19 son iguales”... Como si lo mismo fuera “Chana que Juana”, porque bien se podría decir que han sido elaboradas con la idea de combatir el mismo coronavirus, pero de ninguna manera “son iguales” e incluso algunas de ellas son bastante distintas a otras, por lo que deben ser considerados como productos que persiguen el mismo objetivo, que es reducir los efectos mortales del Covid-19, pero fueron desarrollados de manera diferente y obviamente “lo distinto una de la otra marca la diferencia”.
 

Es apropiado defender el que las vacunas indistintamente a su contenido, persigue la misma finalidad que es evitar que el contagio resulte mortal, en tanto que con ellas se buscan los mismos fines, pero de ninguna manera una vacuna es igual a las otras, ni en su proceso de elaboración, ni en su contenido e incluso, no se tiene claro la durabilidad de los efectos de cada una de ellas.
 
En la función púbica debemos hablar con la verdad y evitar el uso de “chascarrillos” cuando de por medio se encuentra la salud y la vida de los mexicanos, pero sobre todo ante la presencia de escenarios, en los cuales se ha perdido la vida de millones de seres humanos en todo el mundo... Más correcto es la discreción luctuosa en esos entornos que los brotes de chascarrillos.
 
Lo que se oye
 

Que orgullo debe ser para el nuevamente próximo alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Francos, el que la sociedad orizabeña muestre su satisfacción incluso con reconocimientos hacia el hoy nuevamente alcalde electo, ratificado por autoridades de todos los niveles, incluyendo el reciente fallo en tribunales, en el que se le acredita sin culpa alguna de actos ilegales en campaña y, mucho menos de manejos turbios el día de la elección.
 
Está claro para la mayoría de los orizabeños, que el esplendor de “La Ciudad de las Aguas Alegres” sin lugar a dudas, habrá de registrar otra etapa de firme impulso hacia el desarrollo integral municipal, lo que se ya se ha convertido en una excelente tradición en favor de la colectividad, tiempos que refieren avances urbanos y logros con los cuales se amplía el bienestar de los habitantes, tendencia exitosa para beneficio de los orizabeños, que se ha convertido en una prolongada cadena de aciertos... Orizaba hoy es una ciudad envidiable.