Este año ya acabó para el gobierno en lo que respecta a lo administrativo y a la Gobernadora solo le resta rendir cuentas en su informe y desear que no ocurra otra desgracia. ¿Qué te pareció, lector, este primer año de gobierno de Rocío Nahle? No son pocas las voces que señalan que ha quedado a deber.
No hubo una obra importante, no arrancó un proyecto trascendental y para el próximo año la situación podría estar igual.
La tragedia del norte del Estado, por las torrenciales lluvias del mes pasado, sacuden y seguirán sacudiendo las finanzas gubernamentales.
Si bien es cierto que la Federación ha estado apoyando, no absorberá todo. Son necesarios miles de millones de pesos para la reconstrucción, para la reubicación de familias, construcción de casas, realización de obras, apoyo a campesinos que perdieron cultivos en miles de hectáreas, respaldo a ganaderos y reconstrucción de carreteras, puentes y caminos, entre otras cuestiones.
Así que obras que el gobierno tenía consideradas realizar o empezar a construirlas en 2026, en otras regiones, lo más probable es que sean aplazadas o de plano no sean concretadas.
Decíamos que terminó ya este año para el gobierno y restan el informe de la Gobernadora y la comparecencia de funcionarios.

En ese sentido será interesante lo que informe la Gobernadora y después diga en su comparecencia, el 20 de noviembre, el secretario de Seguridad Pública, Alfonso Reyes Garcés, sobre la inseguridad. Prácticamente no hay día en el que no haya hechos delictivos de impacto. Ayer, por ejemplo, fue hallado, degollado, el exalcalde de Chinameca, Lázaro Francisco Luria. Lo habían secuestrado y su cadáver fue arrojado en un predio de Oteapan.

En Tantoyuca fue asesinado a balazos el profesor Marcelo Hernández luego de abrir el portón de su casa. En la noche del miércoles fue tiroteada la casa del empresario Sergio Martínez, en Acayucan, lugar en donde la delincuencia manda. Por la mañana de ayer, en Poza Rica, hubo el reporte de que pretendieron secuestrar a 2 policías tras concluir su turno y salir de su comandancia.
En Xalapa fue realizada una protesta, en la plaza Lerdo, porque desde el 29 de octubre está desaparecido el joven Jorge Ramón, quien fue visto por última vez en la Plaza Urban Center. El médico Marcos de Castro está desaparecido en Catemaco. Sus familiares denuncian que lo secuestraron en Sontecomapan.
Y ayer, frente a la Fiscalía General del Estado, familiares de Gerson Castro, quien murió en diciembre de 2020, presuntamente asesinado por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, protestaron porque acusan que la Fiscalía no avanza en las investigaciones. También protestaron familiares de Gustavo Ortiz, asesinado presuntamente por policías estatales en octubre de 2020. Aseguran que recibió una golpiza en el Cuartel San José.
Así transcurren las semanas en Veracruz, con asesinatos, secuestros y extorsiones en el norte, centro y sur del Estado.

Por otra parte, 2026 será el año de empezar la reconstrucción en el norte y atender otros asuntos considerados de importancia. Será parecido al actual, es decir, sin acciones de gobierno que impacten y habrá transcurrido un tercio de esta administración.
Sería conveniente que Rocío Nahle le dedique más tiempo a la planeación, a pensar con detenimiento qué es lo que puede hacer con los recursos a su disposición, porque de lo contrario, en un abrir y cerrar de ojos, habrá llegado a la mitad de su gobierno y después deberá dedicarle mucho tiempo a la política y al cierre.
Y no sea que cuando ya esté en esa etapa, hasta en su propia evaluación resulte reprobada y tenga que pasársela justificando con datos irreales, resultados de fantasía y echándoles culpas al pasado.