Este mes de febrero tenemos el inicio y celebración de dos cuaresmas: la cuaresma litúrgica y la cuaresma electoral.

 

La primera inicia este miércoles, la segunda inicio una semana antes, también en miércoles.

 

En la cuaresma litúrgica se invita al recogimiento, la abstinencia o a practicar alguna privación voluntaria. En la cuaresma electoral al IFE obliga a los aspirantes y partidos políticos a: No hacer proselitismo, ni contratar publicidad, ni usar los tiempos de gobierno… pero el proceso electoral no se detiene, según lo decretado el árbitro electoral.

 

En la cuaresma litúrgica los cristianos se preparan para la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús. En la cuaresma electoral, llamada por el IFE “intercampañas”, los políticos se preparan para pelear en el ring electoral con toda pasión, hasta la muerte si es necesario como ya ha sucedido, pero con la esperanza de que no haya resurrección para el derrotado, aunque esto en política sea difícil.

 

Peeeeero.

 

Así como para el ser humano la carne es débil, también para los actores políticos la ambición de poder es igual o peor de débil, por lo que en la ridícula cuaresma impuesta por el IFE, la clase política estará cometiendo ya los pecados políticos más inimaginables en la más completa oscuridad, porque al réferi contador de votos ahora se le ocurrió impedir que el electorado tenga más tiempo de observar y conocer a quienes aspiran a gobernarnos.

 

Alguna razón de ser debe tener esta “jalada” inventada por el IFE, la gran duda es a quién está dedicada, si al que va como puntero o a uno de los otros dos.

 

En fin. Cuando termine la cuaresma electoral, a diferencia de los cristianos que muchos concluyen este periodo renovados o purificados, una gran cantidad de aspirantes y actores políticos difícilmente habrán hecho penitencia política, pero además, en este periodo se habrán preparado para darse con todo lo que se pueda.

 

BIEN MERECIDO EL RECONOCIMIENTO de ayer con motivo del 99 aniversario de fundación del Ejército Mexicano.

 

La violencia desatada en territorio nacional, al igual que en Veracruz sigue siendo la principal preocupación de la ciudadanía, que pese a los hechos violentos que siguen ocurriendo, la población tiene depositada su confianza en las fuerzas armadas, quienes siguen enfrentando con todo valor al crimen organizado; sin dejar de reconocer como lo hemos dicho en este espacio, a elementos honestos y leales de otras corporaciones policiacas.

 

Vaya este reconocimiento al Comandante de la Sexta Región Militar, General René Carlos Aguilar Páez, al Vicealmirante Víctor Manuel Carvallo, Comandante de la Tercera Zona Naval, así como a todos los elementos que conforman las fuerzas castrenses.