24 de febrero de 2012
alcalorpolitico.com
Al término del día, ayer jueves, me quedó la impresión de que todo se trató de una tormenta en un vaso de agua, pero, más, que andan, que están muy nerviosos los priistas y hasta pareciera nada seguros de la ventaja que aseguran tiene su candidato Enrique Peña Nieto; que cualquier sombra los asusta, porque por algo que se atribuye que dijo Felipe Calderón armaron un revuelo, que no creo que pase mas allá.
Si se analiza la información fríamente, fue un supuesto dicho del Presidente lo que dio pie al escándalo que se desató y que prácticamente ocupó toda el día la atención política. Pero no fue Calderón el que dijo lo que se dice que dijo, por lo menos no en un acto o en un foro público, a nadie le consta, ni en declaración a la prensa, sino que fue un banquero el que salió a decir que el Presidente había dicho, en una reunión privada, lo que la Presidencia dice que no dijo.
¿Pero que habría dicho el inquilino de Los Pinos que casi mata del susto a los tricolores y que los hizo desgarrarse las vestiduras? Supuestamente que de acuerdo a una encuesta de la Presidencia de la República, la candidata panista Josefina Vázquez Mota está a solo 4 puntos del aspirante tricolor Enrique Peña Nieto.
Copio los dos primeros párrafos de la nota que se publicó en el portal del diario Reforma y que creo que fue lo detonó el escándalo: “El Presidente Felipe Calderón aseguró frente a los consejeros de Grupo Banamex que Josefina Vázquez Mota está a sólo 4 puntos de distancia del priista Enrique Peña Nieto, según encuestas de la Presidencia”. “Así lo aseguró en entrevista el consejero de la institución bancaria Eustaquio de Nicolás, quien participó junto con otros 700 integrantes de ese grupo en una reunión privada con el titular del Ejecutivo”.
Ese “aseguró” lo interpretó la reportera Claudia Guerrero, porque párrafos más adelante se transcribe lo que textualmente dijo el señor De Nicolás: "El Presidente nos dijo que los candidatos están muy parejos y que están a 4 puntos de diferencia”. "Nos dijo que están muy parejos, que va a ser una elección muy reñida y que ya está entre Josefina y Enrique, a sólo 4 puntos". Por lo que se advierte, Calderón no “aseguró” nada, supuestamente hizo el comentario, pero si así habría sido tampoco lo dijo en un acto público ni en declaración a la prensa ni en mitin político; si es que lo dijo, lo externó en una reunión privada y se supo solo porque el chismoso del señor De Nicolás corrió a comentarlo a la prensa.
En el mismo portal del diario Reforma se publicó: “El PRI exigió la intervención del Instituto Federal Electoral (IFE) para sancionar al Ejecutivo federal, luego que asegurara que se ha acortado la distancia entre los candidatos del PRI y del PAN en la contienda presidencial”.
"«Esperamos que las instituciones electorales sean verdaderamente impartidoras del Derecho Electoral y pongan orden, que hagan un llamado o un extrañamiento al Ejecutivo federal para que no se entrometa en la vida electoral y mucho menos en la vida interna de los partidos políticos», manifestó la secretaria general del PRI, la diputada Cristina Díaz Salazar”. Y por ahí se fueron otros connotados priistas, dando por hecho que Calderón “aseguró” lo que dicen que dijo.
"«Esperamos que las instituciones electorales sean verdaderamente impartidoras del Derecho Electoral y pongan orden, que hagan un llamado o un extrañamiento al Ejecutivo federal para que no se entrometa en la vida electoral y mucho menos en la vida interna de los partidos políticos», manifestó la secretaria general del PRI, la diputada Cristina Díaz Salazar”. Y por ahí se fueron otros connotados priistas, dando por hecho que Calderón “aseguró” lo que dicen que dijo.
La respuesta oficial fue: “La Presidencia de la República afirmó que el Presidente Felipe Calderón no opinó ni mencionó respecto a los aspirantes a la Presidencia durante una reunión que sostuvo con consejeros de Banamex esta mañana”. "«En ningún momento opinó ni mencionó a los aspirantes presidenciales en contienda, sus partidos, o propuestas programáticas», afirmó Presidencia en comunicado”.
Como se advierte, no había lugar a tanto escándalo. Pero lo que me llama la atención es la reacción tricolor. ¿Es que acaso no se sienten seguros de la ventaja que lleva su candidato, según difunden a cada rato? ¿Es que los pone nerviosos que puede ser cierto que la señora Vázquez Mota ya acortó drásticamente distancias? ¿Por qué dar crédito a lo que alguien dice que se dijo sin tener prueba directa? ¿Es que los priistas acaso saben internamente que, en efecto, pierde ventana Peña Nieto y no quieren que se sepa? ¿Si se sienten tan seguros y están seguros de la ventaja, por qué no ignorar lo que se diga que se dice de que ya es menor? La reacción priista pone a pensar que en una de esas y a lo mejor en el fondo hay algo de cierto de lo que se dice.
Creo que se ha tratado de una lectura mala y apresurada y que la ratoncita blanquiazul asustó al elefante tricolor.
Como seguramente no hay testimonio videograbado ni grabado (normalmente a donde llega el Presidente, el Estado Mayor Presidencial no deja pasar a nadie siquiera con un palillo o un alfiler, pues a todos hacen pasar por un escáner corporal, menos pudieron dejar introducir una grabadora de alguien), nadie puede probar lo que salió a decir el banquero que se dijo, pero pudo haber ocurrido, pudo haber sido que Calderón, sintiéndose en confianza, en que era una reunión privada e iba a quedar en petit comité, deslizó el comentario. Pudo haber sido.
El crédito del banquero Eustaquio de Nicolás, su testimonio, en todo caso vendría a confirmar lo que apunté ayer: “… los gobernantes, de cualquier signo, no pueden despojarse de su condición de militantes políticos y de su responsabilidad de mantener la hegemonía de su partido y por lo tanto el poder en su poder, así como de su liderazgo político, que se supone encarnan, para mantener e incrementar la fortaleza de sus siglas y colores. Si no actúan, o si no actúan a tiempo a favor de su causa, es y será su responsabilidad. El caso más patente, con todo y que se le critique y que se le repruebe, es el de Felipe Calderón, que no solo es Presidente de la república sino que se asume también presidente formal de su partido”. Como sí como no, ayer habría dado una muestra de ello.
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