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Columnas y artículos de opinión
Tierra de Babel
Carta en intercampaña
Jorge Arturo Rodríguez
24 de febrero de 2012
alcalorpolitico.com
Entrañables suspirantes a ocupar la Silla Presidencial: Mucho me alegra que al menos unas semanas nos dejen respirar y no sepamos, ni de oídas, de tanta verborrea política y esperanzadora. No sé ustedes (sé que se traen el cuento de cómo interpretar eso de “no hacer campaña”), pero celebro ese impasse de la dichosa “intercampaña” que unos llaman “veda electoral”, “cuaresma electoral” y Brozo sencillamente la tilda de “peda electoral”. En fin, hay que respetar los tiempos y las leyes, sobre todo respetar esta democracia que mal que bien pos nosotros mismos estamos construyendo.

Entretanto, me dirijo a ustedes mis candidatos (pronto los veré y oiré hasta en la sopa), para pedirles (sea quien sea el que gane la contienda y se adentre en Los Pinos), que por favor, no se olviden de cumplir sus promesas y mucho menos de los probes (ya hasta parece cantaleta ciudadana electorera, pero es que así ha sido siempre, como que no ha cambiado mucho la situación, es más, se empeora, y pos ya hasta cantamos “la vida sigue igual…”).

Y hay muchas cosas más que, como en las cartitas a Santa Claus o a los Reyes Magos, no estaría mal pedir pa’ ver cuál de todas se nos cumple. Como lo que la actriz Adriana Barraza demandó: “Acabar con la corrupción me parece lo más emergente para el país, porque ningún plan, propuesta, iniciativa o buena voluntad funciona cuando se topa con la pared de la corrupción. Es una lástima que el desencanto ya no nos deja escuchar lo que dicen los candidatos, pero seguir en el mismo carro no nos dará la oportunidad de tener esperanzas de cambio.”


Ojalá y todos nos animemos a escribir nuestra cartita a nuestros candidatos a la Presidencia, al Senado y Diputación, pidiendo, demandando compromisos y soluciones reales.

Plis, póngase las pilas pero para bien. Estamos en el mismo barco, carajos. Con razón Carlos Fuentes dijo que México vive un mal momento “porque los problemas del país están aquí, y los políticos allá, a una distancia brutal con respecto a las respuestas”.

Es eso lo que necesitamos: respuestas. Las preguntas son un chingo y las saben muy bien nuestros políticos y gobernantes.


No sean gachos, voltéense a vernos y escucharnos y atendernos, creando oportunidades concretas para mejorar nuestra vida diaria. ¿O tendremos que soportar otro sexenio más pa’ que de nueva cuenta escribamos otra cartita recordándoles que “no se olviden de cumplir sus promesas y mucho menos de los probes”?
Bueno, como es temporada de veda electoral, supongo que tendrán tiempo de leer todas nuestras peticiones y demandas. Yo sólo solicitó que no las tiren a la basura.

De cinismo y anexas

Un taxista me dijo hace unos días (letrado el canijillo y eso que aún no estaba el programa “En este taxi yo sí leo”, del cual luego comentaremos) que la verdad ya no creía nadita en los políticos y me preguntó, con una sonrisa burlona, si sabía lo que era la política. “No”, le dije. “Pos tenga usted, lea”, y me entregó un cuadernillo deshojado. “Busque la palabra ‘política’ y encontrará una muy buena definición”, sonrió de nuevo el taxista, pero esta vez como satisfecho del logro contra mi supuesta ignorancia. Leí en voz alta: “La política es el arte de obtener el dinero de los ricos y el voto de los pobres con el pretexto de proteger a los unos de los otros”, me carcajeé. “Parece broma, pero creo que en México así es en realidad, ¿no?”. No le contesté. Pagué y el taxista me preguntó: “¿Por quién votará para Presidente?” “Déjeme pensarlo, pero algo hay que hacer”, le dije.


Está cabrón esto de la política. Hagan sus apuestas, ciudadanos…

Ahí se ven.

Hasta la próxima

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