icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Cabos Sueltos
Silvia Sigüenza
22 de marzo de 2012
alcalorpolitico.com
“Atrás de la raya que voy a trabajar.” Con esta breve y casi olvidada frase iniciaban hace años su día laboral al aire libre los llamados “merolicos”. Cualquier calle, plaza o lugar público le bastaba a estos personajes para embobar al público que se iba formando a su alrededor; al que le vendían curas más milagrosas que las que traerá el Papa próximamente.

Estos señores, que tendían una manta en el piso y sobre ella colocaban desde víboras, pájaros, semillas de lo que fuera, algunos fierros oxidados, frascos con lombrices, una solitaria y todo lo que usted pueda y no pueda imaginar. Ya que había al menos cuatro incautos viendo el tendido se sorrajaba sin respirar ni tocar baranda: “ mire señora, si su hijo está panzón , descolorido, manchado como mapache, con los brazos flacos y los ojos saltados, no crea que tiene mal de ojo o lo chupó la bruja, lo que tiene es una maleta de lombrices que no lo dejan vivir…-Para estas alturas ya el público había aumentado considerablemente y entonces proseguía, y coordinadamente sacaba de un morral que tenía al lado del tendido, un frasco mugriento que contenía lo que fuera, se lo metía casi por los ojos a quién más cerca tuviera y proseguía; “ Mire señora con sólo una semana, siete días, óigalo bien que este chamaco tome las píldoras que aquí lleva, tendrá un chamaco sano, coloradote y cachetón que será su orgullo, no permita que los bichos se lo coman y …” le ponía el frasco a casi todos los presentes, por supuesto muchos caían y compraban las píldoras. Luego de esto la emprendía con quién fuera, una mujer embarazada, a la que ofrecía un chilpayate sano, gordo y colorado, pero necesitaba tomar el tónico xxx, porque la miraba ojerosa, pálida y con poca fuerza, en fin se trataba de reales embaucadores que sacaban dinero hasta de una piedra.

Se extinguieron estos merolicos, pero su lugar fue ocupado y usufructuado con creces por los políticos nacionales. Algunos egresados de universidades patitos o no, o de la universidad de los portales de Santo Domingo; otros con la secundaria o máximo el bachillerato. Una cantidad nada despreciable de la escuela de lambiches que comenzaron por ir a cuanto mitin grilloso hubiera, colándose para que el macizo del rollo les saludara; y seguir la carrera logrando como primer éxito el cargarle el portafolios, espiar a los colegas, repartir las tortas, los tacos y los chescos, subir a los compas a los camiones, y toda una serie de trabajitos de estos, hasta lograr ponerse un tacuche y ligar foto con el macizo. Muchos han llegado a las alturas.


La frase clave para ascender es “Sí Señor” Las intrigas, los chismes, el cambio de bando o patrón, el engaño al propio gurú, y muchas mañas más, son la moneda circulante para llegar.

Esto queridos conciudadanos florece en todo su esplendor en nuestra política (‘¡’¡) nacional. Aún no inician formalmente las campañas y el estercolero ya inunda medios informativos de toda clase, electrónicos, impresos, redes sociales, todo y por supuesto la más efectiva: Radiobemba.

Basta leer la sarta de chismes de patio de vecindad, historias truculentas de vidas privadas, relatos con detalles dignos de otras causas, sacadero de trapos sucios y olores viejos, más todo lo que ni les digo para no caer en la reiteración de lo que todos sabemos. Y al final del día cabe una mínima reflexión para todos estos seres: Quièn esté libre de culpa que tire la primera piedra. Si lo hicieran, tendríamos que formar nuevos políticos y nuevos partidos, porque entre tantas pedradas, se acabarían todititos.


**Parece nuevo el candidato José Yunes Zorrilla, ha mostrado y demostrado tener una piel más delgada y susceptible que la de un bebé. Saltó como pepita de calabaza en comal caliente (listo para el pipián) con la declaración del escritor Vargas Llosa, y asienta que su palabra no es ley ni definitiva, mucho menos en México. ¿ Y, la suya de él, y la del resto de los priistas sí?. Pues ya vemos que no.

Mire usted, nada más de muestra. Nos dicen los priistas que intervinieron en La Cumbre Tajín, que la derrama económica fue de 200 millones de pesos. Vamos a suponer que sí, pero ¿Y los gastos? Sin contabilizar las sumas estratosféricas que cobran los grupos sobrevivientes de Avándaro, las cantantes traídas de donde el Chamuco olvidó los botines, hoteles, alimentos y demás detallitos. Súmele lo que cuestan periodistas de los canales filiales de televisa y Tv azteca para entrevistar a Javier Duarte de Ochoa –entre otros al patán de Juan Ruiz Hily- y reseñar de pasadita el festival. El colmo traer a la bestia peluda y equipo de patanes de Ventaneando, que venden caro su amor. Más la cantante O’Connor que no llegó porque sufre de “agotamiento clínicamente comprobado” y que además, aquí entre nos, no convenía porque hizo algo horrendo contra un Papa. Sería pertinente, decente y de buen y sano gobierno que al pueblo de Veracruz se le mostraran las cuentas claras. Se vale soñar.