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Columnas y artículos de opinión
Poza Rica (12a. parte)
Luciano Blanco González
23 de marzo de 2012
alcalorpolitico.com
La Juventud Pozarricense

En aquel entonces, veíamos en el mundo del FUT BOL, los mejores regates, las fintas, los amagos y las jugadas hasta la línea de fondo en las piernas del mejor jugador del mundo en 1962, el inolvidable Patizambo, Manuel Francisco Dos Santos, “Garrincha”, quien enloquecía a la afición brasileña desde el Botafogo, el mago del balón, el inigualable extremo derecho, compartía escenario con el hasta ahora mejor futbolista de todos los tiempos El Rey Pele, desde su trinchera del Santos y juntos llevaban a Brasil a conquistar las tres copas del mundo.

En México el Chava Reyes y Héctor Hernández, los mejores delanteros del país con sus magistrales jugadas, hacían cuatricampeón al rebaño sagrado, y Antonio “La Tota” Carvajal, ejecutaba en la portería Mexicana inigualables atrapones, trallazos y bobitas eran fenomenalmente atrapadas por el hombre de León Guanajuato, se presumía que “La Tota” portereando, no dejaba pasar ni el aire, tan grande y tan vistosa era la majestuosidad de sus jugadas que merecidamente la FIFA lo incluyo en su record como uno de los 100 mejores jugadores de FUT BOL del mundo.


En tanto en Poza Rica, el profesor Rafael Cobos Fernández, director de la Secundaria Salvador Díaz Mirón, el profesor Rafael Peres López, director de la Secundaria y preparatoria Gabino Barreda. El profesor Francisco Pérez López, director de la Secundaria Justo Sierra, Los maestros Agustín y Octavio Ochoa Arana, el primero director de la Secundaria Nocturna Mi Patria es Primero, la profesora Felipa Onofre de Aparicio, directora de la Academia John Gregg, El profesor Valentín del Castillo, director de la Academia Miguel Hidalgo, doña Matilde Cantu de Lam, directora de la Academia Mercantil Poza Rica.

Todos ellos apoyados en insignes maestros, moldeaban con singular paciencia y sabiduría, a la generación del esfuerzo, al hombre nuevo de Poza Rica, al que emergía de las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial, a la generación en cuyos oídos bullían los rumores, con noticias frescas desde las cercanas aguas del Río Pantepec, anunciando que desde su lecho, una madrugada había salido un grupo de Jóvenes encabezados por el Comandante Fidel Castro, coreando al unísono en el silencio nocturnal, ¡Patria o muerte; Venceremos! para abanderar la triunfante Revolución Cubana,

A la generación educada en el repetido eco, una y otra vez, “un fantasma recorre América, pregonando y luchando por la libertad de todos los pueblos del Continente. El fantasma del Che Guevara” en su lucha antiimperialista, ¡Hasta la Victoria Siempre¡


Una generación emocionada en el radio de Pila grande y candentes bulbos, escuchando que al sur en Guatemala, un joven oficial militar, el comandante Luis Turcios Lima, encabezaba con un grupo de jóvenes oficiales una rebelión contra las estructuras dominantes

Y mas al sur, un sacerdote, el cura Camilo Torres en Colombia encabezaba la lucha social, con una nueva teoría eclesiástica denominada Teología de la Liberación y que desde la Universidad de Bogotá, pedía a los estudiantes organizarse para luchar «con armas iguales» contra las fuerzas del orden y que en su mensaje a los cristianos, nos decía: Cuando hay una autoridad en contra del pueblo, esa autoridad no es legítima y se llama tiranía. Los cristianos podemos y debemos luchar contra la tiranía. El gobierno actual es tiránico porque no lo respalda sino el 20% de los electores y porque sus decisiones salen de las minorías privilegiadas.

¡El deber de todo Cristiano es ser revolucionario y el deber de todo revolucionario es hacer la revolución!, Y se oía que acá mas cerca en Nicaragua, el espíritu combatiente de César Augusto Sandino, estaba presente en la lucha guerrillera de su país.


Como no se iban a inflamar los pechos de la Juventud Mexicana, si en las débiles brisas, antes de las tormentas de 1968, cuando reinaba el autoritarismo y la dictadura del mal gobierno Diazordacista, un grupo de jóvenes estudiantes, maestros rurales y campesinos, victimas de la represión, perseguidos y casi sentenciados a muerte por sus ideales, asaltaron un 23 de Septiembre de 1965, el cuartel del Ejercito Mexicano, ubicadas en Maderas Chihuahua, con funestos resultados para el embrión de la guerrilla nacional, ya que todos ellos cayeron abatidos en su romántico e iluso intento de derrocar al Gobierno.

La juventud pozarricense vivía una intensa jornada ideológica y política, la Juventud Comunista, la Liga Obrera Marxista, la Cuarta Internacional, formaban células y cuadros juveniles que abrazaron la causa del proletariado y mantenían un activismo social que cernía lo que llamábamos las viejas estructuras, tanto en la Ciudad como en el campo.

Por su parte el Movimiento Familiar Cristiano, la Asociación Nacional de Acción Católica, desplazaban a nuestra ciudad sus mejores ideólogos para catequizar las jóvenes mentes Pro capitalistas y reaccionarias, que después germinaron en el MURO, la organización fascistoide que la iglesia reaccionaria de México utilizó para golpear a los estudiantes progresistas del país en el movimiento de 1968.


Por su parte los talleres masónicos en aquel entonces abrieron sus puertas a la juventud, brindándoles la luz de los templos masónicos de Fe Luz y Verdad así como de Vértice, por conducto de la AJEF. Asociación de Jóvenes Esperanza de la Fraternidad, de donde emergieron jóvenes brillantes.

Lo cierto es que quienes aprovecharon la efervescencia y bisoñes de la juventud, fueron los agentes imperialistas de los Estados Unidos, que a través de la CIA, mantenían en sus nominas de informantes y activistas a un buen numero de agentes, Al igual que los rusos, que con sus rublos, mantenían la guerra fría, entre oriente y occidente, entre el capitalismo y el comunismo. Y los ideales y el romanticismo juvenil en medio, sintiéndose o bolchevique o Guerrillero o simplemente revolucionario en oposición a los reaccionarios, derechistas, capitalistas pro imperialistas….