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Columnas y artículos de opinión
Al Pie de la Letra
Eclipse de luna
Raymundo Jiménez
23 de marzo de 2012
alcalorpolitico.com
Aunque los cinco ministros de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinaron este miércoles 21 negar la liberación “inmediata y absoluta” a la francesa Florence Cassez pese a que reconocieron algunas violaciones constitucionales y de tratados internacionales que su defensa acreditó durante el proceso penal que se le inició desde diciembre de 2005 por el presunto delito de secuestro, lo cierto es que el secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, tampoco salió bien librado ya que por unanimidad los jurisconsultos condenaron el montaje televisivo que ha puesto en duda la legalidad del juicio instruido contra esta supuesta cómplice de la banda criminal de “Los Zodiaco”, aprehendida hace más de seis años por la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) que entonces dirigía el actual titular de la SSP de la administración calderonista.

Este caso seguramente impactará de manera negativa en la campaña electoral de la candidata presidencial del PAN, Josefina Vázquez Mota –la cual se ha negado a fijar distancia del presidente Felipe Calderón, de su cuestionado gabinete de seguridad y de su errática estrategia de combate al crimen organizado–, ya que los miembros de la Primera Sala de la Corte decidieron elaborar un nuevo proyecto de sentencia que le fue turnado a la ministra Olga Sánchez Cordero, por lo que este polémico caso en el que está implicado directamente García Luna seguirá generando ruido mediático y en las redes sociales hasta las elecciones federales de julio próximo.

El titular de la SSP, quien pese a sus yerros y sospechas es uno de los secretarios más consentidos y protegidos por el presidente Calderón, estaría por ser denunciado por los abogados de Cassez, pues en opinión del ministro de la Corte, Jorge Pardo Rebolledo, de origen xalapeño, el montaje que hicieron para Televisa y TV Azteca la mañana del 9 de diciembre de 2005 en el Rancho Las Chinitas “es un acto reprobable (…) que debe ser sancionado en los términos de la ley y que, desde luego, deja mal parado este principio de buena fe ministerial respecto de las autoridades que autorizaron y propiciaron estas conductas”.


García Luna se convertirá además en un incómodo lastre para Vázquez Mota, en cuyo discurso ha venido reiterando que de llegar a la Presidencia de la República propondrá al Congreso implementar “cadena perpetua” contra los funcionarios cómplices del crimen organizado, además de comprometerse a castigar con todo el peso de la ley a los políticos que “laven” dinero de los cárteles de la droga.

Sin embargo habrá que ver cómo libra este espinoso asunto la candidata presidencial del PAN, pues en julio de 2011, al ser ratificado como embajador de Estados Unidos en México por el Senado de su país, Earl Anthony Wayne confirmó que una de sus principales tareas sería investigar seriamente los señalamientos contra García Luna por sus presuntas relaciones con el narcotráfico.

En la audiencia de confirmación del cargo para el que lo propuso el presidente Barack Obama, efectuada el 20 de julio en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadunidense, el legislador republicano por Indiana, Richard Green Lugar, le preguntó por escrito a Wayne: “Por favor, explique sus puntos de vista respecto a las acusaciones de que el secretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, está ligado al crimen organizado”.


Días después el senador Lugar recibió la respuesta de Wayne, también por escrito: “El Departamento de Estado toma con seriedad todas las acusaciones sobre los lazos del crimen organizado. Si soy confirmado (como embajador en México), yo también tomaré con mucha seriedad ese tipo de acusaciones y el equipo de la embajada de Estados Unidos les dará un seguimiento apropiado”.

Lugar, el republicano de mayor rango en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, siempre se ha interesado en las sospechas sobre García Luna y en la versión de que la lucha militarizada del presidente Calderón no está dirigida contra el cártel de Sinaloa, que encabeza Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.

Desde diciembre de 2010, este senador republicano, que es uno de los legisladores más influyentes en el Capitolio en materia de política exterior, así como asesor del presidente Obama, buscaba ampliar la ayuda antinarcóticos para México pero bajo la condición de que se investigara la corrupción del narcotráfico en los más altos niveles del gobierno federal. Además planteaba una mayor participación de la inteligencia del Pentágono en los operativos de la Secretaría de Marina (Semar) y, en segundo término, en los del Ejército.


Curiosamente excluía a los cuerpos policíacos que dependen del secretario de Seguridad Pública. Pero, al parecer, no era fortuito. Y es que al legislador del Partido Republicano le preocupaba que en algunas causas judiciales sobre presuntos actos de corrupción entre efectivos de la Agencia Federal de Investigación –iniciadas hace siete años– se mencionara el nombre de García Luna, a cargo entonces de la AFI.

Hace tres meses, en diciembre de 2011, al salir en defensa del ex secretario foxista de Seguridad Pública, Alejandro Gertz Manero, a quien García Luna responsabilizó de la fuga del “Chapo” Guzmán del penal de Puente Grande, Jalisco, y de haber desmantelado las estructuras policiacas del país, el ministro de la SCJN en retiro y actual presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, Juventino Castro y Castro, acusó al funcionario calderonista de mentir dolosamente y de incurrir en injuria, pues aclaró que el responsable real del escape del capo del Cártel de Sinaloa fue Wilfrido Robledo Madrid, un vicealmirante ligado familiarmente a García Luna y cuya hechura le atribuyen porque fue el primer titular de la Policía Federal Preventiva (PFP).

“Él incurrió en innumerables irregularidades como responsable de esa instancia, las cuales lo pusieron al borde de la cárcel”, dijo Castro y Castro, el cual reviró que si la imagen de la PFP y del sistema de inteligencia se encuentran destruidos no es por Gertz Manero sino por Genaro García, “quien viendo su falta de pericia, capacidad, profesionalismo y seguridad se dejó manipular por quien en verdad maneja la secretaría: Robledo Madrid, su tío político.


“Los resultados están a la vista: más de 50 mil muertos, no hay un sistema de inteligencia que los impida y tampoco un programa de prevención que los combata”, remató el legislador, quien afirmó que como secretario de Seguridad Pública, García Luna “no estaba infiltrado por la delincuencia organizada, sino era parte, junto con su equipo de trabajo, de una serie de funcionarios relacionados con los distintos cárteles de la droga (‘El Chapo’ Guzmán, Beltrán Leyva, ‘La Familia Michoacana’, etcétera). Tal es el caso de Édgar Bayardo y del propio secretario particular de García Luna, Mario Arturo Velarde Martínez, involucrado en cuestiones de narcotráfico, es decir, tenía vínculos con ‘El Mayo’ Zambada”.

No obstante, Enrique Peña Nieto, candidato presidencial del PRI, se quejó en febrero pasado que el gobierno federal había implementado una campaña para desprestigiar al priísmo en el extranjero mediante la versión de que establecería nuevos pactos con el crimen organizado. “No tengo más que el señalamiento y los comentarios de personajes que están en el extranjero, particularmente en Estados Unidos, que nos han hecho saber, ‘aquí ha habido presencia de funcionarios del gobierno federal, quienes señalan que, de llegar el PRI al gobierno, las cosas volverían a supuestos acuerdos’ y especulan sobre este tema”, denunció el abanderado priista, quien de llegar a la Presidencia de la República difícilmente procedería contra García Luna, pues el vicealmirante Robledo Madrid fue comisionado de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE) en su administración en el Estado de México.